Los días habían pasado, era un fin de semana por lo que pensaba en dormir hasta tarde.
En toda la semana no había sabido nada de Rindou, desde que lo miré abrazado a asumí habían desaparecido, aunque gracias al beso que nos dimos el rumor de que salíamos se expandió entre el bajo mundo.
Estaba tranquilamente acostada, teniendo un buen sueño luego de la semana larga, cuando de la nada abro los ojos al escuchar mi celular sonar.
Miré el nombre y era Rindou, miré la hora y eran las tres de la mañana casi cuatro, molesta respondí la llamada.
En la llamada.
Tn = Si...
R = ¿Estabas dormida?
Tn = No, como crees a esta hora nadie duerme, es obvio que estaba dormida dime que quieres a esta hora?!
R=Que agresiva, solo te llamaba otra avisarte que a las 8 de la mañana iremos al gimnasio...digo para que estuvieras lista.
Tn = ¿Me estás jodiendo? Son las dos de la madrugada porque no me llamaste a las 8?!!
R =Relájate solo te avisaba para que estuvieras lista, como sea ten un buen sueño.
Fin de la llamada.
- ¡Idiota! -dejé mi celular a un lado de mi cama.
Estaba molesta, odiaba que me despertaran y mucho menos por algo tan estúpido, los fines de semana no hacía ejercicio eran mis días de holgazanear.
Seguí durmiendo con algo de paz, las horas pasaron y empecé a sentir como alguien me sacudía lo que causó que me me asustara y me caiga de la cama boca abajo.
No me importó quien me había despertado solo jalé las mantas de la cama arropándome con ellas en el suelo.
- ¡oye despierta! - gritó el chico.
-cinco minutos más...- bostece.
-¡Que despiertes! - gritó molesto y me desperté de golpe - te dije que estuvieras preparada a las ocho que haces durmiendo- me miro desde arriba.
- ah eres tú -me levanté del suelo- ¿como carajos entraste a mi habitación? - levanté las cobijas empezando a arreglar mi cama.
-tu mamá me dejó pasar dijo que se iría a trabajar - se quitó las gafas poniéndolas en su cabeza.
- No conocías otra forma de despertarme?, es fin de semana los fines de semana no hago ejercicio-termine de arreglar mi cama.
- Desde ahora haremos ejercicio las veces que yo diga - sonó arrogante - escucha, iremos al gimnasio con shion, kakucho y asumí creo que ya sabes que hacer.
- Así si, ya me acordé, ¿sigues pensando ella?-me dirigí al clóset buscando mi ropa.
Narradora :
-si...ella me gusta desde que era un niño, recuerdas lo que pasó el día de la carrera? Se puso celosa de que tú fueras mi "novia" creo que podemos seguir así por un tiempo -sin dudas estaba feliz.
- te esfuerzas mucho por una chica que si le gustaras hace mucho tiempo saldría contigo - dijiste honesta tomado una toalla - me iré a bañar.
Este se quedó callado tus palabras en el fondo cobraron sentido, pero el sentimiento que sentía por asumí era tan fuerte que no era capaz de pensar en si mismo.
