25

240 25 11
                                    

Al despertar notó que Jungkook no estaba, este había dejado acomodada la manta que usó y sin más desapareció. No le sorprendía, era obvio que eso sucedería. Le dió unos snacks a su pequeña mascota y comenzó a alistarse para le a la empresa, hacía dos días que no iba y muchas reuniones se atrasaron por eso. Finalmente salió de la casa para subirse a su auto e irse a la empresa, dónde la esperaría Yerim.

Nadie de allí sabía su embarazo, ni tampoco quería que lo supieran. Los chismes corren rápido por los pasillos, sabía que si decía algo sus padres se enterarían y le darían un sermón de horas. Algo que no le apetecía.
No estaba lista para soltar la sopa, quería esperar al menos hasta unos seis meses para finalmente dar la noticia. Tal vez así, nadie haría la típica pregunta de: "¿quién es el padre?" de tan sólo pensarlo se le erizaba la piel.

Yerim le entregó un café mientras acomodaba unos archivos sobre el escritorio. Era un día muy atareado, reunión tras reunión y apenas le daba tiempo de comer. Su bebé al parecer comenzaba a tener hambre, su estómago crujía por lo que al acabar la última reunión del día decidió pedir un poco de comida e invitar a su asistente a comer con ella.

— Tengo mucha hambre, parece que no como hace días.

Soltó una pequeña risa mientras le invitaba sentarse a la rubia, ambas comenzaron a comer mientras mantenían una conversación del trabajo. No había reuniones hasta el día siguiente, por lo cuál tal vez se irían temprano a casa. La puerta de la oficina se abrió sin permiso haciendo que ambas mujeres miraran a esta, Ahri se levantó rápidamente de su asiento mientras sentía como su corazón empezaba a latir con fuerza, Taehyung estaba ahí parado con una sonrisa que le hacía dar escalofríos. Yerim confundida se acercó a la castaña, notó la palidez de su piel como si fuera que vió un fantasma.

— ¿Quién te dejó entrar?

— Hola, Ahri. También estoy encantado de verte en persona. —dijo con un tono sarcástico mientras se acercaba hacia el escritorio, dónde allí con atrevimiento fue capaz de tomar un poco de su bebida. — Oye rubia, sal de aquí que quiero hablar con ella a solas.

— No le hables así, su nombre es Yerim. El único que se va de aquí eres tú, vete antes de que llame a seguridad.

No tenía permitida la entrada al edificio después de lo que pasó aquélla tarde, pero al parecer nadie lo reconoció. Estaba cambiado, su cabello ya no era de un castaño oscuro sino de un azul claro, su ropa era más elegante y su rostro estaba algo diferente... Como si se hubiera hecho algunas cirugías plásticas. De alguna u otra manera se las ingenió para ingresar al edificio.

— Solo quiero hablar, Ahri. ¿Tienes miedo o qué?

— ¿Miedo a tí? No me hagas reír por favor. —se sentó nuevamente en su asiento. — Yerim, espera afuera.

— Sí, si necesita algo solo llámame. —dijo para luego salir de allí, dejándolos solos. No se iba a quedar con los brazos cruzados.

— ¿De qué quieres hablar? Quiero almorzar tranquila.

— Me enteré lo de tu bebé. —puso sus dos pies sobre el escritorio, demostrando comodidad. — Jungkook debe estar contento... Ah, espera, el no quiere saber nada sobre su hijo, ¿me equivoco?

— ¿Quien te dijo?

— Vamos Ahri, tengo ojos en todos lados. Sé lo que haces, lo que no, con quién estás y hasta lo que comes. ¿Crees que este gran detalle no lo iba a saber?

Ahri no respondió. No quería demostrar miedo pero eso es lo único que sentía en ese momento, temía de lo que él pudiera llegar a hacer ahora que sabía sobre su embarazo. Le daba temor pensar lo enferma que podría llegar a ser su mente. Vió como éste se levantó de su asiento para acercarse a ella con lentitud, Ahri no se movió, ni siquiera emitió un sonido. Menos al sentir la respiración de él tan cerca de su oído.

Al sentir la mano del mayor en su cabello no tardó en alejarse, se levantó y lo empujó evitando que siguiera tocándole. A Taehyung no le gustó nada esta acción, inmediatamente la tomó del brazo para luego tirarla hacia el escritorio, dónde provocó que la sopa tibia se derramara sobre ella. Sintió un dolor leve en su abdomen, antes de que Taehyung pudiera hacer algo colocó sus dos manos sobre este, cubriéndolo por precaución.

— Idiota. —la miró con cierta molestia mientras pasaba una mano por su rostro algo frustrado. — Mira lo que me haces hacer, Ahri. No quise lastimarte pero tú y tu estupidez me tientan.

— Dime que quieres y sal de aquí, por favor.

— ¿Por qué tan apresurada en que me vaya? ¿Viene el idiota de Jungkook a verte o qué? —con fuerza tomó de su cabello, obligándola a mirarle.

— Me asustas, Taehyung. —confesó. — No pienses en mí, sino en mi bebé por favor. No me-...

— ¡No menciones al bastardo de tu hijo!

Gritó cerca de su rostro, en la oficina se oyó el impacto de su mano en la mejilla de la castaña, dejando a ésta en el suelo. Las lágrimas no tardaron en aparecer, ahora sí comenzaba demostrarle miedo y parecía que él disfrutaba de eso. Antes de que este pudiera hacer algo la puerta finalmente se abrió dejando ver a Jennie junto a Jimin quiénes habían sido llamados por Yerim, Taehyung soltó una risa irónica al verlos mientras ponía sus manos en su cintura.

— Ahora sí estamos completos.

— Llama a seguridad. —dijo un Jimin mientras miraba a Yerim, quién inmediatamente obedeció. Era horario de almuerzo, obviamente casi nadie iba a estar rondando por ahí.

— Ahri, ¿estás bien?

— Claro que está bien, ¿eres ciega o qué? Por eso siempre me caíste mal, Kim. —dijo irritado. — ¿Dónde está el estúpido de Jeon? Creí que vendría a "rescatar" a su amada.

— No sé dónde está. Taehyung hablemos como personas civilizadas que somos, no es necesario lastimar a Ahri. Está esperando un-...

— ¿Un hijo?

Completó la oración con una sonrisa irónica. No tuvo pena ni consideración en patear con fuerza a la castaña, como si se tratase de basura. Ahri soltó un quejido de dolor, para su suerte no había logrado tocar su abdomen gracias a que estaba de espaldas pero sí logró romper algunas costillas.
Su show se acabó cuando vió varias personas hacerse presente, los de seguridad no tardaron en detenerlo a lo que él no puso ninguna resistencia. Pareciera que eso era lo que esperaba.
Jennie se acercó a su amiga y junto a Yerim le ayudaron a levantarse pero simplemente era imposible dar un paso, su cuerpo dolía.

— ¿Por qué él no vino? —miró a Yerim.

— Lo llamé, señorita Shin...

"Pero el simplemente dijo: No es mi problema, estoy ocupado."



_______________________________________________

Holaa, ¡gracias por las 14 mil vistas! Los quiero mucho y gracias también por siempre estar, leer y tenerme paciencia con mi actualizaciones lentas. Tengas lindo día y cuídense del frío.

No olvides votar ⚝ te quierooo! 𖹭𖹭𖹭

Neighbors;; jjkDonde viven las historias. Descúbrelo ahora