El olor a panqueques y café recién hechos impregnaba la cocina, haciendo su estómago gruñir. Terminó de bajar los últimos escalones, acercándose a Will, que estaba inmerso en sus pensamientos sin darse cuenta de su presencia.
—Huele delicioso —murmuró, frotando su nariz contra su espalda e inhalando el suave aroma a jabón de manzana en su piel.
—¿El desayuno o yo? —William se burló con una risa ronca que fue directo a su centro. Dios, nunca podría tener suficiente de este hombre.
—Ambos —respondió, sus manos traviesas delineaban los músculos de sus abdominales, bajando lentamente hacia su entrepierna
—Princesa... —jadeó Will cuando sus manos se metieron debajo de su pantalón de pijama. Pero no fue directo a donde la mayoría iría; tenía un gusto más particular y sabía que William adoraba sus atenciones allí.
Acarició sus caderas y apretó su musculoso trasero, sonriendo cuando él se empujó contra su mano.
—¿Ansioso? —se burló juguetonamente, repartiendo besos por su amplia espalda.
—Eres tan buen hombre, padre y... amante —susurró entre besos, sus dedos perdíendose entre sus nalgas y sus labios descendíeron arrodillandose tras él.
—Princesa, no... —Cualquier cosa que él fuera a decir fue interrumpida cuando enterró su cara contra su piel, un largo gemido abandonó los labios de Will. Separó sus mejillas, delineando con su lengua antes de lamerlo.
—Prince... —trató de decir, pero fue interrumpido.
—¿No sabes decir otra cosa? —se burló nuevamente, disfrutando cómo se entregaba sin ningún tipo de tapujo.
William tomó el control nuevamente cuando llevando una mano a su cabello, presionandola contra él, ahogando cualquier comentario sarcástico.
La cocina se sentía cálida; los olores cotidianos a café y comida dulce le daban una sensación de goce total.
Myla se separó un momento para tomar aire y sus ojos brillaron al verlo.
—Aún lo tienes —dijo, pasando los dedos por la inscripción en su piel. "ESTE CUERPO ES TUYO", decía con su propia caligrafía. Fue un tatuaje que él se hizo en secreto y que ella descubrió más tarde en una de sus largas sesiones. Aún no podía creer que se lo hiciera solo porque ella mencionó brevemente a un personaje ficticio hacerlo por su pareja en uno de sus libros.
—Es un tatuaje, mi vida, no se borrará —su comentario le ganó una nalgada, y Myla disfrutó ver la inscripción nuevamente. Se acercó para besarla mientras deslizaba un dedo observandolo moverse contra su mano y se sintió tan afortunada de tener a un hombre como él; pocos le permitirían hacer esto, a pesar de que sus experiencias en la universidad decían lo contrario.
Pero se detuvo antes de que mancharan la cocina, dejó un suave beso en su hombro al poniendose de pie.
—¿Desayunamos? —La mirada de Will casi asesina sobre ella, pero no se dejó intimidar; lo terminarían luego.
***********
Mas tarde ese dia estaban acostados en el sofa en sofa haciendo zapping intentando encontrar algo bueno que mirar, ya se habían terminado todas las peliculas que Will tenia en DVD y la televisión por cable nunca ofrecia nada bueno. —Detente— Dijo cuando paso por el canal de las noticias, odiaba ese canal era tan deprimente pero algo llamo su atención
—Subele— "ACCIDENTE MULTIPLE EN DTLA" Podia leerse bajo la imagen de la tragedia, levemente censurada por la gravedad de lo sucedido.
—¿Ese lugar no esta cerca de donde trabaja Camille?— Se inclino para ver mejor y como si de una pelicula se tratara el telefono de Will empezo a sonar.
Lo miro contestar con cara de cincunstancia —Si, si estaremos allí— Dijo él antes de colgar
—Debemos ir al hospital—
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Consumidos
RomanceSINOPSIS Mia: una habida lectora que toda su vida ha soñado vivir un romance como los de sus libros, enamorada del mismo hombre desde pequeña, un amor tan imposible y prohibido que temía mencionarlo. Intento olvidarlo, pero cuando descubre un secret...