miope ⋆ tsukishima kei

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Me da wiwi hablar de esto con mi mami ¿Y si el Kei tiene razón? No tengo ningún derecho para reclamarle algo, ella es una mujer adulta y puede hacer las weas que quiera con su vida, pero putao, igual me molesta que me oculte cosas, después de todo sigo siendo su hija.

Sé que yo tampoco le he mencionado que estoy casi pololeando, quizá debería hacerlo, pero no creo que ambas situaciones tengan la misma importancia.

Yo soy una adolescente experimentando en el romance, ella es una mujer divorciada y con una hija.

Si yo tuviera una hija le diría que estoy saliendo con alguien ¿Por qué esconderlo?

Aunque quizá yo soy la que se crea problemas solita.

— ¿Mami? — Hablé mientras caminaba hacia la cocina.

Ahí estaba, vistiendo la típica ropa de oficina mientras cocinaba algo.

— ¿Y eso que llegó temprano a la casa? — Pregunté.

— Hubo problemas en la oficina, se fue la luz y el agua, no sé qué habrá pasado la verdad — Me respondió — ¿Y tú? ¿No pasaste a ningún lado? Deberiai aprovechar pa salir con tus amigas después de clases po, disfrutar tu juventud.

— Ah, es que me vine con el Kei — Dije con un poquito se vergüenza.

— ¿Quién es ese? ¿Estai pololeando?

— No todavía, estamos andando nomas — Espero que quedi contento ahora, Tsukishima — El Kei es ese que le dije hace tiempo que me caía mal.

Mi mami se rió al escuchar eso.

— ¿Y usted? ¿Está pololeando también? — Tragué fuerte después de preguntar eso, mi mami como que se tensó al escucharlo.

— ¿De qué hablai, _____? — Ni siquiera me miró, seguía concentrada cocinando, pero igual noté un cambio en su voz.

— La vi el otro día con un señor — Me intenté reír para alivianar el ambiente — Iban agarraditos de la mano.

No me respondió.

— ¿Por qué no me dijo? ¿No confía en mí? — Estoy toda nerviosa — Ese día usted me dijo que iba a estar todo el día en el trabajo e incluso que en una de esas no llegaba a la casa, pero voy y me la encuentro con un señor en el mall — Me acerqué un poco más a ella — ¿Por qué no me dijo? ¿Para qué me miente, mami? Ni que le fuera a reclamar por pololear.

— Hija...— Por fin me miró.

— Se me hace feo que usted, mi propia mamá, ande con secretos — Fruncí el ceño — Quizá cuántas veces usted me mintió para salir con alguien.

— Lo hice porque te lo podiai tomar mal po, _____ — Apagó el fuego, esto se iba a poner serio — No creo que sea fácil verme con otro hombre que no sea tu papá.

— ¿Por qué me lo tomaría mal? Mami, quiero que usted sea feliz, no me importa qué haga o con quién esté para serlo, lo que si me tomo mal es el hecho de que usted me mienta, reitero, ¿En dónde queda la confianza?