Legalmente Amor

20 Planetario

—Les tengo una noticia —Ender se apoya en la mesada de la cocina, mientras le doy de comer a Isabella de casi ocho meses.

—La embarazaste —digo—, era obvio se la pasan como conejos.

—¿Qué? No embarace a Estefi, no aún.

—Ósea que si vas a darme sobrinos también —lo dice porque el hijo de mi hermana es tan sobrino para ella como uno que venga de Ender.

—Eventualmente, aunque me gustaría hacer las cosas a la inversa de ustedes. Literalmente primero tenían una hija en camino, luego sin darse cuenta comenzaron a vivir juntas, luego fueron pareja y seguramente en algún momento, pienso y deseo desde el fondo de mi alma, se casen —da una gran bocanada de aire se lo nota nervioso—. Con Estefi estuvimos trabajando en un proyecto —lo miro curiosa, hace unos meses me pidió algo de dinero que me ha ido devolviendo regularmente cada mes—, para eso fue el dinero que te pedí —me mira— ¿recuerdas que te dije que tenía un sueño?

—Sí —Laura me mira, mientras se acomoda los anteojos y viene a abrazarme por la espalda.

—Bueno, abriremos el taller en una casa que le dejó su padre y fuimos refaccionando, yo voy a enseñar carpintería y soladaduras y ella va a dar cocina y tapiceria, lo que salga eso lo vamos a vender para reinvertir en materiales. Serán talleres de oficio para darles herramientas a los chicos en las calles y con adicciones, bueno eventualmente queremos darles al menos una comida al día —ambas lo miramos y sonreímos, nos acercamos a abrazarlo.

—Me encanta, cuñado, cualquiera cosa que necesites en lo legal me avisas o te vas por el estudio.

—Estoy muy orgullosa de ti, regurgito de bebé —él se ríe. Es su extraña manera de decirse  que se aman—. Cuenta con nosotras para lo que necesiten. Supongo que ahora que el tío Endi va a estar muy ocupado solo el tío Calum va a poder cuidar a su sobrina —Laura me sonríe con maldad.

—Oye.

—Y así nacen el favoritismo por un tío.

—¡OYE! Que la puedo cuidar igual, no seas así Laura —ella le da la espalda—,  Nat dile algo.

—Ya la escuchaste, yo no voy ni de broma en contra de mi futura esposa.

—¡Gobernada! No le digan nada a Calum, es capaz de tomarse un avión para venir a cuidar a Isa —Laura le marca y su hermano intenta quitarle el teléfono, entonces corren por la casa e Isabella los mira riéndose— ¡Dame ese teléfono, ser del mal! Yo voy a estar siempre para mi sobrina —su hermana ríe y sigue corriendo.

Corta la llamada y se sienta sobre mis piernas agitada y riendo. La beso y nuestra hija demanda nuestra atención colocándola en medio de ambas para que la llenemos de besos. Ender ve el teléfono de su hermana y suspira.

—Ay ya se pusieron melosas, me voy —voltea a vernos—. Por cierto son unas odiosas.

—También te amamos —le digo y vuelvo a besar a mi novia—. Eres mala.

—Muy mala —me besa y Bella nos separa aferrándose a mí—. Esta niña te va querer robar, cásate conmigo lo antes posible —me dice y se levanta. La observo porque si voy a casarme con ella, pero primero tengo que proponérselo y eso ya lo tengo preparado también.

Por Laura alquilaría el cielo mismo las estrellas y la luna, solo para que brillen todas para ella una sola noche, pero ya no tengo el poder adquisitivo que tenía antes, aunque el estudio va bien no son los mismos ingresos que tenía cuando estaba en el bufett, pero el dinero que nos deja es el suficiente para irnos de vacaciones y viajar de vez en cuando.

Le comenté a mi padre que quería hacerle la propuesta a Laura cuando fuimos a su casa y él sin esperármelo, me ofreció su ayuda para lo que sea, pensé que me lo había dicho de cortesía pero de vez en cuando, cuando hablamos me lo vuelve a reiterar ¿Quién diría que este es el mismo hombre que hace un tiempo atrás casi me borra del árbol genealógico por ser gay? Supongo que las personas si cambian después de todo, digo yo también soy la viva prueba de eso.