CAPITULO 23

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Unos días después Hiashi la llamó para saber su respuesta. No había cambiado, ella no estaba hecha para liderar de la manera en que su clan lo necesita de manera inmediata, no tenía la sangre guerrera para luchar por los cambios, pero podría criar hijos más seguros, menos tímidos, un poco más como Sasuke, serían niños más perseverantes y fuertes, guerreros.

— Entonces vas a dejar que Hanabi tome tu lugar

— Solo como líder

Su padre asintió apoyando y conforme a su decisión — ¿Tienes a alguien? Sabes que no puedes esperar que nuestra familia se mezcle con cualquiera.

— Ha pensado en alguien, padre

En el rostro de Hiashi se plasmó la amargura, la tristeza — quería que te casarás con Neji, quería darle a sus hijos lo que el no pudo tener

Hinata habría estado de acuerdo con eso, pero Neji ya no estaba, y no lo volvería a estar

— Y no hay alguien lo suficientemente bueno para entregar tu manos, pero hice una lista de los menos peores

— Padre — Hinata quiso consolar a su padre

— Ya, ya, como sea. Tomate tu tiempo, elige bien, piensa en la familia, pero sobre todo piensa en tu felicidad

— Padre..

— Ya se que nunca fui el padre paciente, y amoroso que necesitaste y realmente me arrepiento, pero no puedo cambiarlo, creí que era lo mejor para el clan, creí que tal vez podrías crear un caparazón en tu corazón para protegerte a ti misma, para poder ser líder y tener el respeto de mi padre, pero agradezco que no haya sido así, agradezco que mi pequeña Hinata aún siga siendo dulce y amable, suave. A quien elijas lo voy a aceptar, pero me harías muy feliz si escoges a alguno de esta lista. El consejo ya los ha aceptado — guardó silencio por un momento como queriendo y no decir lo siguiente — se que estarás feliz de ver que Naruto está en la lista — no le desagradaba el muchacho, pero no era la gran cosa como para haber ignorado a su hija. Hinata siempre sería mejor que él aún cuando salvará mil veces la aldea, y era mejor que esa don nadie de los Haruno. Así que no entendía porque ese mequetrefe se atrevía a ignorarla. Pero si su hija lo quería, lo tendría.

Una vez en su cuarto Hinata abrió el pergamino con la lista de los candidatos. Sasuke se había equivocado, era Shikamaru quien encabezaba. De hecho Naruto estaba por debajo de Shino, y gara, y algunos nobles extranjeros, hasta Kakashi estaban antes.

Un pequeño grito salió de sus labios, Sasuke estaba en la lista. Era la primera vez que se era tan feliz que su recamara se sintió pequeña, un energía la hizo saltar y hasta bailar, nunca antes se sintió de esa manera. Y se preguntó si Sasuke se sentía igual cuando le diera la feliz noticia.

En los siguientes días sus misiones se redujeron a ayudar en la academia, durante su estancia en Suna obtuvo el certificado de maestro, aún así solo estaba como apoyo, reemplazando a los maestros que se tuvieran que ausentar y realizando el papeleo necesario.

Solo pudo ver a Sasuke de lejos, lo que no evito que pudieran expresar lo que sentían con la mirada. Durante largos tres días y durante la tarde, había tenido reuniones en el clan para tratar los asuntos de su dimisión como líder, del futuro del clan con Hanabi como cabeza y su entrenamiento. A diferencia de su padre que quería que ella fuera feliz en su matrimonio, los ancianos expresaban su necesidad de controlar su futuro, pero al mismo tiempo dejaban en claro que no la veían capaz de ser líder. Estaban preocupados de como la sellarían si decidía casarse con algún terrateniente fuera de la aldea. Estaba acostumbrada, pero no evito que en su estómago se plantara una sensación de enojo casi incontrolable. Ellos hablaban de ella como si no estuviera ahí, como si no entendiera y solo fuera una cosa a la cual no sabían si tirar, regalar o destruir. Durante esos momentos su padre la regresaba a ver cómo diciendo "todo va a estar bien, no les hagas caso"

ARREPENTIMIENTO II-BDonde viven las historias. Descúbrelo ahora