El laberinto de la Culpa - Katsudeku

15. Confrontación

El crepúsculo cubría la ciudad con un manto de sombras, y el callejón donde Katsuki Bakugou había decidido esperar parecía aún más desolado bajo la tenue luz de los faroles. El sonido distante de tráfico y murmullos de la ciudad contrastaban con el silencio expectante del callejón. Katsuki estaba al borde de la desesperación, su determinación inquebrantable en la búsqueda de una solución al conflicto con Izuku.

Había estado esperando por un tiempo que se sintió interminable. La ansiedad y la expectativa se mezclaban en su mente mientras miraba alrededor, tratando de encontrar una señal de Izuku. Finalmente, el sonido de pasos en la distancia hizo que Katsuki se enderezara, su cuerpo tensándose al reconocer la figura que se acercaba.

Izuku apareció en la entrada del callejón, la misma figura que Katsuki había visto aquella noche, pero ahora con una presencia aún más imponente. El traje de villano de Izuku parecía haber sido diseñado con una precisión calculada, cada detalle reflejaba su evolución desde su vida anterior. La camiseta blanca con el chaleco negro y las botas rojas contrastaban con la penumbra, dándole un aura de determinación y poder.

Katsuki respiró hondo, sus emociones a punto de desbordarse mientras miraba a Izuku. Había una mezcla de tristeza, sorpresa y una preocupación profunda que no podía ignorar. Izuku se detuvo al ver a Katsuki, sus ojos reflejando una mezcla de sorpresa y desconfianza.

—¿Qué haces aquí? —preguntó Izuku, su voz cargada de una tensión que Katsuki no había esperado.

Katsuki dio un paso adelante, tratando de reunir las palabras adecuadas. Había esperado mucho para este momento, pero ahora que estaba aquí, las palabras parecían escapar de él.

—Quiero hablar contigo —dijo finalmente Katsuki, su tono más firme de lo que se sentía por dentro—. No puedo seguir ignorando esto. Necesito entender qué pasó.

Izuku frunció el ceño, sus ojos evaluando a Katsuki con cautela. La sorpresa de ver a Katsuki en ese lugar era evidente, y no pudo evitar sentir una punzada de nostalgia y confusión.

—¿Sobre qué? —preguntó Izuku, con una mezcla de irritación y curiosidad. Su actitud era defensiva, pero había una parte de él que deseaba saber qué quería Katsuki.

—Sobre nosotros —respondió Katsuki, su voz cargada de arrepentimiento—. Sobre todo lo que pasó y lo que somos ahora.

El silencio se extendió entre ellos mientras ambos hombres se enfrentaban. Katsuki podía sentir el peso de los años que habían pasado y el cambio que había ocurrido en ambos. Izuku parecía más distante, su actitud una mezcla de dureza y tristeza. Katsuki se dio cuenta de lo difícil que era confrontar a alguien que había conocido en una etapa tan diferente de su vida.

—No sabía que te habías convertido en un villano —admitió Katsuki, su voz baja—. Verte así... es difícil de aceptar.

Izuku lo miró con una mezcla de sorpresa y desafío. La sinceridad en la voz de Katsuki era algo que no esperaba, y la tensión en el aire parecía palpable. Se dio cuenta de que Katsuki había cambiado tanto como él, y la conversación que habían esperado durante tanto tiempo finalmente estaba ocurriendo.

—¿Y qué? —dijo Izuku, tratando de mantener su postura firme—. ¿Qué esperas que haga? ¿Que me arrepienta de lo que soy ahora?

Katsuki sacudió la cabeza, su expresión tornándose más suave. Había una lucha interna evidente en su rostro, y su tono era un reflejo de su conflicto emocional.

—No estoy aquí para juzgarte —dijo Katsuki—. Estoy aquí para entender. Para saber si hay alguna forma de... arreglar las cosas.

Izuku respiró hondo, sintiendo una oleada de emociones mezcladas. El pasado que había intentado enterrar regresaba con fuerza, y la sinceridad de Katsuki era un recordatorio doloroso de lo que una vez había significado para él. Sin embargo, también se dio cuenta de que su vida actual estaba construida sobre decisiones que no podía cambiar.

—Lo que pasó, pasó —dijo Izuku con una voz que estaba al borde de la quiebra—. No puedo cambiar lo que soy ahora. La Liga de Villanos me ha dado un propósito, una familia. No puedo simplemente dejar todo eso atrás.

Katsuki asintió lentamente, comprendiendo la gravedad de la situación. Sabía que Izuku había encontrado su lugar en la Liga, y que no podía simplemente deshacer todo lo que había hecho. Aun así, sentía una necesidad de cerrar el capítulo del pasado y entender mejor la persona con la que había perdido contacto.

—No quiero que esto termine en una pelea —dijo Katsuki, con una voz firme pero vulnerable—. Solo quiero hablar, tratar de entender.

Izuku lo miró con una mezcla de desconfianza y reflexión. No estaba seguro de cómo reaccionar, pero la sinceridad de Katsuki y su deseo de resolver las cosas le daban una pequeña esperanza de que tal vez podrían encontrar un terreno común.

De repente, Izuku se sintió abrumado por el peso de la conversación y la intensidad de la situación. Su cuerpo temblaba ligeramente mientras luchaba con las emociones que surgían. Sin previo aviso, tomó una bola de humo de su bolsillo y la lanzó al aire, creando una nube densa que cubrió el callejón.

—¡Deku, espera! —gritó Katsuki, pero su voz se perdió en la nube de humo que se expandía rápidamente.

Izuku aprovechó la confusión para desaparecer, su corazón acelerado mientras se alejaba. El encuentro había sido un torbellino de sentimientos, y necesitaba tiempo para procesar lo que había sucedido. Mientras se alejaba en la oscuridad, sintió una mezcla de alivio y tristeza, su mente llena de preguntas sin respuesta y recuerdos dolorosos.

Katsuki quedó solo en el callejón, el humo disipándose lentamente. Miró a su alrededor, tratando de entender lo que había pasado. La sensación de incompletitud y el dolor del encuentro aún persistían, pero sabía que había dado un primer paso en el proceso de enfrentar el pasado.

—Lo haré mejor la próxima vez —murmuró Katsuki para sí mismo, mientras salía del callejón con una resolución renovada. Sabía que la confrontación no había terminado, y que debía seguir adelante con el compromiso de resolver las cosas, sin importar cuánto tiempo tomara.