ᯓ★ capítulo tres

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Sin miedo.

—Al parecer esto es tuyo

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—Al parecer esto es tuyo...

La respuesta salió casi inmediata. Natural y sin necesidad de más.

—Gracias...

—Anton Lee. —el alfa se dobló en una reverencia. —Encantado de conocerte.

Wonbin río ligero, una sonrisa apareciendo en su rostro.

—Park Wonbin. —se presentó.

Anton le sonrió también, sacando a relucir sus lindos dientes.

Era como una pequeña burbuja donde no existía nada más que ellos, sin necesidad de pensar que ocurría con sus lobos. Solo sus humanos haciendo su propio "clip".

—Wonbin... —el nombre salió de sus labios. —De verdad espero volver a verte.

El rubio se quedó sin palabras, se miraron a los ojos un poco más antes de que el alfa diera un paso fuera de su campo de visión, alejándose y rompiendo el contacto.

Wonbin llevó una mano a su pecho, soltando un suspiro que reflejaba su confusión.

¿Qué había sucedido? ¿Y por qué parecía que ese olor a café sería tan difícil de olvidar?

Todo fue tan corto e inesperado, un tonto cliché repetitivo, él odiaba eso, entonces ¿por qué no se sentía así? ¿Por qué su omega estaba tan feliz?

Anton, por otro lado, caminaba de vuelta a su facultad, con una sonrisa tonta en sus labios. Haber presenciado a Wonbin más de cerca, escuchado su voz y sentido su aroma, fue una sensación difícil de explicar. Su lobo estaba feliz y él también, porque por un momento olvidó que ese chico podría ser su omega, simplemente fue Anton conociendo a Wonbin.

Un momento corto, pero perfecto, no necesitaron nada más, pues el destino haría su trabajo, estaba seguro de eso. Porque ahora que la vida le dio un pequeño momento con ese rubio, no quería desaprovechar lo que podría venir.

Cuando la noche llegó y el alfa se encontraba en la comodidad de su casa, aún no perdía la sonrisa, todos podían notarlo.

—¿Por qué mi cachorro está tan feliz? La casa entera huele a café, cariño. —habló su padre sentándose a su lado.

Anton se sonrojó, no estaba consciente de estar desprendiendo su aroma.

—Solo estoy feliz papá. —respondió.

Jaehyun sonrió, amaba ver a su pequeño alfa feliz, era su razón para vivir pleno.

—¿Y eso se debe a…?

Anton pensó en decirlo, pero quería estar seguro de que su omega quiera algo con él antes de esparcir la noticia.

—Cosas.

My little big love ᯓ★ Wonton Donde viven las historias. Descúbrelo ahora