Dulce presentación

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— ¡Ay no!, mi pastel...

Atsushi se tambaleó un poco tras sentir el impacto. Al abrir sus ojos notó como su uniforme estaba lleno de pastel y que a su lado había otro chico, con un rostro triste y un puchero en sus labios.

— ¡L-Lo siento!, No te vi al...

— ¡No me importa!, debes comprarme un pastel, después de todo, ¡tú chocaste conmigo!— Atsushi se fijó mejor en el aspecto del muchacho, era un poco mas bajo que él, cabello castaño, hermosos ojos verdes. Probablemente era de cursos mayores a él.— ¡Hey!, ¡¿Me estas escuchando?!

— A-Ah...¡si, lo siento!, ¿tu nombre es?

— No es algo necesario por ahora. ¡Solo quiero mi pastel!— el peliblanco soltó un suspiro y sacó su monedero.

— ¡Oye pero espera!, ¿y que hay de mi ropa?

— Hm, no es culpa mía. Tu no ibas mirando el camino.

— ¡Pero tú también pudiste hacerte a un lado!— Atsushi soltó un largo suspiro al notar que el contrario no estaba interesado en el estado de su vestimenta.— Bien, vamos a la cafetería, te compraré otro pastel.

— ¡Bien~!

Ambos muchachos se movilizaron a la cafetería, donde Atsushi compró un pequeño pastel con chocolate que el castaño eligió. Tras esto, tuvieron que realizar una pausa para que el albino se limpiara la ropa.

Finalmente, se devolvieron a la terraza y se sentaron juntos.

Finalmente, se devolvieron a la terraza y se sentaron juntos

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— ¡Okey!, como me caíste bien, me voy a presentar ante ti. — El castaño sonrió orgulloso y se paró frente al albino. — Me llamo Ranpo Edogawa. Soy de 3ro medio.

— Oh, mucho gusto...yo soy

— Atsushi Nakajima de 1ro, el hermano de Dazai.

Nakajima se quedó perplejo ante la rápida interrupción de Ranpo. Para cuando logró reaccionar, se puso muy nervioso.

— ¿C-Cómo sabes de mi relación con D-Dazai?

— El me dijo. Además, con solo ver tu actitud con él y como te escondes cuando pasa, es obvio que ahí ocurre algo. Tuve mis sospechas, le consulté a Dazai, y bueno, me dijo la verdad— El menor sintió como se le bajaba el azúcar de golpe. Probablemente si hubiera estado de pie, se caía.— Pero hey, no te angusties, se lo mucho que te preocupa que los demás se enteren. Tu secreto está a salvo conmigo.

— Gracias Ranpo...

— No hay de que, en fin. Espero nuestra conversación te haya agradado, pero debo irme...me esperan para almorzar. De hecho, me desvié por nuestro encuentro..deben estar buscándome.

— Ah, si, tranquilo, ve. Y gracias por la conversación, fue muy agradable para mi...— ambos se sonrieron levemente.

— Me alegra oír eso, ¡Bien, nos vemos luego! — Edogawa estaba a punto de retirarse pero, al dar unos pasos, paró en seco— Ah y, Atsushi...

— ¿Hm?

— Gracias por no juzgarme.

Y sin más, el mayor se fué, dejando a un Atsushi muy confundido.





Nota de Autor

Holaa!, espero q se encuentren bien de donde estén hajaha, gracias por continuar apoyando mi historia. Pronto se vendrá la mejor parte. Asi que prepárense!!

Un beso de Judas [Shin Soukoku]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora