De repente, un chillido agudo resonó en el laberinto, haciéndolos girar en todas direcciones. Las sombras a su alrededor comenzaron a moverse, revelando figuras oscuras y amorfas que se deslizaban entre los muros, acercándose cada vez más.
- ¡Prepárate!- gritó Bakugo, levantando una mano mientras la energía explosiva comenzaba a acumularse en su palma.
Deku activó One For All, sintiendo el poder recorrer su cuerpo mientras se preparaba para la batalla. Las figuras se abalanzaron sobre ellos, y en un instante, todo se volvió caos.
Bakugo lanzó una explosión masiva que iluminó el laberinto, destrozando a varias de las figuras que los rodeaban. El estruendo resonó por los pasillos, pero las sombras parecían infinitas, regenerándose y volviendo a atacarlos sin descanso. Deku, con una velocidad impresionante, se movía entre los enemigos, golpeándolos con precisión y fuerza.
- ¡Están por todas partes!- gritó Deku mientras golpeaba una sombra que se acercaba a Bakugo por detrás.
¡No necesito que me cubras!- Bakugo respondió con un tono feroz, pero su voz contenía algo más, un leve temblor que indicaba que, por una vez, no estaba completamente seguro de cómo manejar la situación.
Las sombras continuaron atacando, implacables. El agotamiento comenzaba a pasarles factura a ambos, pero no podían permitirse flaquear. En un momento de distracción, una sombra logró acercarse demasiado a Deku, atrapándolo por sorpresa. Las garras negras y amorfas lo sujetaron con fuerza, y sintió cómo lo arrastraban hacia el muro del laberinto.
Bakugo se volteó hacia Deku, y podía notar el temor en los ojos del peliverde
- ¡Deku!- Bakugo gritó, lanzándose hacia él con una furia renovada. Sin pensarlo, utilizó toda su fuerza en una explosión que destruyó a la sombra y liberó a Deku de su agarre, pero el impacto los lanzó a ambos contra la pared opuesta.
El choque los dejó aturdidos por un momento, ambos respirando con dificultad. Deku sintió el dolor agudo en su costado, pero fue la mirada intensa de Bakugo lo que más lo impactó. Estaban tan cerca que podía sentir el calor de Bakugo que daba su cuerpo debido a las explosiones, la furia y la preocupación mezcladas en su mirada.
- No vuelvas a bajar la guardia, maldito idiota- murmuró Bakugo, su voz baja pero cargada de una intensidad que Deku no había escuchado antes.
Deku asintió, su respiración todavía agitada, pero no pudo evitar notar cómo Bakugo aún no había soltado su muñeca.
- Lo siento, Kacchan... no dejaré que vuelva a pasar. -dirigió su mirada al suelo
Bakugo lo miró fijamente durante un segundo más antes de soltarlo bruscamente. La manera brusca que lo soltó, es el mismo salto brusco que pega una persona al quemarse
- Más te vale. Si alguien va a vencerte, seré yo, no esas malditas sombras, ¿entendido?
Las palabras de Bakugo fueron como un chispazo de electricidad que recorrió a Deku, recordándole la compleja relación que siempre había tenido con su amigo y rival. Pero algo había cambiado en esos breves segundos, un entendimiento silencioso que no necesitaba ser pronunciado.
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Un Laberinto De Sentimientos
Storie d'amoreDurante una misión de rescate, Izuku Midoriya y Katsuki Bakugo quedan atrapados en un antiguo laboratorio subterráneo. Con el tiempo y los recursos en su contra, la cercanía forzada hace que Bakugo comience a ver a Deku de una manera nueva. Mientras...