14.

445 31 8
                                    

20 de Octubre 2023
|Medellin, Colombia 5:20pm|

Camino hacia mi habitación me di tiempo de responder los mensajes de mi familia, iba tan metida en el celular que de momento choque contra algo, levante mi vista asustada y me tensione totalmente al ver a Kevin ahi parado con sus manos escondidas detras de la espalda.

— ¿Como llegaste hasta aquí? — Fue lo primero que pregunté tomando distancia, guardando mi celular en el bolsillo de mi pantalón.

— Daniela déjate hablar, por favor. — Rodé los ojos al escuchar mi segundo nombre en su boca. — Vengo a pedirte disculpas.

Eso llamo mi atención por lo que me cruce de brazos negando y camine rumbo a la puerta de mi habitación, estaba ofendida todavía por sus extraños comportamientos.

— Ajá ¿Como por que debo escucharte? — Pregunte mientras sacaba las llaves para abrir.

— Traje tus flores favoritas y chocolates. — Mencionó mostrándome sus manos, había un pequeño ramo de girasoles y una jumbo. — ¿Aun somos mejores amigos?

Me detuve en seco al ver los girasoles y la jumbo de chocolates en sus manos. Me sentí un poco confundida y emocionada al mismo tiempo, el sabia que loos girasoles eran mi flor favorita y la jumbo de chocolates era mi debilidad.

— ¿Por qué haces esto, Kevin? - pregunté, tratando de mantener mi distancia emocional, yo no eran tan fácil.

Kevin se acercó a mí, con una mirada suplicante en sus ojos, inhalo como si no supiera por donde empezar.

— Quiero que sepas que lo siento mucho, Lau.Me equivoqué al pensar que había algo entre tú y Richard, me dejé llevar por mis celos y te traté mal. — Dijo mientras me veía a los ojos, lo sentí sincero por lo que tome lo que me ofrecía oliendo las flores.

Estaba un poco sorprendida por su sinceridad, pensé que le tomaría más tiempo aceptar sus cargadas, pero aquí estaba admitiendolo, el sonrió porque noto que lo estaba considerando.

— ¿Y por qué debería perdonarte? — pregunté, tratando de mantener mi orgullo.

Kevin sonrió y se acercó un poco más.

— Porque eres mi mejor amiga, Laura - dijo en un tono más bajo. —Y no quiero perder tu amistad o lo que sea que lleguemos a ser por mi estupidez.

Me sentí un poco conmovida por sus palabras aunque ignore lo último. Kevin había sido mi mejor amigo durante mucho tiempo y no quería perder nuestra amistad tampoco.

— Está bien - dije finalmente sonriendo mientras terminaba de abrir la puerta. - Pero no vuelvas a hacerlo, ¿entiendes?

Kevin asintió con la cabeza, con una gran sonrisa en su rostro, empuje la puerta y di un paso adentro.

—Lo prometo. Gracias, Lau significas mucho para mí.

Me sentí un poco aliviada de que todo hubiera salido bien, le hice una seña con la cabeza para que siguiera luego me acerque dándole un abrazo.

— Estas pendejo, pero ya acepte tus trastornos.

Kevin se rió y me abrazó fuerte, yo también me reí y nos quedamos así por un momento, disfrutando del reencuentro. Luego, nos separamos y entramos a la habitación, Kevin cerró la puerta y se sentó en la cama, yo hice lo mismo.

— Ve pero vas entrando como Pedro por tu casa, en fin ¿Quieres chocolate? - pregunté, sosteniendo la jumbo con una gran sonrisa.

Kevin asintió con la cabeza y sonrió, yo le di un pedazo y nos quedamos comiendo en silencio por un momento, por fin sentia todo como de nuevo quizás solo estabamos perdiendo el tiempo.

¿Muy convencido? - Richard RiosDonde viven las historias. Descúbrelo ahora