Tratado Nupcial (Hiccup y Tú)

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____ Lodbrok

Desperté en una tienda de campaña. ¿Qué hago en una tienda de campaña? 

Confundida salí de la tienda, tengo mucha hambre, suspiré y toque mi vientre recibiendo una patada como respuesta. 

 —tu también tienes hambre ¿he? —reí y me detuve luego de caminar un rato. 

No sé donde estoy, hay muchas tiendas, pero también hay gente que ha comenzado a construir...¿casas?

 —La jefa ha vuelto! 

¿Cómo? ¿Cuándo me fui? 

Sentí a alguien abrazarme por la cintura, me voltee y estaba Hiccup, ojeroso, había comenzado a dejar crecer su barba. 

 —¿Cielo? —acaricie su mejilla— ¿Ahora quieres barba? —reí, mi esposo comenzó a llorar y abrazarme más fuerte, confundida por ello, solo me dediqué a abrazandolo y acariciar su espalda. 

 —Mi corazón —susurró mi esposo y me dio un corto beso en los labios. 

 —Tu corazón tiene hambre —le sonreí— y nuestro pequeño también, me pateo hace poco —reí—debiste haber estado. 

 —lo que la jefa quiera —Hiccup me sostuvo la mano y comenzamos a caminar. 

 —Hiccup....la verdad tengo miedo —mi esposo se detuvo enseguida y me miró con preocupación—....¿Donde estamos? 

 —Ah...eso, si, te lo contaré cuando comamos —me guió a un sector en donde habían varias mesas al aire libre, Astrid y Eret servían comida, se veían felices.
Nos acercamos con mi esposo para recibir un plato. 

 En cuanto Astrid dejó el plato sobre mis manos, me miró sorprendida al igual que Eret. 

 —Todos me miran así... —hice una mueca. 

 —Despertaste —comenzó a llorar, mi amiga, rodeo la mesa para abrazarme con fuerza. 

 —¿Si? —respondí confundida— siento que dormi un siglo. 

 Hiccup aparto a Astrid con cuidado y le susurró algo que no fui capaz de oir, ella asintió y me sonrio. Mi esposo me guió hasta una mesa y se sento a mi lado, comenzamos a comer en silencio.

 —Corazón...¿que es lo ultimo que recuerdas? —me preguntó curioso. 

 —Que fui a comprar cosas para hacer la cena...¿tengo lagunas mentales cierto? —me preocupé por no recordar nada desde aquella vez— ¿Cuando iremos a casa? 

—Corazón... —suspiro Hiccup— llevas 3 meses dormida... —me sorprendí ante aquello, mi esposo tenía lágrimas en sus ojos— Grimmel te...te secuestro para que yo entregara a Chimuelo a cambio de tu vida...—tomé su mano y limpie su mejilla— Pero ya no hay de que preocuparse, Grimmel esta muerto solo que...debimos huir de Berk, estaba destruído y temía que mas cazadores llegaran y pusieran nuestras vidas en riesgo —besó mi mejilla— estaba asustado _____, le rezaba a los Dioses todos los días esperando que despertaras, Grimmel te había estado envenenando, Ghoti hizo lo posible en sacar todo el veneno de tu organismo y mantenerte con vida...también temía por la salud de nuestro bebé..... —comenzó a llorar. 

Abracé a mi esposo y también comencé a llorar, debió ser duro para él

 —Mi amor, ahora estoy aquí y no me iré...nuestro bebé también esta bien —le sonreí— no temas más por nosotros 

 .

.

.

[...]

En la tarde, estaba en cama en mi tienda de campaña con Hiccup, nuestros amigos habían ido a verme y a contarme sucesos que habían ocurrido mientras yo dormía. 

 —he estado haciendo ropa para mi futuro sobrino mientras dormías —comentaba Astrid emocionada. 

 —Aún así nosotros seremos los tíos favoritos —dijeron los gemelos al unisolo provocando que riera. 

 —Su abuela le ha estado haciendo juguetes —comentó Hiccup mirando a sus amigos. 

 —Es bueno verte sonreír —comentó Astrid, luego me miró— Hiccup te ama demasiado, hubieras visto como estaba sin tí, de verdad parecía un nombre sin corazón. 

 —Pero si ___ es su corazón, los he escuchado empalagosos y es demasiado cariño —rió Brutacio

 —Dejalos, es porque a ti nadie te quiere —Brutilda le pego un golpe en la cabeza. 

 —a ti tampoco, por fea —respondió su gemelo. 

—Basta, nada de violencia frente al bebé —acaricie mi vientre. 

 —Bien, les pido amablemente que se retiren porque quiero estar a sola con mi esposa esta noche —dijo Hiccup a la vez que hacia movimientos con sus manos para que sus amigos se fueran. 

 —Par de cochinos puercos, no pueden hacer otro bebé si uno ya esta en el horno —dijo Brutacio antes de irse junto a su hermana. 

Los chicos se fueron haciendo bromas de doble sentido, mi esposo se recosto a mi lado y me acomode en su pecho mientras él acariciaba mi cabello. 

 —Me hace tan feliz tenerte a mi lado otra vez —sonrió mi esposo y beso mi frente. 

 —y yo estoy feliz de que ambos estemos bien —sonreí y lo besé.

Sentí la mano de mi esposo en mi mejilla mientras me besaba, su otra mano bajo hasta mi cintura apegando más nuestros cuerpos.

Se posicionó arriba de mi sin dejar de besarme, agitada rompí el beso y lo miré. 

 —Quiero hacerlo 

 —¿Estás segura? —susurro Hiccup acariciando mi mejilla—

 —Muy segura —le sonreí a la vez que acariciaba su abdomen y bajaba más mis manos. 

 —Esta bien, mi corazón —sonriendome volvió a besarme.