POV ALICE
-Le voy a enviar una dieta y suplementos, el bebe se alimenta por medio de ti mamita, así que debes cuidarte mucho- Dice la ginecóloga, salgo del consultorio y veo a Cesar en una silla de ruedas siendo movido por una hermosa mujer joven que debe ser su hermana porque son iguales.
-Esta hospitalizado desde hace 2 dias- Dice Hanna a mi lado, alzo una ceja ya que quiere decir que es el mismo día que vinieron, pero cuando veo que me va a decir algo niego, no me interesa, no me debe interesar en nada lo que le ocurra a ellos.
-No quiero saberlo- Digo caminando a mi habitación, me acuesto y coloco una serie que me estoy viendo de época, terminó 3 capítulos con Hanna mientras comemos palomitas y helado, en eso entran mis padres con Oliver si rien un poco de nosotras al vernos acostadas viendo tv.
-Es momento de irnos ojitos- Dice Oliver a Hanna y veo como esta se sonroja por el apodo y yo sonrío viendolos, el avance de esos dos ha sido una cosa gigante y me encanta, me despido de los dos y mis padres me acompañan un rato.
-Vayan a descansar a casa, han estado todos estos dias conmigo, ya estoy bien se los prometo- Digo y estos a regañadientes salen de la habitación, ceno lo me trajeron, me tomo los medicamentos que me da la enfermera y veo otra serie en mi celular con audífonos ya que no quiero molestar a nadie por la hora, sonrió viendo al sexy Lee Min-ho montar el caballo con gran porte y elegancia, quiero uno para llevar.
-Ese gran suspiro espero no sea por algun idiota- Dice alguien a mi lado y salto ante el susto, veo a Nathaniel observar mi celular y yo lo bloqueo, que mierda hace en mi habitación y a esta hora.
-Qué haces en mi habitación y a esta hora- Pregunta acostándome para "dormir", siento la mirada de reproche y alzo una ceja, no puede decirme nada.
-Tu que haces despierta a esta hora, son la 1 am deberias estar durmiendo- Dice y yo alzo los hombros, ¿que carajos le importa?
-No te importa, por favor te puedes ir de mi habitación- Digo señalando la puerta, veo que se acerca y en eso entra Cesar pero con una bata del hospital, lo que me faltaba tenerlos a los dos en un espacio cerrado y pequeño.
-Deben irse, no tengo permitida visitas en la noche- Digo intentando ponerme de pie, pero los brazos de Nathaniel me acuestan nuevamente, mi corazon se acelera como cada maldita vez que alguno de ellos me toca, los veo sonreir al escuchar el monitor de frecuencia cardiaca, me lo quito rápidamente y me siento cruzada de brazos.
-Su esposa los debe estar esperando, vayanse por favor- Digo intentando controlar mi corazón, siento la mano de Nathaniel jalar suavemente mi cabello y haciéndome verlo a los ojos, acaricia mi barbilla suavemente y niega.
-No nos hemos casado contigo todavía pequeña malcriada, así que no tenemos esposa- Dice, voy a refutar algo, pero sus labios rápidamente estan sobre los mios, lucho contra ellos algunos segundos antes de ceder ante ellos, se sienten tan malditamente bien como siempre, a mi mente llegan imágenes de ellos besando a la rubia y lo empujo, me pongo de pie rápidamente y me alejo de ellos.
-Que creen que hacen, no voy a ser la amante, si no la respetan a ella, por lo menos a mi si- Digo amenazandolos con el control remoto, veo a Nathaniel controlar su risa por mi "arma", en algun momento me habría encantado hacerlo reir, pero en este momento me molesta, se estan burlando de mi.
-Enserio que hacen en mi habitación, no les parecio suficiente jugar conmigo de la forma en la que lo hicieron, quieren volver a tener sexo conmigo o simplemente quieren volver a destruirme- Digo rindiendome, bajo el control y me siento en el sofa, mi mirada se nubla por las lagrimas y maldigo las hormonas, la psicologa me explico que podria ocurrirme estas cosas por el aumento de hormonas por el embarazo.
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PLACENTERAMENTE SUYA
General FictionAlice es una reconocida abogada que, hace algunos meses, se adentró en el mundo de la sumisión. Su estresante vida la llevó a buscar una forma de escape, encontrando en el club Redemption un refugio y un segundo hogar. Nathaniel y César han regresad...