𝐓𝐡𝐞 𝐖𝐨𝐫𝐥𝐝 𝐈𝐬 𝐔𝐠𝐥𝐲 | 𝙶𝚞𝚜𝚝𝚊𝚟𝚘 𝙲𝚎𝚛𝚊𝚝𝚒

¿Vampiros, dragones? Y muchos zombies

- Tomás - Gustavo murmuró, retorciéndose y temblando como si estuviera teniendo un ataque epiléptico o algo por el estilo.  - Tomás. ¿Dónde está Tomás?. Sus palabras eran arrastradas y sus extremidades golpeaban por todos lados, mientras su voz aumentaba. - ¡Tomás!¡Tomás! - Gritó, teniendo un ataque, y Zoe fue la primera en reaccionar.

Brincó hacia Gustavo, agarrando sus muñecas con sus manos y sus piernas con sus pies. Era pequeña, era ligera, no era muy fuerte para contenerlo, pero aún así puso mucho de su parte.

- Gus, Gus soy yo, cálmate.-  Dijo suavemente, sus labios cerca de la frente de Gustavo, pero el mayor siguió gritando, el nombre de su hermano era lo único que su lengua le permitía soltar.

- ¿Qué pasó?- Charly preguntó aturdido.. mirando entre Bianca y Gustavo, intentando decidir quién estaba más ensangrentado.

- Solo... no.- Bianca dijo, sonando y sintiendo como si su lengua fuera demasiado grande para su boca. Hizo una mueca cuando Gustavo se retorció, y tomó las manos de Gustavo mientras ella le susurraba, intentando hacer que se calmara. Su cabeza dolía, palpitaba, incluso, y cerró los ojos con fuerza. - No importa.- Charly sabía que no debía presionarls, sin importar lo mucho que lo quisiera, sin importar lo mucho que ver a Bianca cargando a un Gustavo temblando lo asustara.

Habían conseguido el combustible; las latas estaban en la puerta principal, mal puestas, pero con suerte llenas. Las tomó, llevándolas a la cocina, lanzando una última mirada a los otros tres antes de colocarlas en el mostrador.

Para cuando regresó, Gustavo seguía temblando, pero ya no gritaba, y Bianca había soltado sus manos. Gustavo abrazaba a Zoe, y Zoe también lo abrazaba, el rostro de ella en su cuello y las manos de él alrededor de ella. Bianca se dejó caer en una de las sillas, reposo su cabeza entre sus manos y había sangre seca en sus uñas.

Charly se sentó en el brazo de la silla, a su lado, colocando una mano suave sobre su espalda y dando caricias en círculos. -¿Fue un zombi?- Preguntó.

Bianca miró hacia Gustavo. - No. No sé qué fue. Fue... algo diferente. Algo que nunca antes había visto.-

•°•

El sol estaba alto en el cielo cuando se acomodaron en el auto. Gustavo rápidamente se quedó dormido en el asiento trasero, su cabeza sobre el hombro de Zoe, mientras Charly se unía a Bianca en el frente. Se sentía extraño estar en un vehículo movible real, algo que era mucho más rápido y seguro que dos pies. No había nada más en los caminos, además de un auto volcado y los restos de lo que parecía ser un venado.

Bianca y Charly hablaban tranquilamente, y Zoe pretendía dormir, cuando de hecho estaba escuchando lo que estaban diciendo. Obviamente.

-¿Entonces era humano?-

-No exactamente.-

-¿Pero no era un zombi?-

-Para nada.- Pausa. -Se sintió, sabes... genéticamente modificado. Pero no como los zombis. Peor que zombis. Mucho peor- Otra pausa. - Quiero decir- Una mirada hacia el asiento trasero, hacia Gustavo más específicamente. La siguiente palabra murmurada como un susurro. - vampiro, pero -

- Esos no existen. -

-Precisamente.- Otra pausa, más larga esta vez. -Son más fuertes. Su piel es más dura. ¿Ya ves cómo los zombis son... flexibles?-

-Flexibles.-

-Sí, como... su piel... puedes aplastarla.- Un bufido. Probablemente Charly. -Cállate. Los zombis se pudren. ¿No has tocado uno antes?-

-¡No! ¿Qué clase de idiota haría eso?-

Zoe rodó los ojos detrás de sus párpados. Tonto.

- Literalmente puedes arrancarle un brazo a un zombi. Puedes arrancarlo y sacudirlo y golpear al zombi con él en la cabeza, pero eso no lo hace menos peligroso.-

-¿Qué tiene que ver eso con los vampiros?-

- Nada... solo... mira, era físicamente imposible arrancarle el brazo a la cosa que nos atacó, porque era más fuerte, la piel era más dura, y lo más importante, no se estaba pudriendo.-

- ¿Entonces cómo es que están cubiertos de sangre si se supone que esa cosa los mataría?-

-Porque hice la única cosa lógica y le clavé una estaca.-

Hubo una pausa, y luego alguien, presumiblemente Charly, rompió en carcajadas. Zoe tenía que admitir que clavarle una estaca era bastante divertido, o al menos la idea de hacerlo. Las ideas eran divertidas, siempre y cuando no lastimaran a nadie, sobre todo a quienes duraran doce años. La idea de un apocalipsis zombi fue de risa alguna vez, hasta que, claro, se volvió una horrible y asesina realidad.

Gustavo se removió en sueños, retorciéndose y casi codeando a Zoe en las costillas, y la conversación cesó momentáneamente mientras los de adelante del auto se aseguraban que el frágil joven siguiera durmiendo. Zoe, quien se estaba volviendo bastante buena en fingir, dejó que Gustavo se acurrucara más contra él en el espacio apretado, y se desconectó de las voces de Bianca y Charly, empezando a quedarse dormida también.

-Los vampiros no existen, Bianca.- Charly protestó. -No pueden.-

- Voy a llamarlos así por ahora. Es lo único en lo que puedo pensar.-

-Pero... pero, ¿qué tal que es algo más?-

- No tuve tiempo para examinarlo, Charly.-

Hubo silencio por parte de Charly mientras. lo pensaba, y luego usurró, -¿crees que son un nuevo tipo de... especies?-

Bianca solo se encogió de hombros. -No lo sé. No es imposible. Es decir, si han hecho zombis, ¿quién dice que no harán vampiros? ¿Hombres lobo? ¿Dragones?-

-¡¿Dragones?!-

-Tal vez.-

-Dragones.-

-Cállate, Charly.-

•°•

Había un cuerpo en el suelo. Claramente muerto, cubierto de sangre, su brazo izquierdo en algún lugar a tres pies. Parecía mutilado, como si perros salvajes lo hubieran atacado, pero ese no era el caso. Claro que no.

Y el hermano del cuerpo no podía dejar de gritar, su voz ronca y su garganta seca. Sacudió el cuerpo, llorando su nombre una y otra vez, ignorando la sangre en sus manos y rodillas. Sentía que su corazón estaba siendo partido en dos. Su peor pesadilla se había vuelto realidad y ahora literalmente no le quedaba nada Se giró hacia la figura parada a su lado, lágrimas bajando por su rostro, y gritó más, porque su garganta no estaba lo suficiente ronca.

-¡Esto es tu culpa!- Gritó. -¡Lo dejaste morir! ¡Lo mataste!-

La figura se quedó en silencio, inconsciente del grado de dolor que había causado, y el hermano era inconsciente de la culpa ardiente en el estómago de la figura. Hubo sollozos, fuertes y destrozados sollozos, y la figura se dio la vuelta dándole la espalda. Al parecer eso era lo peor que podía hacer.

-¡No! ¡No te atrevas a alejarte!-

La figura no se volteó.

-¡Mírame! ¡Mira lo que has hecho!-

La figura no se volteó.

- ¡Zoe Vegas, mírame. -

°°°

-¡Bianca!-

Hubo un repentino chirrido de llantas en el asfalto, y un grito, maldición, y Zoe abrió los ojos de golpe. El carro se había detenido, y Charly y Bianca brincaron, y Zoe miró alrededor mientras Gustavo abría los ojos.

-¿Qué pasó?- Preguntó Gustavo, pero Zoe negó con la cabeza señalando al frente.

Bianca miró atrás, frunciendo el ceño. -Hay un chico sentado en el medio del camino y casi lo atropello. -

🧟‍♂️🧟‍♂️🧟‍♂️
Agarrense que se viene intenso después ansoqndiakjdjw.