𝑶𝑵𝑬 𝑶𝑭 𝑼𝑺 || hector fort

31- ready

El día transcurrió bastante normal, nada fuera de la rutina.

Comimos y descansamos, ya que estábamos muertas, y también porque había que descansar, ya que iba a ser una noche larga y entretenida.

Habíamos quedado a las 21 y ya eran las 19. La siesta se había alargado más de lo debido, y sabiendo lo que tardábamos nosotras en prepararnos, nos decidimos por empezar pronto.

Varios golpes sonaba en la puerta, mientras elegíamos el oufit de la noche. Yo me dirigí a esta para abrir, encontrándome con la silueta de mi ex mejor amiga.

-Que quieres Elena? - pregunté entre suspiros.
-Puedo prepararme con vosotras? - hablo con vergüenza.

La respondí cerrándola la puerta en la cara, ya que evidentemente después de todo no la íbamos a dejar que volviese a ser nuestra amiga así por así. Ni perdón ni nada, flipante.

De oufit, acabamos optando por unos vestidos a conjunto, el mío negro y el de Sofia rojo. Eran cortos, por encima de las rodillas, y ceñidos al cuerpo, resaltando nuestras curvas.

Yo fui la primera en ducharme, ya que tardaba menos, y cuando salí me maquillé y me vestí. Una vez que tuve seco el pelo, me lo planche ya que se me había quedado horrendo como de costumbre.

Sin darnos cuenta, ya había pasado hora y media, así que cogimos el bolso, nos hicimos algunas fotos evidentemente, y salimos hacia donde se encontraban todos.

La primera mirada que percibí al llegar, fue la de Hector, como de costumbre. Esta vez no me miraba con enfado, mas bien, con deseo. Sus ojos recorrieron todo mi cuerpo, poniéndome realmente nerviosa, ya que le salió una sonrisa pícara cuando se volvió a encontrar con mis ojos.

Nos dirigimos a la discoteca. Elena se encontraba mirando el móvil, sin hablar con nadie. Al parecer, ya se le había pasado el calentón con Hector, eso pensé hasta que los vi hablando mientras se reían. Mierda.

La música invadió mis oídos en cuanto entramos, y nos dirigimos a la zona vip, ya que abajo estaba abarrotado de gente.

Sofia y yo enseguida cuanto llegamos, nos dirigimos a por unas bebidas ya que estábamos sedientas, y también porque queríamos bailar. La zona vip era vacía y aburrida.

Unos chicos nos miraban desde lejos, y se acercaron hacia nosotras, juntas nuestros cuerpos con los suyos. Eran guapos, había que admitirlo, pero no me interesaban en absoluto.

Cerca nuestra, vi como Elena y Hector se liaban, mientras las manos del chicos recorrían su espalda.

Esto me partió el corazón en mil pedazos, pero no iba a dejar que un niñato inmaduro me arruinase la noches.

Estaba cansada de bailar, así que me dirigí al baño, ya que como de costumbre, me estaba meando.

Intente cerrar la puerta, pero una fuerza me lo impedía, una fuerza llamada Hector.

Yo suspiré al verle, ya que siempre tenía que aparecer cuando me meaba.

Este cerró la puerta y me miro fijamente, con una mirada que me penetraba por dentro.

-Que pesado eres tío de verdad - comencé la conversación con cansancio.
-No me voy de aquí hasta que no me dejes explicarme - dijo el.
-QUE NO ME INTERESA - grite yo desesperada.

Este me puso la mano en la boca indicando que me callase y hablo.

-Cállate un rato coño - hablo molesto - escúchame bien. Elena fue la causante de esto - dijo quitando la mano de mi boca.

Ya que había empezado, decidí escucharle atentamente, ya que me merecía una explicación y este sería el mejor momento visto lo visto.

-Elena me dijo que aunque tú y yo estuviésemos juntos, a ti te gustaba Marc, y me envío una foto de tu y el besándoos - yo me extrañe ante esto, ya que no recordaba haber besado a Marc en ningún momento - ahí me empecé a llevar bien con Elena, y me admitió que estaba colada por mi. A mi ella no me gustaba, pero como tú te habías ido con Marc, yo me fui con ella para hacerte lo mismo. Le enseñe con enfado a Marc la foto, y me dijo que no eras tú, que esa era Sofia, ya que la chica que aparecía estaba de espaldas y no se os distinguía. El me lo prometió y al parecer era verdad, ya que tenían más fotos juntos de ese día. Ahí fue cuando intenté explicártelo pero no querías - dijo con nerviosismo.

Yo estaba flipando con todo esto. Entendía su parte, ya que se pensaba que yo le había puesto los cuernos, pero había algo que no entendía.

-Y porque hace dos minutos te estabas liando con Elena? - pregunté cansada de todo esto.
-Porque te he visto con todos esos chicos y me he puesto celoso, a parte, no nos besábamos, me estaba susurrando una cosa al oído la cual ni siquiera he escuchado - respondió el con seguridad.

A ver, puede que tuviese razón, ya que entre el pedo que llevaba, y lo ciega que estaba, a lo mejor me había inventado algo y había sacado las cosas de quicio.

Yo suspire mirándole con pena.

-Me molesto que me ignorases de esa forma - me sinceré.
-Se que lo hice mal, se que he sido un inmaduro, pero de verdad, que yo en ningún momento he hecho nada con Elena. Cuando estaba en tu habitación, no me bese con ella, no la he tocado, nada. Te lo juro Valentina. Se que lo he hecho mal, pero entiéndeme, pensaba que te follabas a Marc a mis espaldas y la ira me cegó - me miro con sinceridad.
-Los dos hemos hecho cosas mal Héctor, pero bueno - respondí dirigiendo mi mirada al suelo.
-Me perdonas? - pregunto agarbándome del mentón, obligándome a mirarle a los ojos.

Yo suspiré mientras me pensaba mi respuesta.

-La verdad es que no puedo vivir sin ti, y te he echado en falta. Me tocará aguantarte - respondí con gracia.

Hector sonrió, y se tiró a mis labios con un beso lento, pero lleno de ganas y de pasión.

Nos separamos, y mantuvimos un contacto visual duradero, hasta que el hablo.

-Te quiero Valentina.