12
Incidente Jennifer
—Háganlo sin mí.
Five y Vera entraron a la habitación, pero podía ver que ninguno de los traía buena cara, Lila se acerca a ayudarme para abrochar lo que sea que sea esta cosa y le dedico una sonrisa irónica.
—¿Algo que decir antes de que papá me licúe el cerebro? —murmure.
Lila me mira con seriedad, al parecer si tiene algo que decir.
—Perdón por haberte mentido —habló.
—Está bien —acepté—, entre esposos no debe haber secretos Lila, es una regla.
—Lo sé, no más secretos —aseguró—, quiero que nos tomemos un tiempo Diego, para replantear lo nuestro —soltó.
Estoy a punto de reclamarle y me pone en una cosa en la boca que me evita hablar, empiezo a forcejear y a gruñir para que ella regrese y me explique las cosas, pero simplemente se aleja de mí y me ignora.
—¿Diego está bien? —preguntó Vera.
Quería decir que no con la cabeza, pero también la tenía atorada entre la máquina, Lila me mira y da suspiro muy largo.
—Si, esto es nuevo para él por eso esta así —mintió.
El viejo enciende la máquina y una luz roja ilumina la habitación, mientras que yo sigo gruñendo para que me saquen de aquí, no quiero recordar, quiero arreglar las cosas con mi esposa, una alarma rara empieza a sonar y esto se ve cada vez más tétrico.
—¡Espera! ¿Esto dolerá? —preguntó Luther.
Era muy tarde para preguntar eso.
—Indudablemente —respondió Reginald.
Claro, ya que no podemos salir de aquí.
Una luz blanca nos ilumina la cara como si fuera un proyector.
—Fue un accidente trágico, Ben murió porque fracasamos como equipo, nadie fue responsable y todos fuimos responsables. Ben Hargreeves representaba lo mejor de nosotros, Ben era la academia Umbrella.
La voz se escucha amplificada, reconozco que somos nosotros por las imágenes de los niños con uniformes que se proyectan sobre nuestro rostro, el zumbido se intensifica y la cabeza me comienza a doler, solo se escuchan los balbuceos de mis hermanos y yo intentando gritar.
14 de octubre de 2006.
—Rápido niños, tenemos una misión —la voz del viejo se escucha acompañada de la alarma de misiones—. Número uno, reúne a todos.
—Los quiero a todos listos —ordenó Luther mientras aplaudía por el pasillo—. Muy bien Diego.
—Yo siempre estoy listo —hable con triunfo.
—Prepárense ¡Rápido!
La voz de Luther estaba por toda la academia y solamente yo iba detrás de él, abre la puerta del baño y podemos ver la misma escena de siempre, Allison intentando sacar de su tina a un muy drogado Klaus.
—¿Me estás tomando el pelo Klaus? Acabas de salir de rehabilitación —dice Allison bastante frustrada.
Mientras que Klaus solo ríe y ríe.
—Dejé las drogas pesadas, Allison —murmuró.
Allison le dedica una mirada de frustración a Luther quien solo los apresura más.
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Sempiterno.
Teen FictionSi algo está destinado a ser, será. Si hay algo que tenga que pasar, pasará. No podemos cambiar el pasado, porque dañariamos el futuro, no podemos cambiar el futuro, porque dañariamos el presente. Y, ¿qué pasa si ya no hay una solución? ¿Qué pasa c...