Wait For Your Love | FreenBecky |

Prim Chanikarn

SAROCHAS'S POV

DENVER, COLORADO
26 DE AGOSTO

Realmente he conseguido dormir muy poco porque las palabras de mis padres no han dejado un sólo instante mi cabeza, pensé que las dudas se despejarían pero en su lugar nuevas dudas surgieron, nuevas interrogantes y mientras más intento encontrarle un sentido razonable más me sumergo en una realidad que me he obligado a ignorar pero que cada vez que me atrevo a mirar me deja en una especie de limbo.

No he podido evitar comparar lo que siento por Nam y lo que siento por Rebecca, por ejemplo. Ambas son mis amigas desde hace varios años pero ahora que lo delineo con una lupa nunca me he sentido nerviosa con Nam de la misma forma en la que me siento con Rebecca; nunca la sonrisa de Nam me ha hecho inflar el pecho con una emoción desconocida. Hemos sido amigas por mucho tiempo... y ahora es como si me molestara.

Es tonto, estoy pensando demasiado, estoy analizando cada momento que he vivido con Rebecca y de nuevo sólo llego a la conclusión de qué es tonto. Para ella soy su mejor amiga, soy su hermana y para mí no puede ser de una manera distinta. No, no puede.

Salgo de casa con esa idea, me repito que estoy siendo paranoica, me digo que estoy confundida por todo lo que pasó con Davikah. Otro tema que probablemente tenga que resolver hoy porque aunque me ha llamado y mandado mensajes durante el fin de semana no me he atrevido a contestar ninguno, es momento de cerrar ese capítulo de mi vida.

Mis dedos comienzan a sudar contra el agarre del volante, no me había sentido de esa manera la primera vez que conduje mi Black Horse pero ahora es como si tuviera miedo de que un animal salte a la vía y no me de tiempo a girar. Estoy odiando estas sensaciones de mi cuerpo, estoy odiando el hormigueo en mis brazos y sonido de tambor que produce mi corazón con cada latido qué parece más intenso conforme voy avanzando; incluso creo que mis dientes odian a mi labio inferior porque no he dejado de morderlos con insistencia.

Giro en la calle , reconozco los árboles frondoso y las casas parecen tan familiares, casi como si fuera la zona en la que he vivido toda mi vida; quisiera no ser consciente de cómo el tiempo parece ralentizarse, pero lo noto y trago saliva antes de soltar un suspiro que parece un desahogo y entonces también soy consciente de cómo la comisura de mis labios comienzan a curvearse hacia arriba, noto el hormigón de mis brazos desaparecer y aparecer inmediatamente en mi estómago.

Ojalá pudiera fingir que no me he dado cuenta de cada reacción de mi cuerpo, pero estoy más concentrada en la chica parada en la acera que me es imposible decirle a mi mente que ignore las sensaciones.

Rebecca Armstrong está en la acera a mi izquierda, lleva una blusa blanca y un pantalón negro, sobre su hombro derecho la mochila azul que ha usado el último año, su cabello está ondulado y brilla cuando la luz del sol se refleja contra el. La visión a través de las gafas negras que usó no me permite apreciar las fracciones finas de su rostro pero me doy cuenta que podría dibujarla con los ojos cerrados.

Entonces pasa, un nuevo golpe de realidad me hace temblar la sonrisa pero me recompongo inmediatamente porque me está mirando así que cuando llego hasta ella freno de repente, Rebecca no lo nota porque sus ojos parecen perdidos mientras escanea de izquierda a derecha el auto en el que vengo; no puedo evitar sonreír con más ímpetu cuando su sonrisa y su mirada se cruza con la mía, ¿es esto lo que papá definió como enamoramiento? ¿Desde cuando ha estado ahí?

—¿Qué es esto?—. Pregunta riendo y las palabras de mi padre surgen cuando me doy cuenta de que sí, su felicidad me hace feliz—. ¿Freen?

—Mi auto, te dije que te llevaría a la escuela hoy—. Apagó el motor y me desprendo de las gafas para apreciar con una visión HD a Rebecca —. Hay que retocar un poco la pintura y hacer unas reparaciones pequeñas pero en cuanto lo vi me enamoré de él.