Muñeco encontrado (5ª temporada MUÑECO)

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Bill.

Simone me miraba con mala cara desde el sofá; yo seguía de pie, junto a Gordon. Y Tom... había desaparecido con Helem.

La idea no le hacía nada de gracia a nuestra madre, se notaba.

- No me miréis como si estuviera loca, es normal que no quiera que mi hija este cerca de...

- Es tu hijo también, por mucho que no lo quieras. Es tu hijo, es nuestro hermano. -La rabia empezaba a encenderme. Me destrozaba el alma que Simone hablara así de Tom, y que sin embargo a mi me endiosara, ella no quería verlo; pero en eso tan terrible que había hecho Tom... yo era algo más que una victima; yo también había formado parte. 

- Yo... yo no quiero perder los nervios, esta conversación no va a llevar a ningún lado, vamos a cenar y ya está. -Se levantó y fue directa a la cocina, apretando con fuerza los puños, con un repentino ataque de hiperactividad. -Helem, cariño, ¿ponemos ya las galletas a hornear para el postre? -Su tono de voz cambió en cuanto se dirigió a nuestra hermana. 

Estratégicamente, Simone y Helem estaban sentadas a la otra punta de la mesa, lo más alejadas posible de Tom. ¿Por qué estaba haciendo esto mi madre? ¿Qué pretendía con esta cena sin sentido? Si lo estaba pasando fatal en esta situación...

- Y bueno, Tom, ¿qué tal estos años? No hemos sabido nada de ti. -Gordon interrumpió el silencio incomodo que nos acompañaba desde el primer momento. 

- Pues... No sé que decirte. -No sé porque notaba nerviosismo en las palabras de Tom, quizás no se esperaba que Gordon medio actuara como si nada hubiese pasado, y la verdad es que yo tampoco lo esperaba.

- ¿Cómo está papá? -Intenté ayudarlo en este intento de conversación que había empezado Gordon.

- Oh, Jörg se ha vuelto a casar. -A mi madre se le cayó el tenedor al suelo con esa frase, haciendo un estrepitoso sonido sobre el parqué. Gordon la miró confuso durante un segundo, pero luego volvió a posar su atención en Tom. -Y se ha mudado con ella a Leonberg. Hace algo más de un año, antes de que nos quedáramos sin casa. 

Oh, no, Tom no hace falta que cuentes como le prendiste fuego a tu propia casa...

- ¿Quedaros sin casa? -Preguntó Gordon, y yo solo rezaba para que, si Tom contaba la verdad, al menos la adornara un poco. Haciéndolo quedar menos psicópata. 

- Pues a ver... -¿Lo estaba intentado? - La noche que murió mi madre... Tuve que acabar con todos los recuerdos. -No, por supuesto que no lo estaba intentando, a fin de cuentas, era Tom.

Gordon miró directamente a Simone, buscando en su mirada alguna respuesta a aquella afirmación de que estaba muerta. Pero Simone no tenía ni idea de lo que hablaba mi hermano. Estaba igual de descolocada que Gordon. 

- Helem murió el año pasado. -Terminé la frase por mi hermano. Viendo que él disfrutaba del desconcierto del que no salían ni Simone ni Gordon. 

- Pero... ¿No había fallecido mucho antes? -Por fin nuestra madre decidió unirse a la conversación como algo más que espectadora. 

- No. Solamente quedó tetrapléjica en un accidente; por salvarme la vida. -Tom estaba siendo fríamente sincero, esta conversación era tan parecida a aquella que tuvimos en el pasado... Que daba miedo. La única diferencia era que ahora solo Simone y Gordon lo miraban como si estuviera demente, yo... Yo lo miraba comprendiendo y entendiendo todo lo que decía. Yo ahora pertenecía y conocía ese mundo de oscuridad en el que mi hermano había crecido.

El silencio volvió a adueñarse de la estancia, solamente se escuchaban los cubiertos haciendo ruido sobre el pescado que teníamos en el plato. Si es que estábamos cenando lo mismo que aquella noche... Pero esta vez, Tom si sabía cómo comérselo. Parecía que no había pasado el tiempo, pero en verdad habían pasado siete años.