La Primera Cita de Mark y Jaemin
Era un sábado soleado y la ciudad de Seúl estaba vibrante con la energía del fin de semana. Las calles estaban llenas de gente, el aire estaba impregnado del aroma de comida callejera, y las luces de neón comenzaban a brillar a medida que el día se acercaba a su fin. Mark, con 19 años, estaba nervioso pero emocionado por su primera cita con Jaemin, que tenía 18 años. La expectativa estaba en el aire y Mark había planeado todo con cuidado para hacer de esta noche algo especial.
Preparativos
Mark se encontraba en su apartamento, vestido con una camisa blanca ligeramente arrugada y unos pantalones oscuros. Se miró en el espejo, se ajustó el collar que llevaba, y luego respiró hondo. "Todo va a estar bien", se dijo a sí mismo. La idea de tener la oportunidad de pasar tiempo con Jaemin, a quien admiraba en secreto desde hacía tiempo, era emocionante pero también inquietante.
A las 6 de la tarde, Mark llegó al lugar acordado, una elegante cafetería con un ambiente acogedor. El restaurante estaba decorado con luces tenues y velas en las mesas, creando un ambiente romántico. Mark miró alrededor, buscando a Jaemin. Su corazón latía rápido y estaba deseando que todo saliera bien.
El Encuentro
Jaemin llegó puntualmente, vistiendo una chaqueta de mezclilla azul claro sobre una camiseta blanca. Su cabello estaba cuidadosamente despeinado, dándole un aire relajado pero atractivo. Cuando entró en la cafetería, sus ojos se encontraron con los de Mark, y una sonrisa tímida apareció en su rostro.
"Hola, Jaemin", dijo Mark, levantándose de su asiento y acercándose. Su voz temblaba un poco, pero trató de mantener la compostura.
"Hola, Mark", respondió Jaemin, con un tono suave. "Es un lugar muy bonito, ¿no?"
"Sí, lo pensé también. Me alegra que te guste", dijo Mark, mientras guiaba a Jaemin hacia la mesa que había reservado. Se sentaron, y Mark trató de calmar los nervios que sentía.
La Conversación
Mientras esperaban sus bebidas, comenzaron a conversar sobre temas triviales. Mark trataba de ser natural, pero cada palabra que decía parecía estar cuidadosamente elegida. Jaemin, a pesar de su aparente tranquilidad, también estaba algo nervioso. Ambos estaban conscientes de la importancia de esta cita y querían que fuera perfecta.
"Entonces, ¿cómo ha sido tu semana?" preguntó Mark, intentando romper el hielo.
"Bastante ocupada", respondió Jaemin, sonriendo. "He estado practicando para los exámenes finales. ¿Y tú? ¿Cómo va el entrenamiento?"
"Bastante bien", dijo Mark. "Me estoy preparando para el próximo torneo, así que he estado entrenando más duro. A veces es difícil encontrar tiempo para otras cosas."
"Lo entiendo", dijo Jaemin, asintiendo. "Yo también suelo estar ocupado, pero es bueno tener algo para relajarse de vez en cuando."
El camarero llegó con las bebidas, rompiendo brevemente el flujo de la conversación. Ambos tomaron un sorbo y continuaron hablando, tratando de conocerse mejor. Hablaron sobre sus pasatiempos, sus sueños y sus metas para el futuro. Mark encontró que Jaemin era increíblemente fácil de hablar y que compartían muchos intereses en común.
Momentos Especiales
A medida que avanzaba la noche, Mark notó que Jaemin estaba cada vez más relajado. Su risa se volvió más frecuente, y sus ojos brillaban con una luz especial. Mark se sintió aliviado al ver que Jaemin estaba disfrutando de la cita tanto como él.
En un momento, Mark se inclinó hacia adelante y, con una sonrisa, dijo: "Tengo una pregunta. Si pudieras viajar a cualquier parte del mundo, ¿dónde irías?"
Jaemin pensó por un momento, luego respondió: "Creo que iría a Japón. Siempre he querido visitar Tokio y ver la ciudad en todo su esplendor. ¿Y tú?"
"Yo iría a Nueva York", dijo Mark. "Siempre he soñado con ver los rascacielos y experimentar el ambiente de la ciudad. Hay algo en la idea de estar en el centro del mundo que me parece emocionante."
Ambos se rieron, disfrutando de la conversación y de la compañía del otro. La noche continuó con risas, anécdotas y una conexión que parecía crecer más con cada minuto que pasaban juntos.
El Paseo Nocturno
Después de la cena, Mark sugirió dar un paseo por el parque cercano. Jaemin aceptó con gusto, y juntos salieron de la cafetería y caminaron hacia el parque, el cual estaba iluminado por luces suaves que creaban un ambiente mágico.
Mientras caminaban, Mark se atrevió a tomar la mano de Jaemin de manera casual, entrelazando sus dedos. Jaemin miró a Mark, sorprendido pero encantado, y le sonrió. "Esto es agradable", dijo Jaemin, su voz suave y sincera.
"Sí, es perfecto", respondió Mark, sintiendo una oleada de felicidad al ver la sonrisa de Jaemin. "Gracias por venir esta noche."
"No tienes que agradecérmelo", dijo Jaemin, sonriendo. "Estoy contento de estar aquí contigo."
La Despedida
Al final de la noche, Mark y Jaemin llegaron al lugar donde Jaemin iba a tomar el transporte de regreso a casa. Mark sintió un pequeño nudo en el estómago, no queriendo que la noche terminara.
"¿Te ha gustado la cita?" preguntó Mark, con una expresión esperanzada.
"Sí, me ha encantado", respondió Jaemin, su mirada cálida. "Gracias por la maravillosa noche, Mark. Me has hecho sentir muy especial."
Mark sonrió, sintiendo un alivio inmenso. "Me alegra escuchar eso. Yo también he disfrutado mucho esta noche."
Jaemin se acercó y, con un leve rubor en sus mejillas, se inclinó para darle un suave beso en la mejilla a Mark. "Hasta la próxima, Mark."
Mark se quedó inmóvil por un momento, sintiendo el calor del beso en su mejilla. "Hasta la próxima", repitió, mientras miraba cómo Jaemin se alejaba con una sonrisa en el rostro.
Con el corazón lleno de alegría y emoción, Mark se dirigió de regreso a su apartamento, sabiendo que esta noche había sido el comienzo de algo especial. La conexión que había sentido con Jaemin no era algo que se encontrara todos los días, y Mark estaba ansioso por ver qué les depararía el futuro.
**Reflexiones de la Noche**
De vuelta en su apartamento, Mark se tumbó en su cama, pensando en cómo había ido todo. Recordaba cada sonrisa, cada risa compartida, y la forma en que Jaemin lo miraba. Se dio cuenta de que lo que había comenzado como una simple cita se había convertido en algo mucho más significativo. La noche había sido perfecta, y Mark sentía que había dado un paso importante en su vida.
Jaemin, por su parte, también estaba pensando en la cita mientras se acomodaba en su cama. Se sintió emocionado por lo que había experimentado y esperó con ansias el próximo encuentro. La conexión que había sentido con Mark era fuerte y prometía algo especial en el futuro.
Ambos sabían que esta primera cita había sido el inicio de una nueva etapa en sus vidas, y estaban listos para ver a dónde los llevaría su incipiente relación. La noche había sido mágica, y el recuerdo de esa primera cita se quedaría con ellos como un hermoso comienzo.