Capítulo 17

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Este capítulo está dedicado a mis a niñas, AngieDelfin6, airam_marin_16  y mi bella Richel (se me olvidó el nombre de tu usuario xd), las amooooo 😍❤️espero les guste este desmadre que leerán a continuación. 

Las adoro y por eso les dedicó este capítulo bastante... Mejor lean 😂😂😂

☆☆☆☆☆☆☆
Noche de drogas, explosivos y alcohol. 

Milán. 
Había cancelado la noche de chicas dado que tenía asuntos más importantes, los cuáles me llevarían toda la noche. Una sonrisa surca en mis labios, cuándo tomo la mochila que contiene los explosivos que vamos a utilizar.

Vayan hasta el lado izquierdo ahí está el punto ciego de las cámaras —avisa Satanás desde el auricular.

—Ya quiero que esté lugar quede en llamas —Christina se tambalea.

—¿Ya estás ebria?

—No preguntes lo que ya sabes —es lo que dice.

Ruedo los ojos.

Menos charla y ya muevanse de una puta vez —espeta Satanás.

Me trago todo lo que le iba a decir y me muevo con Christina al punto ciego de la cámaras en lo que Cora hackea el sistema de seguridad del edificio, acomodo las mochilas que contienen los explosivos en una esquina, mientras que Christina se lleva la botella de whisky a los labios.

No era para nada coherente lo que haríamos, muchos menos ebrias, a excepción de Cora, quién era la única que seguía sobria. Aunque con o sin alcohol en el sistema hacíamos cosas poco coherentes.

Explotaríamos un estacionamiento lleno de autos lujosos y costosos, mis hermanas estaban de acuerdo conmigo y juntas lo llevaríamos acabo. Cora era la única sobria y consiente de lo que hacíamos, pero ella apoyaba lo que planeamos hacer.

—Entra al sistema de seguridad.

—En eso estoy Milán.

Ruedo los ojos mientras veo como los de seguridad rodean el área, era algo bastante extremo y peligroso sin contar el hecho de que ellos ya conocían el territorio. Pero no conocían al demonio y las psicópatas que tenía por hermanas, así que no serían nada contra nosotras.

—Christina hoy puedes matar todo lo que se te antoje —le quito la botella y ella sonríe como una psicópata ante mis palabras.

—Esto será una maldita carnicería.

Hago un gesto afirmativo con la cabeza.

—Ya entre al sistema —avisa mi hermana desde el a auricular—. No sólo se vendrá abajo el estacionamiento, el edificio también, estos explosivos aún no están cien porciento aprobados.

—Hoy los probaremos nosotras.

—Obviamente, pero arrasará con el edificio y probablemente la calle entera —comenta Satanás a través del auricular—. El Boss me los dio para que hiciera con el algo productivo o eso supongo.

Una sonrisa surca en mis labios ante sus palabras. 

—Técnicamente si haremos algo productivo.

—No creo que explotar un edificio por celos sea algo productivo —espeta con sarcasmo.

Ruedo los ojos aunque no me vea.

—Claro por qué fue muy productivo lo que le hiciste a Azrael hace un año.

Tentando a un Demonio [+21]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora