Una mañana, estaba sola en casa (como siempre) me levanté, me duche y me puse un shorts y una blusa de tirantes, la verdad planeaba tirarme al sofá todo el día, pero entonces un repartidor comenzó a tocar todos los timbres del edificio, y luego la puerta, era muy molesto y decidí salir a decirle, claro que inmediatamente dejo de comportarse como loco, pero solo para verme morbosamente, al final el paquete era de un vecino, se lo recibí y me dijo que pasaría por el.
La mirada del repartidor me había dejado algo cachonda, la verdad, vamos que estaba enojada pero también me calentó.
Cómo estaba sola aproveche para tocarme, lo hice lento, acariciándome los senos, empecé a sentir como me humedecía y no pude evitar tocar mi clítoris, pero entonces tocaron la puerta y tuve que ir a ver, estaba tan poco acostumbrada a recibir a alguien que me olvide completamente de cubrirme y el vecino pudo ver por completo mis pesones erectos, la verdad es que me miró de arriba a bajo y eso me éxito mucho así que le dije
-hola, vienes por tus cosas, pasa? (Yo fingiendo que nada más pasaba)
-Si, gracias (casi se mete corriendo)
-...bueno, ahora no recuerdo donde deje tu sobre- entonces me agache bajo el sofá fingiendo buscar, deje mi culo bien parado para que pudiera ver bajo mi short- será que lo lleve a mi habitación...?
-A mi también se me olvida todo, no te preocupes, te perdono.
-Enserio que torpe y yo aquí haciéndote perder el tiempo (dije con fingida preocupación)
La verdad es que el paquete estaba justo en la entrada y ambos lo sabiamos
-Para nada vecina, si al menos tengo una hermosa vista- me dijo en tono más sugerente.
-Te lo parece? -le dije coquetamente y comencé a tirar del tirante de mi blusa hacia abajo.
-Claro, además hace rato que quería conocerla, pero siempre parece tan distante.
- reí tontamente y le dije- para nada, es solo que siempre estoy distraída, también me alegra conocerlo. Siéntese le traigo un vaso de agua.
-pero no me hable de usted, que tampoco soy su abuelo.
-pues no, pero calculo que por la edad podría ser mi padre.
-Eso es cierto, pero lo cierto es que tampoco parece una chiquilla
-¿Eso cree? la mayoría no para de decirme lo joven que aún me veo- fingi estar apenada.
-Buenoe eso es cierto, pero si me lo permite, como una joven deliciosa. -Esto me lo dijo mientras dejaba el vaso de agua frente a el.
La verdad ya estaba súper caliente y no me importo nada, me senté a horcajadas en el.
-Seguro..., que tan deliciosa? - dije mientras mordía mi labio inferior.
-Lo suficiente para romperte el culo si me provocas chiquilla. Así que, a menos que te bajes ahora, te voy a coger duro.
Lo dicho, estaba cachonda y sus palabras solo me exitaron más. Entonces me restregue contra su verga que ya se sentía super dura.
-Y que tan duro?- dije casi jadeando.
-Ya veras perra. -me preciono hacia el suelo y se sacó el pene, dios se veía tan rico, tal ves no muy grande, unos 18 CM, pero de grosor y sus venas, en cuanto vi la gota de pre semen en la punta saque la lengua para probar.
-Mmm....pero si estabas anciosa de verga princesa.
-Si, sabe muy rica y aún no desayuno-dije con fingida inocencia.
