Consumidos

Capitulo 19 SOMOS

WILLIAM

Bajo las escaleras a la mañana siguiente, encontrandose con Myla sentada en el desayunador de la cocina —Buen dias princesa— Mumuró, inclinandose para tomar sus labios en un dulce beso, al fin podia saludarla correctamente.

—¿Como dormiste?— Respondió Myla, pasando las manos su cabello,

Pensó unos segundos; sus cabeza volviendo al momento en que Camille se fue, dejandolo con sentimientos tan confusos, se quedo despierto luego de oir la puerta cerrarse,.intentando de entender como sentirse; por momentos la recintia y en otros la melancolia atrapandolo al imaginar ¿Como habrian sido las cosas si se comunicaban a tiempo en vez de vivir bajo un matrimonio que nunca prospero? Luego se dio cuenta que no era inútil, no podia cambiar las cosas.

Pero cuando desperto esta mañana y sintió las frias sabanas del otro lado la cama, el vacio rutinario ya no lo abrumaba porque sabia que, al bajar Myla estaria ahi, como cada dia; ella siempre estuvo allí —¿Quieres hablar de ello?— Dijo al fin tomando asiento frente a ella

Myla se sirvió mas cafe tomando un largo trago —Aun hay algo que no entiendo ¿Cómo lograron tener quimica para...?— Preguntó cuiriosa, —No es que me interesa, ya sabes, pero tal vez explicaria un poco las cosas—

Rió un poco al ver su nariz frucirse en un adorable gesto de desagrado y agradecio la ligereza de su pregunta —Para ser honesto, tampoco lo entiendo— Admitió, bebiendo de su taza, pensó un momento intentando recordar la historia, si esto hiria más alla de lo que tenian queria ser totalmente abierto con ella.

—Dejame adivinar fue un arranger marriage?— Dijo Myla juguetona, rió divertido negando con la cabeza —¿Forced marriage?—

—Cariño, la vida no es un libro— ahogo otra risa en su cafe —Fue mucho más simple que eso, estabamos terminando la universidad, ella estaba en administración de empresas y yo acabando mi licenciatura en literatura inglesa— Explicó

—¿Academic Rivals To Lovers?— Myla Intento adivinar y no pudo contenerse de cayarla con un beso, la adoraba —¿Podrias dejar de intentar explicar todo con tropes?— Murmuró contra sus labios —Detesto cuando hacen eso en internet— La beso por última vez antes de volver a su lugar.

Myla sonrió bebiendo de su taza dejandolo continuar —Estabamos en una fiesta, bebí de más. Mis amigos estaban allí y me insistieron en coquetar con ella diciendo que "debía divertirme" — Aun no comprendia porque la gente pensaba que salir y beber implicaba acostarse con alguien pero era demasiado joven para cuestionarloselo.

—¿Siempre fue tan... distante?—

—A mi ni siquiera me dijo que estaba embarazada, me entere escuchandola hablar con sus amigas— Dijo recordando entrar al salón justo cuando ella preguntaba por metodos para interrumpir un embarazo no deseado. —Creo que ella nunca quiso ser madre— Reflexionó.

—Solia sentirme mal ¿Sabes? pero ya no tengo seis años— Contestó Myla —Preguntarme porque ella nunca estaba en casa o porque preferia estar en el trabajo que estar aqui, pero al final del dia no me importaba porque tu siempre estabas ahi— Una suave sonrisa extendiendose por sus labios, asintió comprensivo. Él también encontro consuelo en ella, incluso en ese tiempo, siempre se aseguro de estar presente y que no sintiera la auscencia de la mujer.

—Te amo papi— Suspiro Myla mirandolo a los ojos, su mirada cargada de amor

—Te amo princesa— Dijo de igual manera tomar sus labios en un beso tierno,

********************

Mas tarde ese dia, estaban en su estudió, revisaron el contrato agregando cosas que Myla queria explorar

—Eso es, camina hacia mí— Indicó con su mano viendola arrastrarse de rodillas sobre la alfombra hasta él, una punzada de placer atravesandolo al verla someterse. Tiró con cuidado de la correa alrededor de su cuello; el metal frio bajo sus dedos mientras regulaba su fuerza para no lastimarla —Buena chica— Premió acariciando su cabello cuando llegó hastaa él.

—Princesa..— Advirtió sintiendola frotarse contra su entrepierna, un calor latante bajo su pantalón exigiendo tomar esa boca, reclamarla. Dios como habia aguantado tanto tiempo.

—Papi— Lloriqueo Myla haciendo pucheros, mirandolo con ojos de chachorro a juego con el rol que estaban interpretando —Nunca me dejas..— Su boca ansiosa buscó el cierre de su bragueta.

Paso una mano por su cabello reconfortadola, se dijo en el pasado se dijo que si no permitia que ella lo complaciera, su condena seria menor, pero la etapa de culpa autoimpuesta ya no lo exemia, no luego de todas las cosas que hizo. Él tamhién había llegado a un limite, queria hacer esto con ella,

Años creyendo tener de disfunción cada vez que intentaba intimar. Luego llego Myla y comprendió que no había nada malo en él, solo que necesitaba tener una conexión emocional para excitarse, lo que hizo que se sintiera peor ¿Como podia desear a su propia... sangre. Entonces vino ella y pudieron compartir el pecado. Podria arder en el infierno el resto de la eternidad, si ella estaba con ella.

—Papi— Sumplicó Myla. un escalosfrio lo recorrio al sentir su calido aliento contra la húmeda tela de sus boxers

—Adelante, princesa— Jadeo, permitiendole bajar la tela con sus dientes, un jadeo tembloroso escapando de sus labios cuando la sintió tomar la punta entre sus labios, su húmedo calor tomandolo hasta el final, Su garganta contrayendose cuando fue demsiado profundo.

Paso una mano en su cabello —Tomalo despacio— Susurró, guiandola con cuidado —Respira por la nariz, eso es..— Jadeó, su boca tomandolo con más cuidado esta vez, oleadas de placer lo atravesaron al sentirla ahuecar las mejillas y llevarlo más profundamente, Empujo lentamente las caderas hundiendose más, hasta sentir su nariz contra su pelvis.

Su vientre se contrajo y se retiro de su boca antes que esto perminara demasiado rapido, Myla gimió en protesta —Ven aqui— Dijo ayudandola a levantarse cargandola hasta la habitación principal.

La recosto suavemente en la cama, pidiendo permiso con la mirada antes de bajar con tiernos besos por su suave piel, recorrió cada parte de ella hasta dejarla asiosa por más.

Separó con delicadeza sus piernas besando el interior de sus muslos, temblarosos. Bajo sus labios, el olor de su excitación impregnando su nariz a medida que se acercaba, dejando un ucamino de besos hasta su puente de venus; lentamente abrió sus carnosos labios sintiendola húmedecerse bajo su toque.

Húndió su boca en Myla, perdiendose, el calor abrazando sus mejillas, humdió su lengua, en ella, guiandose con sus gemidos trazo patrones infinitos hasta su clitoris chupando suavemente, lamiento, succionando y aplicando la presión perfecta para no sobreestimularla.

—Papi— Lloriqueó Myla entre gemidos. Levantó la cabeza mirandola a los ojos —Te necesito, por favor— Ojos suplicantes rogando por él, subió por su cuerpo hasta tomar su boca de nuevo.

—Dime, princesa ¿Que quieres?— Acarició su mejilla, acunando su rostro entre sus manos.

—Hazme tuya, convierteme en tu única mujer— Su corazón latió con fuerza en su pecho al las pabras, las lineas desdibujandose por completo cuando finalmente la reclamo en cuerpo y alma.