Spanktember 2024

Día 20: Lesson learned [SHINee]

Taemin se despertó sintiendo el cuerpo pesado y la nariz congestionada. El día anterior tuvo una grabación por la noche y parece que el frío lo enfermó. Ese día no tenía nada programado por la mañana, pero tenía una práctica grupal por la tarde y no podía permitirse faltar.

Se obligó a ponerse de pie y a vestirse. Si quería estar bien para la práctica tenía que tomar medicina, pero hasta donde recordaba no había nada en el dormitorio y si sus hyung se enteraban lo obligarían a quedarse en la cama todo el día.

Salió del dormitorio, procurando ir bien abrigado y que ninguno de los miembros le vea. Caminó hasta la farmacia más cercana, sintiendo que cada paso representaba un esfuerzo gigante y que cada vez era más difícil respirar.

Cuando estaba apunto de llegar chocó accidentalmente con alguien.

— L-lo siento. — Dijo como pudo, sintiendo que las palabras no salían como corresponde.

— Está bien, fue mi cul- ¿Taemin? — Levantó la mirada dándose cuenta de que era Baekhyun la persona con la que chocó. — Oh, por dios, te ves terrible ¿Por qué estás en la calle cuando luces tan enfermo? ¿Onew hyung lo sabe?

— N-no, yo... — Un ataque de tos lo cortó. — Iba a comprar medicina.

Baekhyun suspiró. — Vamos te llevaré a casa, estoy seguro de que Onew hyung se encargará de cuidarte y darte medicina.

— N-no, hyung, no. Onew hyung me va a matar si se entera.

— No puedo dejarte aquí en ese estado, Taemin. Onew hyung tiene todo el derecho de molestarse contigo, pero no te va a matar. — Lo sostuvo de los hombros y empezó a guiarlo de vuelta al dormitorio.

Taemin se quejó, pero no tenía fuerzas para resistirse. El camino hacia el dormitorio pareció eterno para su cuerpo que en cualquier momento dejaría de poder mantenerse de pie, pero muy corto para su ansiedad. Onew estaría furioso con él cuando se entere que salió del dormitorio estando enfermo.

Cuando llegaron, Onew saludó un poco sorprendido a Baekhyun antes de darse cuenta del estado de Taemin.

— ¿Taemin? ¿Cuándo saliste? ¿Estás enfermo? — La voz de Onew cada vez sonaba más preocupada y al mismo tiempo molesta. Trató de esconderse detrás de Baekhyun, pero este lo obligó a enfrentar al mayor.

— Salió a comprar medicina en secreto. Ahora estoy un poco apurado, hyung, así que te lo dejo a ti.

— Por supuesto, Baekhyun-ah. Gracias por traerlo.

Baekhyun se despidió con una reverencia y luego se fue.

— Vuelve a la cama, te prepararé algo de comer y después hablaremos. — Taemin tragó saliva por la severidad con la que habló, no se atrevió a desobedecer.

Volvió a entrar a su habitación, ignorando la mirada confundida que Key le dio cuando pasó por su lado. Se quitó la ropa de la calle y volvió a meterse en las cobijas, su cuerpo agotado realmente se lo agradecía, pero su mente no podía tranquilizarse. Sabe que salir estando enfermo fue estúpido y le traerá muchos problemas, pero realmente no quería faltar a la práctica, odiaba atrasarse y que luego el coreógrafo le grite por no hacerlo bien.

Onew entró poco después a la habitación, le dio un plato de sopa, dejó unas pastillas en la mesa no noche y se sentó a su lado mientras comenzaba a comer.

— Sabes que cuando estás enfermo debes descansar para poder recuperarte ¿Por qué hiciste algo tan tonto?

— N-no quiero faltar a la práctica y ustedes no me dejarán ir.

— Tienes razón en ese punto, no vamos a dejar que te pares hasta que te recuperes. Pero no creas que lo hacemos para lastimarte, lo hacemos porque nos preocupamos por ti. Eres un buen bailarín, te pondrás al día en un instante y te arrepentirás por haberte metido en problemas.

— Ya estoy arrepentido. — Dijo suavemente mientras se tomaba las pastillas.

— No lo dudo, pero eso no te salvará del castigo. Aunque eso esperará hasta que te recuperes, por ahora descansa. — Se levantó tomando el plato para llevarlo a la cocina. — Tengo que ir a trabajar, si te atreves a levantarte sin necesidad recibirás la vara.

Tragó saliva, sabía que no era una amenaza vacía.

Pasó la mayor parte del día durmiendo y solo comió algo cuando alguno de los miembros lo obligó. Al día siguiente se sentía como nuevo, era asombroso lo que un día de descanso podía hacer.

— ¿Cómo te sientes? — Onew entró a la habitación, poniéndole la mano en la frente para comprobar su temperatura.

— Mucho mejor.

— Eso es bueno, parece que podrás volver al trabajo esta noche. De igual modo pasarás el día en cama, solo para estar seguros. — Taemin asintió y miró con miedo y odio la mano del mayor. — No tienes que estar tan asustado. — Se rio suavemente.

— Tengo suficientes razones para estar asustado. Hyung ¿Podemos terminar con eso, por favor?

— ¿Estás seguro? Podemos esperar hasta después de la práctica.

Negó. — En serio me gustaría terminar con eso de una vez, odio la ansiedad de saber que voy a recibir un castigo.

— Está bien, si es lo que quieres. — Se sentó en la cama y esperó.

Taemin se acomodó encima de su regazo sintiendo como la ansiedad que sentía crecía enormemente con cada segundo que pasaba.

Onew le avisó que comenzaría y justo después empezó a darle nalgada tras nalgada, rápidamente calentando todo su trasero.

— Necesito que me digas cuando estás enfermo o lastimado, no soy adivino y necesito saberlo para poder cuidarte.

— T-te lo diré. — Dijo con dificultad, el dolor se estaba volviendo demasiado muy rápido. Onew se estaba asegurando de dejar cada centímetro de su trasero en llamas.

— Y no dejas la cama para salir a la calle cuando estás enfermo, Lee Taemin. Tienes que ser más responsable con tu salud.

— ¡Lo seré! Por favor, hyung, no más. — Dijo, sin contener más los sollozos.

— Todavía falta. — Le dijo con cariño, pero con firmeza.

Siguió repartiendo fuertes golpes sobre su trasero y la parte superior de sus muslos durante un rato, tenía clara la intención de que Taemin nunca olvidara la lección.

— Si vuelves a hacer algo así de nuevo esto parecerá como un juego de niños comparado con lo que te haré. — Le advirtió con severidad antes de detenerse.

— No volverá a pasar, hyung. Lo prometo. — Respondió entre lágrimas.

— Terminamos, puedes levantarte. — Le dijo suavemente.

Taemin se levantó mientras trataba de calmar su llanto y abrazó a Onew.

— Lo siento.

— Está bien, ya pasó. — Lo tranquilizó y le limpió las lágrimas con delicadeza. — Te amo, Taemin.

— Yo también te amo hyung.

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Meses después.

— ¿Taemin no se ha levantado? — Key preguntó un poco irritado al no verlo en la cocina.

— Está enfermo. — Onew respondió concentrado en su desayuno. — Me lo dijo esta mañana y cuando fui a revisarlo realmente estaba mal, ya le dije a nuestro manager.

— Es raro en él decir estas cosas, usualmente solo fingiría que no tiene nada e iría a trabajar. — Minho notó.

— Parece que por fin aprendió la lección.