El silencio antes del caos
Los días en Gravity Falls habían comenzado a calmarse después del extraño incidente en el sótano del Mystery Shack, aunque tanto Dipper como Pacifica sabían que las cosas no volverían a ser las mismas. A pesar de la tranquilidad exterior, el caos interno entre ambos era cada vez más palpable. El beso que compartieron no dejaba de resonar en sus mentes, un recuerdo que encendía algo dentro de ellos cada vez que sus miradas se cruzaban.
Mabel, como siempre, andaba ocupada con sus propias aventuras, ajena al creciente conflicto emocional entre su hermano y Pacifica. Sin embargo, su capacidad para notar pequeños detalles no la dejaba indiferente. Mabel sabía que algo estaba pasando, y aunque Dipper trataba de ocultarlo, su comportamiento cada vez más distraído y nervioso lo delataba.
Dipper se había refugiado en su habitación durante las últimas horas. Aunque tenía el diario de Ford frente a él, apenas había leído una palabra. En cambio, estaba concentrado en un cuaderno personal, uno que Mabel no había visto en años. En sus páginas, trazaba cuidadosamente una serie de dibujos. Algunos eran bocetos rápidos de los símbolos en su brazo, pero otros... otros eran mucho más personales. El rostro de Pacifica, con su cabello dorado y su expresión concentrada, aparecía repetidamente en sus dibujos.
Dipper no podía negarlo más. Desde aquel primer beso, algo en él había cambiado. Pacifica ya no era solo una compañera en sus aventuras, ni la chica que había conocido años atrás. Era alguien con quien compartía una conexión más profunda, aunque todavía no supiera cómo explicarlo.
El sonido de pasos rápidos resonó en el pasillo antes de que la puerta de la habitación de Dipper se abriera de golpe. Mabel entró con su habitual entusiasmo, llevando en sus manos una bufanda nueva que acababa de terminar de tejer.
—¡Dipper! ¡Mira esta bufanda! ¿No es la cosa más fabulosa que has visto en tu vida?
Dipper se sobresaltó, intentando rápidamente cubrir su cuaderno con el diario de Ford, pero fue demasiado tarde. Mabel, siempre curiosa, ya había visto lo que estaba haciendo.
—¡Espera un segundo! —exclamó, sus ojos agrandándose con sorpresa y diversión—. ¿Qué estabas dibujando ahí?
Dipper sintió el calor subir a su rostro. No podía mentirle a Mabel, pero tampoco estaba listo para confesar lo que había estado haciendo.
—No es nada, solo... solo estaba practicando mis dibujos —intentó excusarse.
Pero Mabel, siempre persistente, se acercó rápidamente y le arrebató el cuaderno de las manos antes de que pudiera detenerla. Abrió el cuaderno por la página donde estaba el dibujo más reciente de Pacifica, y sus ojos brillaron con malicia.
—¡Aha! Sabía que algo raroestaba pasando. —Mabel sonrió de oreja a oreja, claramente emocionada por loque acababa de descubrir—. ¿Así que estás dibujando a Pacifica, eh? ¡Quéromántico, Dipper!
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La conexión oculta: DIPPER Y PACIFICA
AvventuraEsta historia esta basada 5 años despues de todo lo que paso aquel verano. cada dos dias va a ver actualizaciones y una estrella me motivaria resto gracias...