𝖇𝖑𝖊𝖊𝖉𝖎𝖓𝖌 𝖍𝖊𝖆𝖗𝖙𝖘 (𝙰𝚕𝚊𝚜𝚝𝚘𝚛 𝚡 𝙻𝚎𝚌𝚝𝚘𝚛𝚊) [1]

| 𝓝𝓾𝓮𝓿𝓸𝓼 𝓢𝓮𝓬𝓻𝓮𝓽𝓸𝓼 |

La ausencia de Charles se sentía como una sombra en la vida de _____, aunque el peso de su matrimonio aún no desaparecía por completo.

Legalmente seguían comprometidos, pero era como si un velo invisible separara ese vínculo de la realidad.

Charles había desaparecido sin dejar rastro, y aunque muchos en su círculo comenzaban a murmurar, _____ intentaba no prestar atención a los comentarios.

Alastor y _____, por otro lado, se encontraban en una etapa peculiar.

Lo que había comenzado como un coqueteo peligroso entre dos almas heridas ahora se había transformado en algo más profundo.

Pasaban las tardes juntos, caminando por las calles empedradas de la ciudad, compartiendo conversaciones entre risas y miradas cómplices.

Había una cercanía que los envolvía, como si el mundo desapareciera cuando estaban juntos.

_____ sentía que estaba viviendo una historia distinta, una donde por primera vez era libre de elegir, aunque sabía muy bien que esa libertad estaba envuelta en mentiras.

Alastor era un hombre complicado, misterioso, y aunque él parecía ser sincero con ella, ambos sabían que su relación estaba lejos de ser pura.

Aun así, la ilusión de felicidad era algo que los dos decidieron saborear mientras durara, ignorando el remolino de problemas que acechaban bajo la superficie.

Una tarde, en el parque donde solían encontrarse, Alastor tomó la mano de _____ y, con su típica sonrisa enigmática, la miró fijamente.

"Sabes que no somos como las demás parejas, ¿verdad?"

Dijo él, con esa voz seductora que siempre lograba hacerla dudar de todo menos de su atracción hacia él.

_____ sonrió, pero no respondió de inmediato.

Sabía que él tenía razón.

Estaban construyendo algo frágil, algo que podría desmoronarse en cualquier momento.

Sin embargo, el dolor que había sufrido con Charles la había endurecido, y ahora, con Alastor, prefería dejarse llevar por el momento.

"No tenemos que ser como los demás, Alastor. Lo que importa es lo que sentimos aquí y ahora"

Contestó ella finalmente, llevando la mano de él hacia su corazón.

Sus palabras estaban cargadas de verdad y de autoengaño al mismo tiempo.

El peso del pasado, el fantasma de Charles, y la incertidumbre del futuro amenazaban con aplastarlos, pero en ese instante, decidieron ignorar el horizonte oscuro.

A medida que sus encuentros se volvieron más constantes, también lo hicieron las preguntas sin respuestas.

_____ notaba los silencios de Alastor cuando ella mencionaba a Charles o el matrimonio que aún no estaba disuelto, y Alastor empezaba a percibir que, a pesar de la conexión entre ellos, algo en _____ aún luchaba por liberarse de su antigua vida.

El beso robado bajo la lluvia hacía unas semanas había sido el detonante de una relación que ahora se deslizaba peligrosamente entre la pasión y la culpa.

Alastor no mencionaba lo que sabía de Charles, y _____, por su parte, comenzaba a sentir que las dudas se acumulaban, pero intentaba callarlas.

Sin embargo, ambos sabían que los problemas que habían estado evitando pronto comenzarían a salir a la luz.

Los secretos de Alastor, la realidad del matrimonio no anulado, y los sentimientos que ninguno de los dos se atrevía a desentrañar del todo.