𝐖𝐢𝐬𝐞 𝐚𝐬 𝐚𝐧 𝐎𝐥𝐝 𝐐𝐫𝐨𝐰 (𝐓𝐫𝐚𝐝𝐮𝐜𝐢𝐝𝐨)

XLI

Arte de portada: Aristeo Storm

Capítulo 41

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El tiempo pasaba demasiado rápido para que Qrow pudiera seguirlo. Siempre se había preguntado cómo parecía pasar cada vez más rápido a medida que uno envejecía. Cuando era adolescente, sentía que una semana era una eternidad y, como adulto, una semana pasaba en un abrir y cerrar de ojos.

Ozpin le había explicado una vez que se trataba de una cuestión de percepción y de porcentajes: que una semana representaba un porcentaje mayor de la vida cuando uno era joven y, por lo tanto, parecía más larga. Que, a medida que uno envejecía, la duración de una semana se sentía cada vez menor porque había vivido muchas de ellas y comenzaba a desconectarse y a funcionar con el piloto automático. Dado que el hombre había vivido millones de semanas en su vida, era algo así como un experto.

Pero las seis semanas aproximadamente entre su llegada a Vale y el comienzo de Beacon parecieron pasar volando, incluso con Willow allí para exigir mejoras a sus armas y Taiyang y Raven causando rutinas de comedia casi diarias con su coqueteo. Incluso después de que Qrow construyera Eagle y Talon, a los que se negó a llamar The Eagle's Talons porque eso era ridículo, el tiempo pareció pasar rápidamente.

Probablemente el estrés constante por Mountain Glenn ayudó. Había regresado no menos de veinte veces, explorando la ciudad en busca de alguna debilidad evidente o falla obvia, pero por supuesto no había ninguna. Si las hubiera habido, Ozpin y el ejército de expertos que estaban construyendo el maldito lugar ya las habrían encontrado.

La noche anterior a Beacon fue algo estresante. Qrow no tenía idea de por qué. La idea de que fracasaran en la iniciación era ridícula dado que eran más fuertes que la primera vez, y aún así, seguía despierto por la noche temiendo lo que podría salir mal. Raven y Summer obviamente no estaban mejor dadas sus apariencias agotadas a la mañana siguiente, y Qrow sabía que sería lo mismo para casi todos los asistentes.

Había una razón por la que Beacon obligaba a los estudiantes a dormir en la escuela antes de comenzar la iniciación al día siguiente. Querían que la gente estuviera completamente descansada y siempre existía la posibilidad de que los que venían de lugares más lejanos sufrieran jetlag. Beacon quería que sus estudiantes potenciales estuvieran en su mejor momento, porque quería reclutar a los mejores. Obligarlos a todos a estar en igualdad de condiciones era una buena idea.

Lo que hizo que se preocupara aún más, porque sabía que hoy ni siquiera llegarían a la iniciación. Esto era literalmente presentarse, mirar alrededor, escuchar un discurso y luego asistir a una gran fiesta de pijamas.

Pero a su cerebro no le importó.

Estrés, pánico y ansiedad.

—Oh, mira, Qrow es tan malo como nosotros —dijo Summer, bostezando—. Eso me hace sentir mejor, en realidad.

—Vaya, gracias —Qrow clavó una salchicha en el desayuno y se la metió en la boca—. ¿Ustedes dos tampoco duermen?

—A la mierda con todo —gruñó Raven—. Pero Summer tiene razón. Me molestaría muchísimo si te vieras radiante como una margarita. Es bueno saber que puedes estresarte con nosotros, simples mortales.

Aunque era cierto, hubiera preferido no estar tan nervioso por eso. El desayuno fue un asunto murmurado y luego se dirigieron a la zona de atraque, donde se encontraron con Willow con una gran colección de maletas en el camino y luego encontraron a Gretchen ya allí, mordiéndose las uñas y hojeando un libro de texto intensivo de último minuto.