Capítulo XXIV

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— He dicho, que la voy a guiar — exigió ahora con un tono de voz más agresivo que la primera, la mirada de Katsumi se dirigió hacia la rosada y vio cómo su rostro giraba hacia ella, sus nervios salieron a flote, a pesar de estar con un físico distinto, no dudaba en que ella la reconocería al instante.

Sin esperar respuesta lo empujó lejos de ella, escondió su chakra y salió corriendo de ahí, intentó apresurarse con el Hiraishin no Jutsu, había marcado el camino mientras se dirigía a Sunagakure.

Espero llegar antes de que sea tarde — pensó mientras se dirigía a dónde creía que intentarían extraer a la bestia de una cola, esperando poder salvar a Gaara antes de que él pudiera morir, dejando a un joven muy nervioso junto a una kunoichi de la hoja muy consternada.

— ¿Quién te lo dio? — insistió Sakura.

— Ya le dije la verdad, no sé quién era, me dijo que era de aquí y que quería ayudar, pero por protección propia y de todos quería permanecer en el anonimato.

— Esto no es de alguien de aquí, aquí dice coclearia, cuando en Sunagakure se le dice grama de escorbuto.

— Discúlpeme, pero no tengo la forma de saber eso, no tengo información alguna de esa persona.

— Bien — cedió finalmente la joven — no hay tiempo que perder tráiganme todos estos ingredientes de inmediato, tenemos que salvar la vida de Kankuro.

— A la orden — todos comenzaron a obedecer, no tardaría en terminar el antídoto, aquella nota había facilitado las cosas.

— También... me dijo que debían de partir de inmediato a la guarida de los Akatsuki.

— ¿Hay más? Habla con claridad y di todo lo que esa persona te dijo, ¿no sabes lo importante que es lo que sea que te haya dicho?

— Me dijo que el plan de los Akatsuki era sacar a la bestia de una cola del cuerpo del Kazekage, eso lo mataría.

— ¿Qué más te dijo?

— Ella...

— ¿Ella?

— La persona — aclaró el joven — dijo que el proceso de extracción es de varios días, pero el escondite es lo suficientemente lejos para llegar cuando ya sea tarde.

Sasuke... ¿tú sabías de plantas? — se preguntó la chica, con la esperanza de que fuera él, era obvio que alguien de la aldea de la hoja había mandado eso, no podía ser alguien que viviera en Sunagakure, pues esa persona se mostraría, en cambio, el informante había decidido no revelar su identidad, debía de ser alguien que había desertado, pero el chico se había referido a la persona como "ella" — algo me dice que sería más probable que Katsumi lo haya mandado, ¿cómo consiguió toda esa información?

Después de dar el antídoto a Kankuro, todos iban a descansar, la pelirrosa había decidido no contarle a nadie lo sucedido, dar la información significaba decir de dónde la consiguió y por consecuencia, decir sus sospechas sobre la identidad del informante, sabía que si alguno de sus compañeros oía el simple nombre de la joven, se distraerían entorpeciendo la misión, su prioridad era el Kazekage.

A la mañana siguiente fue despertada por el sonido de los perros rastreadores llegando, habían encontrado el lugar donde los Akatsuki retenían a Gaara, decidió no interrumpir y escuchar lo que platicaban con Kakashi.

— Lo hemos encontrado.

— ¿Dónde lo tienen? — interrogó el peliplata.

— ¿Tienes un mapa?

— Claro.

— Está aquí — el perro señaló una parte del mapa, no era lejos, pero calculaban que al menos durarían más de un día caminando.

Yᴏsᴏᴋᴜ |𝑁𝑎𝑟𝑢𝑡𝑜 𝑈𝑧𝑢𝑚𝑎𝑘𝑖|Donde viven las historias. Descúbrelo ahora