Rivales | Nicki Nicole y Trueno

Capitulo 4

Ese fin de semana fue gratamente increíble. Después de esperar casi tres meses, al fin llegó el sábado en el que era el concierto de The Neigbourhood. Fue difícil convencer a sus padres, pero, al final, las chicas ahorraron y fueron juntos al concierto. Fue una noche emocionante, en el cual fueron acompañadas de la mamá de Emilia, pero eso no importó.

Cantaban las canciones juntas y aunque Mauro no supiera ninguna, igual la paso increíble cuando lanzaron el confeti de colores. Después durmieron en casa de Emi, hasta el domingo, y fue la mejor pijamada del mundo. Habían visto en la tarde una película y los padres de Emilia fueron muy agradables e incluso graciosos.

Ahora ya era lunes por la tarde y los exámenes del semestre estaban a la vuelta de la esquina. Nicole iba con paso alegre a la biblioteca con su nuevo suéter gris, que llevaba el símbolo de la banda estampado en el, que habían regalado en el concierto.

Ella realmente no era muy glamurosa a la hora de vestirse pero ese suéter, en especial le encantaba y le parecía muy cómodo.

Esperaba encontrase al pelinegro al llegar y así fue. Al abrir la puerta de la biblioteca inmediatamente captó el rostro de Mateo alzando los ojos, como si esperara a alguien. Cuando los ojos marrones se posaron en ella, tardo un segundo mirándola, y volvió su atención al libro. Obviamente, si Mateo estaba esperando a alguien no era a Nicole. Se sintió como una gran idiota al descubrir que se encontraba decepcionada.

Durante estos dos meses había logrado formar varias conversaciones con Mateo, aunque siempre al final terminaban peleándose y duraban mínimo tres días sin dirigirse la palabra cuando estaban en la biblioteca, que era lo más común.

Aunque sus conversaciones fueran poco significativas, o principalmente por los estudios, a Nicole le daba la oportunidad de escuchar su voz e incluso conocerlo más a fondo.

Se había enterado, por un vago comentario del pelinegro, que su plato preferido eran los tacos y que su película preferida era The Notebook. Se sentía ridícula ya que, aún después de varias semanas de aquella conversación, ella aún recordaba esos detalles y que también le hiciesen sentir bien.

Durante todo este tiempo también había aprendido algunas expresiones faciales de Mateo, cuando ellos estaba estudiando y ni se hablaban. Mordía el lápiz para concentrarse, arrugaba la nariz al estar disgustado o que comenzaba a morder sus dedos cuando claramente estaba aburrido.

"idiota, idiota" se decía a ella misma mientras se sentaba en su mesa de siempre. Parecía una acosadora cuando nisiquiera eran amigos.

Lo observo un rato, esta vez sin disimular mucho, y después frunció el ceño, enojada con ella. ¿Por qué la hacia sentirse así? Ya lo tenía claro, detestaba a los niños mimados como el, con todo su ser y todo por Mateo, que parecía no terminar de salir de su cabeza.

Extrañamente Mateo levantó el rostro, y con cierto cuidado observo a la ojiverde, sus ojos se encontraron y Nicole permaneció (o al menos intentó aparentar) tranquila, como si estuviera mirando hacia el paisaje al otro lado de la ventana que había detrás del pelinegro. Parecía funcionar, ya que de reojo observaba como Mateo no la observaba extrañado, la ojiverde incluso sospechaba que la miraba fijamente.

Nicole no lo pudo evitar, pero se le disparó el pulso y ahora sintiéndose más valiente, dirigió sus ojos fijamente a Mateo que tenso los hombros al haber sido cachado mirando. Nicole intentó alzar una ceja (aparentando que se extrañaba de la mirada del pelinegro cuando hace poco ella también le había estado observando) dándole a entender que no entendía porque Mateo la miraba con tanta insistencia y el pelinegro apartó la mirada. Volvió el rostro hacia abajo mientras el leía su libro.

Por un momento Nicole sintió una gran emoción invadirle por completo e incluso permaneció en ella horas después de haberse marchado de la biblioteca. Intentó ver películas tristes o lavarse la cara, pero nada quitaba su emoción. Bufo frustrada con ella misma y durmió, lanzando maldiciones contra aquel joven compañero suyo.