Capítulo 7.

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El resto del día pareció arrastrarse más lento que una babosa. Decidí que durante el período libre que tenía al final del día, después de Cuidado de Criaturas Mágicas, montaría mi escoba.

Después de Cuidado de Criaturas Mágicas marché al Bosque Prohibido y me despedí de Honey y Sophia, diciéndoles que las vería más tarde. Me detuve de repente, regresé a la sala común de Slytherin e irrumpí en mi dormitorio. Me cambie rápidamente mi largo y poco práctico uniforme escolar, en un jersey verde, leggins negros y botas de cuero marrón de Quidditch que me llegaban hasta la rodilla. Me puse una bufanda y un abrigo grueso también, ya que podría hacer frío alrededor de 100 pies por encima del suelo, y metí mi varita en mi bota.

Estuve lista en un tiempo récord de aproximadamente dos minutos, lentamente levanté mi mano y no pude evitar sonreír ante mi escoba. No era sólo un objeto inanimado para mí; era seguridad. Cuando estaba en mi escoba, nada podía tocarme. Dando vueltas y giros, era valiente y sin defectos. Si mi vuelo fuese calificado, siempre conseguiría un 10.

La escoba se meneó ligeramente, como si se estuviera despertando de un largo sueño en un abrir y cerrar de ojos. Las escobas que utilizaban para enseñarles a volar a los de primer año son nada en comparación con la belleza de mi escoba; una Nimbus 2001. La mejor de todas las escobas, a excepción de una Saeta de Fuego por supuesto. En mi mano, se sentía fuerte y poderosa, nada podía tocarnos cuando estábamos juntas. Podía ser sólo un objeto, pero juro que pude sentir su alegría al haberse reunido con su dueña, una vez más.

No dispuesta a perder más tiempo, agarré mis cómodos guantes de cuero los guardé en el bolsillo de la chaqueta, a continuación, atraje mi escoba protectoramente cerca de mí, salí del dormitorio, pasé por el corredor y salí por la parte principal de la sala común.

Sólo obtenías períodos libres al llegar a cuarto año, por lo general uno cada dos días. Pero como Prefecta, tenía un período libre todos los días con el fin de "Cuidar de los primer año" y "Ser buenos modelos a seguir" Generalmente, yo los usaba para su propósito apropiado, estudiar para mis TIMOS y charlar con los de primer año, preguntando si tenían alguna duda y generalmente tratando de ser una buena persona. Pero después del estrés de la lección de Umbridge y dramatismo de Draco, necesitaba un descanso.

Prácticamente galopé por las escaleras fuera de la sala común y abandoné las mazmorras sin que nadie preguntara a dónde iba. La mayoría de los estudiantes todavía estaban en clases, sólo quinto año tenía su período libre ahora.

Subí la cremallera de mi abrigo al tiempo que los corredores llegaban a su fin y salí al patio de la Torre del Reloj. Unos pocos estudiantes estaban alrededor charlando, la tarde de septiembre era fría pero soleada. No subí a mi escoba, sin embargo, esperaría a estar lo suficientemente lejos de los demás estudiantes.

Al llegar al puente cubierto, alguien caminó frente a mí. Estaba a punto de sacar mi varita cuando me di cuenta de que sólo era Harry. Un Harry muy nervioso, quién tenía sus manos detrás de su espalda y una sonrisa incómoda en sus labios.

-Oh, hola Harry - Le sonreí, él pareció relajarse un poco.

-Li, quería disculparme por lo de antes - Se quedó mirando fijamente a sus pies - No quise molestarte, supongo que debí haber sido más respetuoso en lo que dije - Él me miró a los ojos, tímidamente a la espera de mi reacción. Negué con la cabeza y coloqué una mano en su brazo.

-No, no te disculpes. Estabas defendiéndote a ti y a Cedric - Miré a mi alrededor, asegurándome de que no hubiera nadie más presente, y baje mi tono - Umbridge está tan loca como Fudge, pero tengo miedo de que esté aquí por mucho tiempo. Deberías tener más cuidado Harry, ella es una opresora con mucho poder, y esa es una terrible combinación.

Juliet | Draco MalfoyDonde viven las historias. Descúbrelo ahora