MARATÓN 1/6.
CESAR PARRA.
Hace tres días que envíe las flores a T/n, pero no tuve respuesta de ella, tengo un hombre vigilándola y me informó que acompañada de sus compañeros del trabajo, ella entró al bar que está frente a la editorial.
Estoy estacionado justamente frente al bar esperando que salga para invitarla a cenar y que podamos arreglar lo nuestro, una hora después veo a T/n salir del bar y camina muy rápido, segundos después sale un tipo detrás de ella y todos mis sentidos se ponen alerta, Taylor me mira a través del retrovisor, bajamos del carro y vamos a la editorial, pero un efectivo de seguridad nos impide el paso.
- Señor, entiéndame, no puedo dejarlo pasar - dice por tercera vez.
- ¿Por qué razón? - digo con voz dura - Déjeme pasar o mañana no va a tener trabajo - lo amenazo.
- Es todo lo contrario, si lo dejo pasar el señor Vega me despide - dice miro a Taylor con los ojos muy abiertos, algo no anda bien, le hago una señal a Taylor y lo inmoviliza dándome paso dentro del edificio, camino a paso doble y entro, escucho una voz.
- Suéltame - por Dios es T/n - Cornelio, suéltame. Maldita sea - corro por el pasillo buscando la puerta de donde provienen las voces, las abro una a una.
- Voy a tener que enseñarte modales - dice un hombre su voz refleja ira, abro la puerta y lo que veo no me aterra, ese hombre está sobre ella, le tiene las manos agarradas por encima de la cabeza, me acerco sin que percate de mi presencia y lo golpeo, lo quitó de encima de T/n y golpeo su cara repetidamente, estoy lleno de ira, de frustración, de culpabilidad por haber alejado a T/n de mí cuando me confesó su amor, si hubiera enfrentado mis miedos esto no estuviera pasando, siento unas manos sobre mi hombro.
- Señor, yo me encargo - lo miro - La señorita lo necesita - miro a T/n y al verla mi corazón se detiene, está muy asustada, su cara está roja de seguro le pego y llena de lágrimas, su ropa está rota y se está cubriendo con sus brazos, mientras me acerco a ella quito mi chaqueta y luego cubro su cuerpo, que tiembla por los sollozos.
- Estás bien - me pongo de rodillas y acarició su pelo, ella asiente y se me forma un nudo en la garganta de solo pensar si yo no hubiera estado aquí - Todo paso - digo con voz ronca y limpio sus lágrimas - Tranquila - susurro sin que lo espere se tira en mis brazos, la envuelvo y la siento tan frágil, necesito sacarla de aquí, decirle que yo siempre la voy a proteger y voy a estar con ella, tengo que decirle que la amo... - Taylor encárgate de este hijo de pu... - digo, él asiente y por su cara sé que no le espera nada bueno o que no se merezca.
Me pongo de pie, la tomo en mis brazos, ella se agarra de mi cuello y la llevo al auto, la acomodo en el asiento del copiloto y pongo su cinturón, la miro a los ojos y por segundos me pierdo en su mirada.
- Vamos a casa... - le digo, ella asiente, doy la vuelta, subo al auto, pongo mi cinturón y enciendo el auto.
- ¿A dónde vamos? - dice T/n.
- Al departamento - la miro por un segundo y tiene los ojos muy abiertos - Necesitamos hablar.
- Cesar yo... - titubea - Tengo que ir a mi casa, mi madre se va a preocupar - tengo que convencerla para que vaya conmigo al departamento.
- Solo hablar, además tienes que cambiarte si llegas así tu madre se va a preocupar - le digo, ella asiente y mira por la ventana, después de estar por lo que fue una eternidad con T/n en el ascensor sin poder tocarla o besarla, llegamos al apartamento.
- Ve a la que era tu habitación y cámbiate - le digo.
- Hay cosas que nunca cambian - dice con ironía, la miro con una ceja levantada, se da la vuelta y sube las escaleras, voy a la cocina por un analgésico y hielo para que se ponga en la mejilla...
T/N MEZA.
Llego a la que era mi habitación y me sorprende ver que todo está como la última vez que estuve aquí, me siento sobre la cama pensando en todo lo que viví en esta habitación y en lo que paso esta noche, no puedo contener las lágrimas tan solo de imaginarme que habría pasado si Cesar no llega...
Siento que la puerta se abre y al levantar la vista me encuentro con unos hermosos ojos cafés llenos de preocupación, trae cosas en sus manos las cuales deja sobre el escritorio, se sienta a mi lado y limpia mis mejillas, nos miramos por lo que parece una eternidad.
- Bébete esto - me pasa una pastilla - Es paracetamol - me explica, la tomo y me pasa un vaso de jugo - Te pego, ¿Verdad? - dice con voz ronca, yo asiento y lo escucho maldecir en voz baja.
- Cornelio, lo sabe - le digo, él me mira sin saber de qué hablo.
- ¿Qué sabe?
- Que trabajaba en el bar de Elisa, que estaba contigo... - se pone de pie y comienza a dar vueltas.
- ¿Cómo se enteró? - dice con voz dura.
- Según él, era cliente del bar - le digo - Pero, yo nunca lo vi.
- ¿Estás segura? - me analiza.
- Por supuesto - digo y me pongo de pie - A mí nunca se me habría ocurrido trabajar con él de haberlo sabido antes - lo veo contener el aire - No me crees, ¿Verdad? - no dice nada - Tu silencio lo dice todo - camino hacia el armario y busco una camiseta me la pongo y dejo su chaqueta sobre la cama - Adiós, Cesar. Y gracias otra vez - salgo de la habitación conteniendo las lágrimas ¿Por qué siempre duda de mí? Camino lo más rápido posible, cuando voy bajando las escaleras escucho unos pasos detrás de mí.
- T/n - me llama - T/n, espera por favor.
- ¿Qué, Cesar? Que quieres ahora? - me pongo frente a él - La verdad es que realmente no sé para qué me trajiste aquí ¿Para cuestionarme? ¿Para darme órdenes? - él solo niega - Entonces, ¿Para qué? - digo desesperada - ¿Dime? - nuestras miradas se unen y en dos zancadas está frente a mí, me toma por la cintura y está a pocos centímetros de mi boca.
- Te amo, T/n Meza. Te necesito, no puedo estar sin ti...
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"Ya es muy tarde 2" "Vuelvo a tí"🫀🫶🏻
RomanceDespués de convivir casi tres meses con Cesar Parra, el hombre que compro su virginidad y robo su corazón, T/n Meza decide continuar su vida, ya que este la rechazo cuando le confesó que lo amaba. En la inmensa soledad de su apartamento, Cesar descu...