ARREPENTIMIENTO II-B

CAPÍTULO 16

Lo que para Sasuke había sido un año amable y fructífero, para Hinata no lo fue. Cuando Sasuke había estado en la aldea ya existía cierto tema del cual no le contó, en primera para no preocuparlo y en segunda porque cualquier solución dada por Sasuke no sería adecuada. Por eso en cuando se fue se dirigió a la torre hokague.

— ¿Estás segura?

— Sí, lo mencionó en mi cumpleaños.

— ¿Porqué no me lo dijiste entonces? — Kakashi no concebía como era que Hinata había guardado en secreto ese asunto. No por el hecho de que él tuviera que saber, si no porque eso afectaba a Sasuke.

— Aún no sabía cómo le estaba yendo a Sasuke y solo faltaban algunos meses para que regresara. Aparte de que aún no lo conozco muy bien y no se cómo va a reaccionar si se entera.

Kakashi escuchó con atención, era la primera vez que hablaba con Hinata acerca de esa relación — Hinata, sabes que no tienes que casarte si no quieres.

— Sí quiero — la respuesta fue inmediata, sin duda alguna.

— Pero y Naruto.

Hinata sonrió, burlona, no por su maestro, por ella misma — ¿le dijo algo Naruto? — el silencio fue respuesta suficiente — No se si Naruto se hubiese interesado en mí, a lo mejor sí, pero estoy segura que jamás me hubiese hecho sentir tan amada como lo hace Sasuke y solo por una vez quiero pensar más en mis sentimientos. Sasuke me hace sentir completa, seguramente no soy lo que él necesita, pero si es lo que yo necesito para sentirme feliz y aún cuando yo no sea suficiente en este momento voy a hacer todo lo posible para corresponder, porque lo amo.

Kakashi no hizo comentario al respecto, Sasuke , Hinata, Naruto y Sakura formaban un cuadrado amoroso demasiado complejo.

Días atrás Sakura había llegado llorando a buscar consuelo con su maestro "Sasuke me rechazó, nadie lo va a amar como yo, Kakashi-sensei por favor hablé con él, hagale ver que nadie puede ser mejor para él que yo" entre sus palabras los hipidos no faltaron, ella estaba completamente rota y él no pudo decir mucho para hacerla sentir mejor. Tampoco podía decir mucho para negar sus palabras, era cierto, nadie amaría a Sasuke como lo hacía ella, el problema recaía en que así no funcionan los sentimientos, y no está bien amar a otra persona más de lo que te amas a ti mismo y Sakura rozaba lo insano. Muy similar al viejo amor que sentía Hinata por Naruto, y aún así lo de esos dos fue más como un amor ideal, mientras que los sentimientos de Sakura se podían considerar enfermos, ella ponía en riesgo su propia vida y orgullo, y a su paso arriesgaba a los demás. El amor por Sasuke era tanto que se volvía egoísta y manipuladora, eso no podía ser normal. Entendió que le quedaban poco más de dos años para que su alumna superará ese enfermizo enamoramiento de lo contrario el día en que Sasuke y Hinata se hiciera público lo que tenían la pobre chica podría perder su estabilidad emocional aún más.

— Muy bien, pensaré en algo.

No fue difícil, entre los proyectos había una nueva escuela en Suna. Por falta de personal se mandarían ninjas de la hoja para que capacitarán a los nuevos maestros. Hinata ya estaba siendo considerada para suplir a la maestra actual de nivel escolar en Konoha, a quien originalmente enviarían a Suna, por lo tanto no sería difícil enviarla en su lugar y quedaba perfecto. Era una misión larga de tiempo indefinido, por lo tanto ella podía estar segura hasta que fuera necesario.

El siguiente mes Hinata se la vivió en la academia aprendiendo todo lo necesario para su misión, ella contaba con los conocimientos necesarios para ser maestra, pero no para enseñar a otros maestros, y después de eso partió a Suna junto a un grupo de quince ninjas.

Un día después de que Hinata abandonará la aldea, Hiashi fue a hablar muy claramente con el Hokague, en primera; no le parecía absolutamente nada que mandarán a su hija a una misión por tiempo "indeterminado". Su hija no era una don nadie para irse a una misión así, para eso estaban los indeseables sin familia, esos a quienes nadie esperaban. En segunda; porque su hija ya necesitaba contraer matrimonio, pronto Hanabi estaría lista para ser considerada como lider, y Hinata no podía seguir dentro del clan para entonces. Hiashi tenía que salvar a su hija del sello a como diera lugar.

Kakashi escucho calladamente todo lo que Hiashi dijo, tuvo que soportar como siempre él ser rebajado, insultado y reprendido con educación. Hiashi nunca utilizaba insultos directos, de hecho ni siquiera lo intentaba, pero cuando hablaba ese aire de superioridad era filoso. Cualquiera que hubiese hablado con un Hiashi molesto conocía el sentimiento de sentirse inferior. Y está vez fue Kakashi quien tuvo que soportarlo.