Kaeloria: El Despertar de las Sombras

Capítulo 11: Los Cielos de Skyreach

Cuando el grupo atravesó el portal, el cambio fue inmediato y profundo. Donde antes las cenizas y el fuego dominaban, ahora sentían el viento golpear sus rostros con una fuerza constante. El aire era más ligero, pero cargado de energía, una corriente vibrante que parecía fluir por todo el paisaje.

Al abrir los ojos, Thalen, Kaen, Lira y Varyn se encontraron en las alturas, rodeados por plataformas flotantes que se sostenían sobre las corrientes de aire. Las Tierras del Viento, conocidas como Skyreach, no se parecían a nada que hubieran visto antes. En lugar de caminar sobre la tierra firme, la gente de Skyreach vivía en ciudades que flotaban en el cielo, sostenidas por mecanismos antiguos y por la misma magia que controlaba las corrientes de aire.

Los edificios, hechos de un material translúcido que reflejaba los colores del cielo, parecían suspendidos en el aire como espejismos. Las torres eran delgadas y elegantes, conectadas por puentes de viento invisibles que solo los Sintientes del Viento podían cruzar sin caer. Grandes velas capturaban las corrientes de aire, dirigiendo las plataformas de un lado a otro, mientras criaturas aladas surcaban los cielos en todas direcciones, llevando mensajes y suministros entre las distintas islas flotantes.

Lira sonrió al ver su tierra natal nuevamente, sus ojos brillando con una mezcla de nostalgia y alivio. Las Tierras del Viento eran más que solo su hogar; representaban la libertad y la gracia que siempre había sentido en su elemento.

Lira: "Bienvenidos a Skyreach. Este es el corazón de las Tierras del Viento, donde las corrientes y las alturas son nuestro dominio."

Kaen, mirando alrededor con cautela, hizo un comentario seco.

Kaen: "Bonito, pero... ¿cómo diablos evitamos caer?"

Lira se rió, y con un gesto de su mano, el viento comenzó a girar a su alrededor, levantándolo ligeramente del suelo antes de volver a depositarlo con suavidad. Su control del viento aquí era impecable, más fluido que en cualquier otro lugar.

Lira: "Aquí arriba, el viento es nuestro aliado. No temas, mientras yo esté cerca, no caerás."

Varyn se mantuvo en silencio, observando el entorno con ojos calculadores. Sabía que este lugar, por muy hermoso que fuera, también escondía sus propios peligros. Sentía una tensión en el aire, una turbulencia que no provenía solo del viento.

El grupo se dirigió a Aerilon, la ciudad principal de Skyreach, una maravilla flotante de arquitectura celestial. Torres espirales se elevaban hacia las nubes, y grandes jardines de aire, formados por plantas etéreas que solo podían sobrevivir en la altura, se extendían por doquier. Los Sintientes del Viento, con sus ropas ligeras que parecían hechas de nubes, caminaban por las calles sin apenas tocar el suelo, y algunos se deslizaban sobre el viento como si fueran aves en pleno vuelo.

Lira guió al grupo hacia el centro de la ciudad, donde una gran plaza se abría ante ellos. En el centro, una estatua de cristal flotaba en el aire, representando a Aerith, el primer gran Sintiente del Viento, una figura que había guiado a los suyos hacia las alturas siglos atrás. Sus alas extendidas reflejaban la luz del sol en mil colores diferentes, creando un espectáculo impresionante.

Pero no todo era calma en Skyreach. Lira notó inmediatamente que la tensión en el aire era más fuerte de lo habitual. Los habitantes se movían con prisa y preocupación en sus rostros, y varios de los líderes de la ciudad parecían estar enfrascados en discusiones. Algo había cambiado desde la última vez que ella había estado aquí.

Un grupo de figuras vestidas con túnicas plateadas se acercó a ellos. Estos eran los Guardianes de los Vientos, los protectores y gobernantes de Skyreach, elegidos entre los Sintientes más poderosos. El que encabezaba el grupo era Aldric, un hombre de cabello plateado que parecía flotar sobre el viento con la gracia de una pluma. Sus ojos, de un azul profundo como el cielo nocturno, eran fríos pero sabios, y cuando miró a Lira, su rostro se suavizó ligeramente.

Aldric: "Lira, hija del viento. Has regresado en un momento turbulento."

Lira hizo una reverencia ligera, pero había una chispa de desafío en su mirada.

Lira: "Lo noto, Aldric. He sentido la inquietud en las corrientes desde lejos. ¿Qué está sucediendo aquí?"

Aldric echó un vistazo al grupo, evaluando a Thalen, Kaen y Varyn con detenimiento antes de responder.

Aldric: "Las corrientes de viento están cambiando, y con ellas, la estabilidad de Skyreach. Los rumores hablan de una perturbación en el equilibrio del mundo. No solo aquí, sino en las demás facciones también. Tememos que algo oscuro se esté gestando."

Thalen intercambió una mirada preocupada con Kaen. Esto confirmaba lo que ya sospechaban. El equilibrio del mundo estaba en peligro, y el Corazón de Fuego era solo una parte de un problema mayor.

Thalen: "¿Han oído hablar de una entidad llamada El Desgarrador?"

Los ojos de Aldric se entrecerraron ante el nombre.

Aldric: "Es solo una leyenda, una historia antigua que los niños del viento cuentan para asustarse entre ellos. Un ser oscuro sellado en las profundidades del mundo, pero ningún ser de este mundo ha visto su verdadera forma."

Varyn habló por primera vez desde que llegaron.

Varyn: "Quizás, pero las leyendas no nacen de la nada. Si el equilibrio del mundo se está desmoronando, entonces esa entidad podría estar despertando. Y nosotros no podemos ignorar esa posibilidad."

Aldric asintió lentamente, reconociendo la gravedad de la situación.

Aldric: "Entonces necesitamos respuestas, y las necesitaremos rápido."

Lira miró hacia el cielo, donde grandes tormentas eléctricas comenzaban a formarse en el horizonte, algo raro en Skyreach, donde el clima era controlado con precisión por los Sintientes del Viento.

Lira: "Las tormentas... están fuera de control. Debemos investigar más allá de nuestras fronteras. Si el viento ya no escucha, es una señal de que algo terrible está por suceder."

Kaen apretó los puños, listo para la acción.

Kaen: "¿Y qué sugieres que hagamos? No podemos quedarnos aquí mirando."

Aldric los guio hacia el centro de la plaza, donde un enorme mapa flotante de Kaeloria estaba suspendido en el aire, iluminado por rayos de luz que se movían como las corrientes del viento. Señaló hacia el este, donde un área de tormentas parecía estar concentrándose.

Aldric: "Ese es el Nexo de los Vientos, una antigua estructura donde convergen todas las corrientes del mundo. Debemos investigar allí. Si las corrientes están siendo perturbadas, ese será el primer lugar donde lo notaremos."

Lira asintió, sabiendo que este era su momento para actuar como una verdadera hija del viento. Su poder sobre las corrientes podría ser clave para descubrir lo que estaba causando la inestabilidad en Skyreach.

Thalen, Kaen, Varyn y Lira emprendieron el vuelo, montados en grandes criaturas aladas, dirigiéndose hacia el Nexo de los Vientos. Mientras surcaban el cielo, las nubes de tormenta comenzaban a arremolinarse con mayor fuerza, y los truenos resonaban a su alrededor. Los desafíos en las Tierras del Viento serían mucho más peligrosos de lo que habían anticipado, y cada uno de ellos tendría que superar sus propios límites para proteger el equilibrio del mundo.