La noche caía lentamente sobre Nueva Orleans, y _____ caminaba por las calles desiertas, su mente atrapada en un torbellino de emociones.
Amaba a Alastor, pero lo que había descubierto sobre él la había dejado sumida en la confusión.
¿Podía confiar en él?
¿Debería creer que nunca le haría daño?
Los recuerdos de su mirada temerosa en el armario todavía la perseguían, y se preguntaba si, en el fondo, Alastor no era más que un depredador que esperaba a que bajara la guardia.
Sus pensamientos se dispersaron cuando un grito repentino resonó en la oscuridad. Un hombre apareció de la nada, acercándose a ella con intenciones claramente amenazantes.
Su corazón se aceleró mientras él le exigía sus pertenencias, y el miedo la paralizó. Pero antes de que pudiera reaccionar, una figura familiar emergió de las sombras.
"¡_____!"
Gritó Alastor, y el hombre se volvió, sorprendido por la interrupción.
Sin dudarlo, Alastor se lanzó hacia él, deshaciéndose del agresor con una rapidez y ferocidad que la dejaron boquiabierta.
El hombre, incapaz de resistirse, se marchó a toda prisa, dejando atrás la tensión que había colmado la noche.
Alastor se acercó a ella, sus ojos reflejando preocupación.
"¿Estás bien?"
Preguntó, su voz grave y llena de inquietud.
_____ asintió, aunque su cuerpo todavía temblaba, no solo por el miedo, sino también por la cercanía de Alastor.
Él se acercó un poco más, y su toque suave en su brazo hizo que se le revolviera el estómago.
La tensión entre ellos era palpable, y aunque su instinto la advertía sobre el peligro que representaba, había algo en él que la hacía sentirse segura.
"No deberías estar aquí..."
Murmuró ella, intentando mantener la distancia, pero la proximidad de Alastor era embriagadora.
"Necesito hablar contigo."
Su voz era profunda, y ella podía ver la lucha interna en sus ojos.
_____ se sintió dividida. Sabía que tenía que enfrentar sus miedos, pero las palabras se atoraron en su garganta.
En lugar de responder, en un impulso casi irracional, se acercó y lo besó.
La conexión entre ellos se encendió al instante, como una chispa que avivaba el fuego que había estado latente en su interior.
La dulzura de sus labios la llenó de una confusión aún mayor; se sentía loca por hacer eso, pero a la vez, sabía que había algo más profundo entre ellos.
En su mente, se cuestionó:
¿Qué estaba haciendo?
Charles nunca hubiera hecho eso por ella. Él siempre había mantenido las distancias, siempre había sido más un compromiso que un amor verdadero.
Pero Alastor... la miraba de una manera que la hacía sentir viva, deseada, y, sobre todo, segura. A pesar de sus oscuros secretos, algo en él la hacía confiar en que él la protegería.
Cuando finalmente se separaron, sus corazones latían desbocados.
_____ lo miró, sintiendo la calidez de sus mejillas ruborizadas, y se dio cuenta de que, a pesar del peligro que representaba, Alastor era la única persona que realmente la hacía sentir amada.
"No quiero que me hagas daño, Alastor..."
Susurró, su voz temblorosa, aún confundida sobre lo que sentía.
"Nunca haría eso, _____"
Prometió él, mirándola intensamente.
"Te amo, y haría cualquier cosa para protegerte."
Ella se quedó en silencio, su mente girando entre el amor que sentía por él y el miedo a lo que él era.
Pero en ese momento, sintió que, por primera vez en mucho tiempo, había tomado una decisión: dejaría que su corazón guiara su camino, incluso si eso significaba enfrentarse a las sombras que rodeaban a Alastor.
Al final, en medio de la confusión y el miedo, había encontrado un atisbo de claridad.
Alastor no era un monstruo para ella; era un hombre roto que la había salvado, un amor que la hacía sentirse viva.
Y, por un momento, todo lo que quería era estar con él.
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𝖇𝖑𝖊𝖊𝖉𝖎𝖓𝖌 𝖍𝖊𝖆𝖗𝖙𝖘 (𝙰𝚕𝚊𝚜𝚝𝚘𝚛 𝚡 𝙻𝚎𝚌𝚝𝚘𝚛𝚊) [1]
Lãng mạn_____ está atrapada entre un compromiso obligado con un prometido generoso y una vida de aparente perfección. Su mundo cambia cuando conoce a Alastor, un locutor de radio famoso con un oscuro secreto. Aunque su relación comienza como una amistad...