El olor de los cipreses flotaba en el aire mientras el vapor blanco se elevaba hasta el techo.
- Oooh... ¿Esto es... baño?-
- Sí, lo es. Se siente bien en la bañera.-
Haruhime le sonrió a Wiene quien estaba completamente desnuda mientras sostenía una delgada toalla sobre sus voluptuosos pechos con una mano.
Después de una acalorada deliberación todas habían acordado darse un baño.
Un baño tipo balneario estaba situado en el primer piso de la mansión. Las mujeres de la Familia Hestia dejaron su ropa en el vestuario y dejaron que el vapor caliente inundara su saludable y vibrante piel.- Ha pasado mucho tiempo desde que todas tomamos un baño juntas. Aunque se siente solitario sin las chicas-
Mikoto comento casualmente, la piel que cubría sus brazos y piernas era lo suficientemente suave como para poner celosas a las mujeres.
Su mirada se llenó de anhelo al pensar en las tres hermanas. Bañarse juntas se había convertido en una actividad común por lo que lo extrañaba.
- Es cierto sin ellas la familia Hestia no está completa pero no hay nada que podamos hacer. -
Hestia respondió, con su pecho bien formado balanceándose mientras hablaba.
Tanto la chica como la Diosa dejaron caer su largo y negro cabello con dichosa anticipación.
Las tablas de ciprés crujían bajo sus pies descalzos mientras las mujeres caminaban dentro del baño.
Este baño del Lejano Oriente había sido instalado a petición de Mikoto. El lujoso diseño y el espacioso interior impresionaron hasta a Haruhime, quien provenía de una familia noble y había pasado años con la Familia Ishtar.
La bañera era lo suficientemente grande para acomodar fácilmente a 10 personas a la vez. Con el vapor alzándose constantemente de su superficie suavemente ondulante, no había nada más atractivo para la vista.
Una corriente constante de agua caliente fluia de la boquilla en la esquina trasera, resonando suavemente en el baño.
El suelo de madera y el techo enmarcaban la vista del paisaje nocturno de Orario más allá de la ventana.
Si no fuera por el ruido constante desde fuera, el ambiente sería perfecto.
Wiene miraba atentamente su propio reflejo bailando en la superficie del agua caliente.
- ¿Wiene-sama? Vamos a lavarnos antes de entrar en el baño. -
Haruhime, quien siempre se comportaba con pureza y gracia mientras estaba siendo entrenada como una prostituta, saco agua de la bañera con un cubo antes de verterla sobre sí misma y guió a Wiene lejos de la bañera poco profunda.
Hestia y Mikoto siguieron su ejemplo y comenzaron a lavar sus cuerpos.- Bell no está con nosotras. ¿Por qué?- pregunto de forma inocente la chica.
- ¡¿Bell-sama...?!- Haruhime dejo que su mente divagara. Se imagino a si misma y a Blake en el mismo baño.
De inmediato su rostro se enrojeció.
- El es un chico. Los chicos y las chicas tienen sus diferencias, Wiene-kun. Eso también se aplica para monstruos y Dioses. -
Wiene había mirado alrededor de la habitación como si faltara algo y Hestia le dio una explicación mientras se lavaba los brazos.
La chica Vouivre había invitado al chico a unirse a ellas hasta el punto de molestar.