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"Estoy tan-tan cansado, ¿por que bebiste tanto? ahora tengo que llevar tu trasero a tu casa." Se queja el omega caminando unos metros adelante, con un ramo gigante de rosas rojas en sus manos. "Leyla se va a encabronar"
"Llévame a tu apartamento, Shou."
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Katsuki toma a Harumi en sus brazos y mete el bolso atrás con una mano, cuidando la cabeza de la niña al meterla adentro.
—Déjalo, yo lo hago.—Dice viendo que Shoto está a punto de desarmar el coche. El omega alza una ceja apretando el botón; Katsuki rueda los ojos para amarrar a Harumi en el asiento de atrás, algo enternecido con la niña que se ríe mientras juega con el collar que cuelga de su cuello.—¿Así te metes al corazón de la gente, no?
Susurra, y Haru solo se carcajea en respuesta. Él termina dejándolo colgado en el cuello de la niña para que se entretenga en el camino y luego ayuda a Shoto a subir, ante la mirada dudativa de la señora. Luego hecha a andar el vehículo, despúes de que Shoto se despide de la mujer.
—Siento lo que dije minutos atrás, no pensé que...
—Pensé que serías una tumba.
—Sobre tu marido falso, nada más.—Shoto lo mira para cuestionar, pero él niega, cumpliendo con que no hablará de Tensei.—Te oí en todo minuto, no creí que llorarías de esa forma.
—El embarazo me hace llorar por todo.—Shouto parece evitarlo. Aun así, se mantiene mirando con cuidado las calles.—Espero que Leyla lo esté pasando mejor que yo.
Katsuki frunce el ceño, por fin hilando que Shoto se fue antes que todo el desastre ocurriese, por lo que no sabe que...
—Lo tiramos abajo.—Dice sin quitar la vista de la carretera.— Oficialmente soy soltero otra vez.
Bromea, como si Shoto fuera a dejar la bonita vida que tiene aquí, con su preciosa hija, futuro bebe, guardaespaldas y marido perfecto por él, para seguirlo a un apartamento donde Katsuki le hizo la vida un infierno.
Katsuki no le llega ni a los talones a Tensei el bastardo es un maldito proveedor natural.
Katsuki lo odia, quiere encontrar esas pruebas y meterlo preso.
—¿Qué?... ¿Por qué carajos-? —Shoto lo mira como si hubiese arruinado algo.—¿Qué hiciste?
—Ella estuvo trayendo gente a la casa. Los mellizos no eran míos, todo se vino abajo muy rápido después que te fuiste.—Shoto pestañea antes de reírse frustrado; pero se detiene abruptamente luego de unos minutos.
—Lo siento.—Shouto lo mira con culpa, pero algo más flashea en sus ojos, Katsuki no sabe que exactamente. Pero suena mucho más como si hubiera cometido un crimen tremendo que Katsuki no podría perdonar.
