POV ALICE
Troto en la caminadora mientras escucho musica en mis audifonos, volvi al gimnasio hace unas semanas ya que me ayuda con la ansiedad y además estaba teniendo un fisico terrible. Reviso en el celular los mensajes del grupo que creamos con los chicos para celebrar los cumpleaños de los gemelos, segun Ol no les gusta celebrarlo pero conmigo no van a tener opción, amo celebrar los cumpleaños y ellos se han esmerado en el de los demás.
-No debes revisar el celular mientras trotas- Dice un chico mientras se hace a mi lado, lo saludo con la cabeza y me concentro nuevamente en el ejercicio, mis hermosos chicos deben estar en algun lado del gimnasio y estoy segura que se pondría muy celosos si le sigo la charla al desconocido, por mas que digan que no, son posesivos y debo ser honesta y decir que me gusta.
-Tienes una gran resistencia- Vuelve a decir pero esta vez para su caminadora y me mira, el sonido que termino mi recorrido lo interrumpe y seco el sudor de mi cuello y cara.
-Gracias- Digo mientras tomo mi botella de agua, camino lentamente unos minutos acostumbrado mi cuerpo nuevamente, termino y me doy la vuelta buscando a mis chicos, los veo concentrados haciendo ejercicio, asi que mientras tanto limpio la caminadora con el desinfectante y estiro en la zona especial que tienen para eso.
-Tienes mucha flexibilidad te dedicas a algo artístico- Pregunta nuevamente el mismo chico, lo volteo a ver para responderle pero veo atrás a Nath quien tiene cara de querer empujarlo a la mierda, le guiño un ojo y me pongo de pie normal.
-No me dedico a nada artístico pero mis novios me han ayudado mucho el tema- Digo y él frunce el ceño cuando hablo en plural, el tema sigue siendo tabú y realmente poco nos importa.
-Novios- Pregunta y yo asiento señalando a los gemelos que están detrás de él con cara de muy pocos amigos, me da un poco de pesar el hombre asi que decido ir con mis chicos, abrazo a Nath y despues tomo la mano de Cesar.
-Ya terminaron- Pregunto y los dos asienten pero sin alejar la vista del pobre chico, el cual parece estar a punto de cagarse encima del miedo, me causa un poco de gracia pero salvo al pobre hombre.
-Vamos, tenemos el tiempo apenas para ir a recoger un pedido que hice en la pasteleria para la tarde de chicas- Digo pero los dos no me ponen el mas minimo cuidado, asi que un poco en contra de mi integridad les doy un suave pellizco en las nalgas a cada uno y rápidamente sus miradas de reproche caen sobre mi.
-Que crees que haces- Pregunta Nath y yo sonrio angelicamente, aunque se que no tienen ningun efecto, pareciera que lograra lo contrario a lo que espero, los exita mas.
-Ustedes me estaban ignorando, así que tuve que tomar una medida extrema- Digo cruzando mis brazos y caminando a la salida, se que me la van a cobrar mas tarde, pero por ahora prefiero huir, me despido amablemente de las recepcionista, estoy llegando al auto y siento el brazo de alguien en mi cintura, me imagino que es alguno de los chicos, volteo a ver pero veo a un hombre y me intento alejar pero no me suelta, ¿qué mierda está pasando hoy con los hombres?
-Vi alla que estabas peleando con tus hermanos, te puedo ayudar- Dice y yo niego mientras le pego un fuerte codazo en las costillas y se aleja de mi, tomo una buena distancia entre los dos y lo miro mal.
-No son mis hermanos, así que alejese y antes de hacer ese tipo de cosas se debe preguntar es incomodo para las personas y ni hablar que puede considerarse acoso de acuerdo a lo establecido en el Código Penal- Digo y lo veo observarme mal, pero antes que pueda decir algo Cesar le hace una llave y lo pone contra la pared, veo una mueca de dolor del idiota, rapidamente soy abrazada por la espalda y reconozco inmediatamente el olor de Nathaniel.
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PLACENTERAMENTE SUYA
Художественная прозаAlice es una reconocida abogada que, hace algunos meses, se adentró en el mundo de la sumisión. Su estresante vida la llevó a buscar una forma de escape, encontrando en el club Redemption un refugio y un segundo hogar. Nathaniel y César han regresad...