CAPÍTULO 9
>A R I A R O D R Í G U E Z<
—Era de noche, estaba en el bosque, en busca de cerezas para mi nieto y me lo encontré. Sus ojos eran amarillos, ámbar, parecía un gato, no sé bien. ¡Y sus dientes! Tenía colmillos. Las venas de su cuerpo parecían a punto de estallar y cuando escuché un crujido, su pierna se dobló de una forma extraña, para nada vista.
Qué extraño eso que me cuenta. He descartado la idea de una nueva especie de vampiros.
—¿No mencionó nada acerca de tu... sangre? —Pregunto expectante.
—No —Niega—. Ni una palabra —Hizo una corta pausa—. Me miraba como su presa, su alimento, como si fuera un filete.
—¿Y luego que sucedió? —Pregunta Vane ansiosa.
—Eché a correr. —Responde el anciano tranquilamente, lo cual me hace sospechar.
—¿Y como terminó con esas graves heridas? —Pregunto mirando las lesiones en su piel.
—Me caí —Contesta y juro que no me creí eso, de no ser por decir lo siguiente:—. Saliendo del bosque, seguía escuchando esos crujidos y sus gritos. ¡Pero eso no era todo! También aullaba. Y de repente todo estuvo en calma y me detuve —Guardó silencio bajando la cabeza y cerrando sus ojos—. Fue un error haberme detenido, un lobo con pelaje gris me saltó encima e intentó morderme —Levanta su cabeza y nos mira con seriedad—. Y claro, me tuve que defender —Se encogió de hombros—. Así fue como terminé así.
—¿Había luna llena? —Se atreve a preguntar Vanesa y la miro de reojo sin decir nada. Algo se traerá ella entre manos, alguna teoría debe tener.
—No lo sé, no me fijé en ese detalle.
—¿Hace cuánto sucedió esto? —Pregunto y me mira.
—La pasada noche.
—Okay. —Llevo mi vista al registro y escribo lo que sé que debo poner para que no sospechen.
—¿Sí me creen, verdad? —Pregunta el anciano de pronto y lo miramos.
—Yo te creo —Le responde Vanesa colocando su mano sobra la de él y me mira asintiendo—. Ambas te creemos.
•~•P•~•D•~•S•~•
—¿No quieres que te acompañe? —Me pregunta por décima vez desde que le dije que me iría al bosque. Luego de terminar mi jornada laboral, me vine a la mansión con Vane y preparé todo.
—No, estoy bien. —Le contesto ajustando las correas de mi overol.
—Aria, déjame ir —Suplica y niego—. Esos malditos chupasangres tienen que pagar.
—Y lo harán —Coloco mi mano en su hombro dejando un suave apretón—. Pero tú te quedarás y punto.
—Está bien. —Dice resiganda.
—Cuida de Lucifer —Le digo mirando a mi traicionero gato que está durmiendo en sus brazos—. No lo consientas demasiado, ¿eh? —Le advierto y se ríe asintiendo.
—No te preocupes. —Me da una última mirada y bajo las escaleras con la mochila preparada.
Llego al parking en busca de mi auto sin haberme encontrado a alguien, o eso creí cuando lancé la mochila a los asiento trasero de mi auto y escuché su voz.
—¿Aria?
—¿Blake? —Hablo en su mismo tono volviéndome a él, sacudiendo mis manos, o guantes de motociclista, mejor dicho.
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Pacto de Sangre (Completa)
FantasiElla es alguien a quién nunca desearás conocer. Él es condenadamente atractivo como lo es ella. Ella es excesivamente peligrosa tanto como él. Él es indiferente cuando de alimentarse se trate. Un vampiro y una humana, dan inicio a su historia con un...