Corazones Destrozados

CAPITULO 5 💔

LUCIFER

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Flash Black

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Se acerca una mujer en ropa interior, como todas aquí.

Deja la botella y los vasos, me sirvo whisky junto con los dos delincuentes que tengo al lado, uno toma su cigarro de Marihuana, y el mayor se mete tres líneas de polvo a la nariz, comienza la música, salen unas bailarinas vestidas con ropa árabe y hacen su baile.

Y de repente, como personaje estelar, sale una mujer, la miro atento y no le quito los ojos de encima, es una mujer muy llamativa, en los altavoces la anuncian como Sherezada, volteo a mirar a Farzad Bonanne y con la cabeza me dice que sí, entonces es quien yo creo que es.

Sherezada es la hija de Farhad, el hombre que está en prisión, el que Hernán atrapó en el mar Negro y su hermano, es el imbécil al que yo maté en las catacumbas, su madre y ella creo que viven juntas y están ambas en activo en la mafia.

Sherezada Bonanne, la sobrina de Babak, tiene una cabellera muy China, grande, larga y castaña, es de piel un poco acaramelada, un poco morena solamente, y entre más se acerca, le miro los ojos cafés, tiene unos labios carnosos, y un rostro precioso, unas curvas de infarto, tiene unas tetas grandes, una cintura pequeña, un culo enorme, unas piernas torneadas, en resumen, esta mujer tiene un cuerpo jodidamente exquisito.

La veo mientras se contonea, ella baila sexymente, todo mundo le chifla, le aplaude, le grita, y en un momento, ella cruza su mirada con la mía, recargo mi brazo en el respaldo, abro las piernas en descanso y con la otra mano bebo mi vaso de Whisky, mientras la veo cómo se contonea delante de mí.

Se acerca a la orilla y queda Justo frente a mi vista, el escenario es alto así que tengo que mirar un poco para arriba para verla mejor, la observo toda, de arriba abajo, trae un sostén dorado de acuerdo a su vestimenta y en la cintura solo se podría decir que es una falda larga pero tiene muchas abiertas, y cada vez que se mueve se ve absolutamente toda su piel y obviamente ya me percaté que no trae lencería debajo.

Sigue bailando, moviéndose lentamente y me mira con ojos curiosos, y yo no dejo de repasarla, es una maldita la cual lleva la sangre de ese infeliz, y aun así, ni el maldito apellido le quita lo sabrosa y lo buena que está, y como era de esperarse, yo también la pongo a mil.

Ella se baja del escenario, se balancea de aquí para allá entre los tipos que hay en las mesas, no giro la cabeza, no es nadie para seguirla con mirada, veo a la gente que la sigue, que le grita, le aplaude y por las miradas de los demás sé que se está acercando a esta mesa.

Llega por el lado izquierdo y vuelvo a conectar mi mirada con la suya, ella se queda frente a mí, sigue moviéndose y tocándose, no dejó de verla y se acerca más, comienza a tocar mis piernas con sus manos, sube poco a poco hasta que llega al abdomen, sube por mis pectorales y cuello, y cuando sus manos están en mi nuca se abre de piernas, y se monta encima mío, me sigue bailando, comienza a contonearse, y le miro los pechos que tengo aquí enfrente.

Grandes como me gustan, no la toco solo la miro extasiado, porque joder, claro que me prende, tengo mucho tiempo sin sexo y lo único que hago todas las malditas noches es jalarme la verga pensando en la pelirroja.

Se balancea conmigo debajo y eso hace que se me ponga dura.

Acerca su rostro al mío pero no hacemos contacto, solo la miro y me mira, baja sus manos a la pretina de mi pantalón, desabrocha el cinto, desabrocha la jeans, baja el cierre y mete la mano sin pedir permiso.