Pokémon: El legado del eclipse

Capítulo 14: La Invitación del Gobierno

El sol brillaba con intensidad aquella mañana mientras Archyx se dirigía nuevamente al gimnasio de la Arena de Desafíos Carmesí. A pesar de haber ganado una cantidad considerable de dinero, el deseo de seguir mejorando junto a su Frogadier y de enfrentar nuevos retos lo mantenía motivado. Cada batalla era una oportunidad para perfeccionar su estrategia, pulir los movimientos de su Pokémon, y prepararse para cualquier desafío que se avecinara.

Anna, por su parte, se había quedado en el departamento cuidando de Latios, quien ya mostraba grandes mejoras en su estado. Cada día, el Pokémon legendario recuperaba más fuerza, aunque aún no estaba listo para las batallas que seguramente enfrentarían en el futuro. Mientras tanto, Bulbasaur y Anna se habían vuelto inseparables, entrenando juntos en los parques cercanos para mantenerse en forma.

Al llegar al gimnasio, Archyx se inscribió en otra serie de desafíos. Las batallas fueron intensas, pero Frogadier demostró su agilidad y precisión en cada combate, derrotando a sus oponentes uno tras otro. Archyx sentía que tanto él como su Pokémon estaban alcanzando un nuevo nivel de sincronía.

Sin embargo, mientras esperaba a que se anunciara su próxima batalla, algo inesperado ocurrió. Un hombre uniformado, que claramente no pertenecía al gimnasio, se acercó a Archyx. Llevaba una carpeta en la mano, y su expresión era seria pero profesional.

“¿Archyx?” preguntó el hombre.

Archyx levantó la vista, sorprendido. “Sí, soy yo. ¿Puedo ayudarte en algo?”

El hombre asintió y le entregó un sobre sellado con un emblema dorado que Archyx no reconoció de inmediato. “Esto es para ti, de parte del gobierno de esta región. Has sido invitado a un evento especial en esta ciudad. Solo los entrenadores más destacados reciben esta invitación. Te sugiero que lo abras de inmediato.”

Intrigado, Archyx rompió el sello del sobre y sacó la carta en su interior. Las primeras líneas captaron su atención al instante:

“Estimado Archyx,
Debido a tu desempeño sobresaliente en las batallas de la Arena de Desafíos Carmesí, y tras una rigurosa selección de los mejores entrenadores de la región, te extendemos una invitación exclusiva para participar en el Torneo de la Gloria Carmesí. Este torneo reúne a los entrenadores más fuertes y habilidosos de la región, y solo un selecto grupo de competidores ha sido elegido.**

Los premios incluyen una casa en el corazón de Ciudad Carmesí, tres millones de Pokédolares y un reconocimiento oficial como el mejor entrenador de la región.
Te esperamos este fin de semana en el Coliseo Principal de la ciudad para comenzar con las eliminatorias.**
Atentamente,
El Gobierno de la Región**.”

Archyx se quedó en silencio por un momento, asimilando la magnitud de la noticia. Una competencia de élite, un premio inmenso y la posibilidad de ser reconocido como el mejor entrenador de la región. Era una oportunidad que no se presentaba todos los días.

“¿Es esto en serio?” murmuró Archyx, mirando la carta nuevamente para asegurarse de que no estaba soñando.

El hombre uniformado asintió. “Es completamente serio. Solo unos cuantos entrenadores han sido seleccionados para competir, y tú eres uno de ellos. Este torneo es legendario en esta región, y los premios no solo son valiosos, sino que el reconocimiento que recibirás podría abrirte muchas puertas en el futuro.”

Archyx no podía contener la emoción que empezaba a crecer dentro de él. Sabía que enfrentarse a los mejores entrenadores de la región sería un desafío monumental, pero era justo el tipo de reto que él y Frogadier habían estado esperando. Y, además, con un premio como ese, podrían asegurarse de tener un hogar estable y la seguridad financiera que tanto necesitaban para continuar con sus aventuras.

“Gracias por entregarme esto,” dijo Archyx al hombre, guardando la carta en su bolsillo. “Definitivamente participaré.”

El hombre asintió nuevamente y se retiró sin decir más, dejando a Archyx solo con sus pensamientos. Ahora tenía mucho que procesar. Sabía que esta era una oportunidad única, pero también sabía que necesitaría prepararse a fondo si quería tener alguna posibilidad de ganar.

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De regreso en el departamento, Archyx entró apresuradamente, buscando a Anna. La encontró sentada en el sofá, con Latios flotando serenamente a su lado y Bulbasaur descansando en su regazo. Cuando lo vio entrar con una expresión tan emocionada, supo que algo grande había ocurrido.

“¿Qué pasó?” preguntó Anna, poniéndose de pie. “Pareces agitado.”

“¡No vas a creer esto!” exclamó Archyx, sacando la carta de su bolsillo y entregándosela a Anna. “He sido invitado a un torneo especial en esta ciudad. Es un evento organizado por el gobierno, y solo los mejores entrenadores han sido seleccionados. El premio… Anna, ¡el premio es una casa en Ciudad Carmesí y tres millones de Pokédolares!”

Anna abrió los ojos con sorpresa mientras leía la carta. “¿En serio? ¡Eso es increíble, Archyx! Este es el tipo de oportunidad que no se presenta todos los días.”

“Lo sé,” respondió Archyx, aún emocionado. “Y si ganamos, podríamos asegurarnos un hogar estable para nosotros y nuestros Pokémon. Además, el reconocimiento nos abriría puertas en toda la región. Pero será un torneo difícil. Solo los mejores han sido invitados.”

Anna sonrió, confiada en las habilidades de su pareja. “Has estado entrenando duro, y Frogadier es más fuerte que nunca. Estoy segura de que puedes hacerlo. Pero tendremos que prepararnos bien.”

“Eso es lo que pensaba,” dijo Archyx, sentándose junto a ella. “Vamos a necesitar entrenar intensamente estos días. Frogadier tiene que estar en su mejor forma, y quizá Latios pueda unirse al equipo si se recupera a tiempo.”

Anna miró a Latios, quien flotaba tranquilamente, con su aura legendaria brillando levemente. “Sí, Latios está mejorando rápido. Si puede unirse al equipo, será una gran ventaja. Y yo estaré aquí para apoyarte en todo lo que necesites.”

Con esa motivación renovada, Archyx se preparó mentalmente para los días de entrenamiento que seguirían. Sabía que el camino hacia el torneo no sería fácil, pero también sabía que, con Anna a su lado y sus Pokémon listos para luchar, tenía todo lo que necesitaba para enfrentarse a los mejores entrenadores de la región.

El Torneo de la Gloria Carmesí estaba a la vuelta de la esquina, y Archyx estaba listo para demostrar que él y Frogadier merecían ser los mejores.