GOOD GIRL GONE BAD ➳ Choi Yeonjun/Choi Beomgyu /BOOK#2 [TERMINADA]

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ೃ⁀➷Los terrores nocturnos, el padecimiento de Malía en el primer libro, se me ocurrieron de una chica que padecía lo mismo en Teen Wolf, mi seria favorita. Lo vi y me entró curiosidad, lo estudié y se ocurrió que crear a un personaje con ese padecimiento sería estupendo.

ೃ⁀➷La dulcería favorita de Malía que visita en el capítulo#23 del segundo libro es la misma en la que Yeonjun habla de ella en el prólogo del primer libro donde él le había tomado una foto antes de empezar con el plan. Sí, la propia dulcería de su madre.

ೃ⁀➷La historia me habla por sí sola, nunca tuve pensado que Beomgyu se enamoraría de Malía ni que Eva era iba a ser hermana. También han jugado conmigo.

ೃ⁀➷La segunda vez que tuvieron sexo Yeonjun y Malía en este libro y la actitud rara de Yeonjun fue porque se dio cuenta que ella había tenido algo con Beomgyu. Él es lo suficiente analizador para no advertirla algo.

ೃ⁀➷La primera persona que hable de mi libro con ella fue a mi prima, la chica en que inspiré al personaje de Lizzy. Y lo divertido fue que la misma noche que le conté todo lo que tenía ideado para el primer libro, la traumó y soñó con eso. A la otra mañana me dijo que había un psicópata en sus sueños jajajajaja.

ೃ⁀➷Hablando nuevamente de los terrores nocturnos ¿Recuerdan el terror nocturno de Malía? Es una persona quemada, ella desde un inicio tenía su mente trabajando en recordar ese día que habló con Yeonjun y le contó de sus pesadillas. Yeonjun y Malía comenzaron a ser atormentados por el mismo demonio de sus sueños. Eso se contará en el primer extra que haré, donde se hable de la conversación entre Yeonjun y Malía de pequeños.

ೃ⁀➷Sí, hay extras pronosticados y los que no, irán apareciendo de poco en poco.

ೃ⁀➷Habían dos personas que le escribían a Malía por el celular en el primer libro. Uno era Soobin quién la ayudaba. El otro era Ten, quién ya tenía planeado lo que iba a hacer con ella. Pero ella a quien hablaba y conocía como "desconocido" era a Soo ya que este le daba pistas.

ೃ⁀➷Yeonjun surgió como personaje antagonista e antihéroe del primer libro. Tanto que todos lo odiábamos fuertemente. Esa era la idea y lo conseguí.

ೃ⁀➷Algo que les diré os va a dejar locos con esta afirmación que voy a dar a continuación: odiaba a Malía. Sí, damas y caballeros ¡Odiaba a mi personaje protagonista en el primer libro!
Y el porqué es que no soportaba que fuera tan ridículamente tonta. Es tan estúpida que fue fácil de manipular, nunca vio las señales frente a sus ojos y siempre vivió deseando romper la "monotonía". A mi gusto es el personaje más mongólico del libro. Tan tonto que yo pensaba a la vez que lo odiaba e escribía "niña como te voy a hacer sufrir por estúpida". No me malentiendan, eso fue en el primer libro. Malía siempre fue una niña que lo tenía todo: la familia perfecta; dinero; influencias; una gran amiga e amigos varones que la adoraban como es el caso de Jungkook, Suga y Jeno; hermanos que se desviven por ella; un padre encantador; y dos madres que hasta aquel momento eran el sinónimo de afables; llena de personas que se preocupaban por ella. Esa chica le pasó todo por ser tan inocente, inexperta y muy, muuuuy tonta; o como decimos en Cuba: le faltaba calle. Un poquito de calle y nada de esos acontecimientos le hubiese llegado de sorpresa por culpa de Yeonjun. Ya lo habría notado desde sus inicios.
Uno de los personajes principales que más incómodos me fue a la hora de escribirlo, tan diferente a mí como el agua al fuego. Yeonjun me hace solo un cuarto de lo que le hizo a Malía y yo jamás lo hubiese perdonado, le caigo a golpes no, a palazos y martillos. Prefería que terminase con Beomgyu o Jeno, ¡hasta Soobin! Esos tres sí eran buenos partidos, chicos que la amaban de todo corazón y se preocupaban realmente por ella. Sin embargo, me caía más mal Malía que Yeonjun; literal, Yeonjun era un hijo de puta pero tenía sus razones. Malía era tonta al cubo porque le daba la gana e empecinada en seguir con lo de su psiquiatra a sabiendas que no era bueno ni pintaba bien. Miles de veces me dieron ganas de entrar al libro a darle unos bofetones a la Agreste para ver si espabilaba o abría los ojos. En fin, Malía en el primer libro fue lo más tedioso que me enfrenté a mi pasatiempo como escritora de Fanfic. Esa fue la razón por la que tuve que darle una personalidad más fuerte en el segundo libro, una que fuera mucho menos ingenua, una más grotesca, madura ¡No iba a aguantar seguir con un personaje así! ¡Me sacaba de quicio!
Ya la Malía del segundo libro sí pensaba, sí se daba cuenta de las cosas, sí sentía la realidad. Esta no vivía con un paño en los ojos. Fue solamente con esta maduración la que comencé a sentir lástima por cada cosa que le hice pasar, después de todo ella solo era una chica ingenua e inocente. Terminé amando a su personaje. El lazo que la une a mí es bastante fuerte justo ahora.
Y me di cuenta que tanto yo, como la escritora e ustedes los lectores, empezaron a encariñarse con el personaje a la vez que yo. Cada vez que ella maduraba con cada caída o golpe, todos comenzamos a sentir por ella. Porque fue un gran personaje que floreció, creció, se desarrolló unido a nosotros. Me puse realmente contenta cuando vi como Opcical se declaraba su amiga personal e hasta la defendía, o como el resto de lectoras me decía "si yo fuera Malía me suicidara con todo lo que le pasa". Ahí me di cuenta que creé a un personaje muy rico, uno capaz de madurar con nosotros ¡Inclusive todos ustedes lo hicieron el más popular y querido en el test que hice!
Malía fue un personaje que del odio pasé a tenerle aprecio. Seguía siendo un poco tonta de vez en cuando, cometía errores, pero fue más humana. Ya había perdido todo lo que tenía; se hundió en el barro, salió e luchó por su cuenta sin la necesidad de que un príncipe la rescatara, tomó sus decisiones con sabiduría y nunca dejó de luchar a pesar de todo lo que le caía encima. Aun así, quedó bondad en su corazón, cariño, amor, vergüenza... se convirtió en alguien tan humano que pensé que saldría del libro a darme sermones algún día por lo que le hice pasar.
Me sentí bien de crear un personaje tan estúpido, humano, empático y fuerte como ella.
Me encantaría poder decirle: "Siento mucho lo que te hice pasar". Probablemente ella me mataría si se enterara de eso.