#20

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Estuvieron consolando a Izuku unos minutos más, hasta que por fin se tranquilizó un poco y dejó de llorar.

— L-Lo siento, les he estado quitando su tiempo. — habló con dificultad, sollozando un poco.

— No necesitas disculparte, para eso somos amigos; estamos aquí para ti, para apoyarte. — le dijo Mina. Aun cuando todo esto era un simple malentendido, aquellas palabras eran reales.

— Volviendo al tema... — interrumpió Uraraka. No sabía qué era lo que Katsuki estaba planeando, pero tenían que mantener aquella conversación para que, al sacar el tema de nuevo, no levantara sospechas—. No es que no confíe en ti, pero, ¿realmente era Katsuki?

— Yo, yo creo que sí. Lo vi bien, no tengo duda alguna.

— ¿No crees que podría ser, no sé, ¿su hermana? Aunque no sabemos si tiene. Tú eres más apegado a él, deberías saberlo, ¿no? — lo cuestionó Denki, intentando descifrar si Izuku sabía sobre la existencia de aquella hermana.

— No, no tiene. Me lo dijo cuando fuimos al acuario. Él había tomado un peluche, así que le pregunté si se lo había comprado a su hermano y me dijo que no tenía hermanos. El peluche era para mí. — les explicó, dejándolos aún más confundidos. Sin embargo, creían en Katsuki.

— Ya veo, nosotros no teníamos ni idea si tenía o no algún hermano, pero por lo que dices, no lo tiene. Así que es raro —le dijo Kirishima. — ¿No crees que podría ser una prima?

Izuku lo pensó por un momento.

¿Podría ser su prima? No lo sabía, pero aun así, se sentía engañado, aun cuando no eran nada.

— No lo sé, no me avisó de nada.

Mina suspiró, fingiendo así preocupación.

— No te preocupes por eso. Lo que necesitas por el momento es irte a descansar. Podemos hablar de eso mañana. Nosotros trataremos de encontrar respuestas, ¿de acuerdo? — lo alentó.

— De acuerdo. Entonces, nos vemos mañana. — se despidió, alejándose de ellos.

Todos suspiraron.

— Odio mentirle. — admitió Shoto.

— Yo igual. — comunicó una voz detrás de ellos; era Katsuki.

— ¡Tú! — gritó Uraraka, dirigiéndose a él. — ¿Cómo te atreves a hacerle eso a Izuku?

Katsuki no retrocedió; se quedó en el mismo lugar.

— Él no ha hecho nada malo. — se escuchó otra voz, pero esta vez era una voz diferente; femenina. — Fue mi culpa.

Detrás de Katsuki salió una chica; rubia y de ojos dorados.

— Un gusto conocerlos. Soy Himiko, la hermana de Katsuki. — sonrió encantada.

Los presentes quedaron totalmente sorprendidos; tenían enfrente a la hermana de Katsuki.

— H-hola, un gusto en conversar. — Uraraka habló; su voz sonaba temblorosa.

— El gusto es mío. — respondió encantadora, tomando la mano de Uraraka y depositando un ligero beso en ella. Esta acción hizo que Uraraka comenzara a ponerse nerviosa.

— Sí, sí, ya fue mucho, ¿no? — Katsuki interrumpió aquella escena. Sabía que su hermana estaba enamorada de Uraraka, mucho antes de aquel viaje que tuvo.

— Amargado. — le reprochó su hermana.

— Lo que digas. En fin, ya que quedó todo esto aclarado, necesito que me ayuden con algo.

El chico de las estrellas • Bakudeku Donde viven las historias. Descúbrelo ahora