3. Una muy buena suerte

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Pasaron los días. Juan llegó a casa, oficialmente estaba de vacaciones, le entregó el boletín de notas a su padre.

―Muy bien Juan pero este verano vas a trabajar eh.
―Si papá

Le devolvió el boletín y Juan fue a su habitación, tiró la mochila al suelo y dejó el boletín de notas en un cajón de la mesita de noche. Había aprobado todo, la mayoría con matrícula de honor y lo que peor se le daba con notables. Juan suspiró, se quitó los zapatos y abrazó su peluche de baby yoda. Si, tiene diecinueve años y aún duerme con peluches. Se quedó dormido después de unos minutos.

Pasaron las horas y se despertó sin saber donde estaba, que día o que hora era, ni siquiera sabía si habían pasado años meses semanas días u horas. Cuando vio la hora y la fecha se levantó y fue a la ducha.

Cuando salió de ducharse con el pijama puesto, su hermano llegó a casa y fue corriendo a la habitación de Juan.

―¡JUAN!, ¿DÓNDE ESTÁS?

Juan entró a la habitación y se sentó en su silla.

―¿Que pasa?
―Ve comprando billetes de avión para España y busca un buen hotel
―¿Porqué?
―¡EL SORTEO CABRÓN!, ¡TENEMOS LAS ENTRADAS!
―¿QUE?, ¿ES NETA?
―¡TE LO JURO!, sé que son las originales monte preocupes por eso
―¿Y a papá?
―De eso también me encargo yo, tú solo encárgate de comprar dos billetes de avión para Barcelona, te dejo mi tarjeta y tú me das el dinero, ¿vale?

Drako sacó su cartera y le dio la tarjeta a su hermano.

―Si necesitas algo dímelo

Juan sonrió y abrazó a su hermano fuerte.

―Gracias Drako, te quiero

Drako le abrazó de vuelta.

―Yo te quiero mucho más idiota...se que es tú sueño y yo quiero verte cumplir tus sueños

Juan sonrió y le miró.

―Que cursilada que acabas de decir
―Lo sé, no me vas a escuchar nunca más decir eso

Ambos rieron y juan se sento en su silla y buscó vuelos para Barcelona.
Estaba a punto de cumplir uno de sus sueños.

―No sé que clase de brujería has hecho pero tienes mucha suerte
―Yo tampoco entiendo como es esto posible, dios, estoy súper emocionado

Drako sonrió. Ver a su hermano feliz le hacía feliz, sabía que si no hubiera conseguido esas entradas Juan habría estado más deprimido de lo usual. Juan compró los billetes de avión

―¡Vuelos comprados!
―Un placer hacer negocios contigo

Juan se rió.

―Voy a buscar un hotel...
―Si, yo voy haciendo la maleta, y apunta cuanto te gasta que lo que te gastes me lo debes

Drako salió se la habitación y Juan apuntó en un post it cuanto costaron los boletos de avión. Estaba nervioso y emocionado a la vez. Iba a ser la primera vez que salía de Colombia y encima tenía posibilidades de conocer a su streamer favorito. Encima iba a conocer cultura de otro país. Ganaba de cualquier forma, estaba demasiado feliz.
Después de comprar lo necesario fue con drako y le devolvió la tarjeta y el dinero que ahorró.

―¿Ya?
―Si, ya, tu dinero y tu tarjeta...¡NOS VAMOS A ESPAÑA!

Drako sonrió, sabía que su hermano estaba feliz y emocionado.
Juan volvió a su cuarto e hizo la maleta. Estaba impaciente, necesitaba de una vez ir a España.

―Bueno, voy a decírselo a papá...
―Gracias por hacerlo por mi
―No te preocupes Juan, entiendo que hablar con papá se te hace muy difícil...
―"Entiendes"...realmente no lo entiendes Drako...ese señor debería estar en la pura cárcel...

Juan empezó a llorar al recordarlo todo. Drako se levantó y le abrazó.

―Tenía seis años cuando empezó...y lo pude terminar a los 15...y mató a la única persona que me creyó y me defendió...
―Yo también te habría creído...
―Pero estudiabas fuera y no nos llamábamos apenas...
―Etes muy fuerte Juan...venga tranquilo...voy a hablar con papá y ¡NOS VAMOS A ESPAÑA!

Drako le secó las lágrimas, juan sonrió.

―Las únicas lágrimas que quiero son de emoción, no de tristeza

Juan se secó los ojos y asintió.
Drako le abrazó y luego llamó a su padre ya que estaba trabajando.

―Drako, ¿que quieres?
―¿A que hora vienes?
―En media hora, ¿por?
―Pata decirte algo
―¿Que has hecho?
―Nada, ahora te cuento, ahora nos vemos
―Adiós

Drako colgó y Juan fue a su habitación. Empezó a hacerle algún dibujo en papel a Spreen y también le haría un dibujo a otros streamers.

Su padre llegó y Juan se quedó en su habitación escuchando la conversación de Drako y su padre.

―Papá, Juan y yo nos vamos a España
―¿Porqué?
―Pues para visitar otro país
―No, no podéis ir
―No te estaba pidiendo permiso, te estaba informando, para algo yo tengo 21 y Juan 19, por cierto hay que hacerle una tarjeta a Juan

Drako sonrió.

―¿Cuándo os váis?
―En tres días
―¿Cuándo volvéis?
―No tengo idea de cuando vamos a volver
―Vale, mañana le llevo a hacer la tarjeta
―Voy con ustedes.

Drako fue a la habitación de Juan. Juan ni lo notó, estaba con sus cascos escuchando música y dibujando, estaba concentrado.
Drako le dió un toquecito en el brazo, Juan se giró y le miró quitándose los cascos.

―¿Pasa algo?
―Mañana vamos a ir a hacerte una tarjeta, ya tienes 19

Juan asintió, se puso los cascos y volvió a lo suyo. Drako salió de la habitación cerrando la puerta. Juan continuó dibujando todo lo que quedaba de noche, realmente no durmió.

A través de una pantalla // Spruan Donde viven las historias. Descúbrelo ahora