La escuela secundaria Shimizu estaba a plena marcha con los preparativos para el festival deportivo anual, una tradición esperada por todos los estudiantes. Este año, se trataba de una competencia de clases, con eventos como carreras de relevos, competiciones de tiro con arco y una sección de juegos en equipo que incluía desafíos como el juego de cuerda.
Kyoko no estaba tan emocionada al principio; para ella, estos eventos eran solo otra oportunidad para que todos la miraran como “la nueva chica problemática”. Sin embargo, su opinión cambió rápidamente cuando la profesora de deportes anunció que ella y Ryota serían los líderes de su clase en las actividades del festival.
"Kyoko, sé que eres nueva aquí, pero creo que tienes la energía necesaria para motivar a tu equipo," dijo la profesora, sonriendo.
Kyoko asintió, sorprendida por la oportunidad. Y cuando miró a Ryota, que también había sido elegido, sintió una mezcla de nervios y emoción.
"Eres buena en esto, ¿verdad?" bromeó él, dándole una sonrisa amistosa.
“Eso espero,” respondió Kyoko, tratando de sonar tranquila. “Supongo que veremos de qué estamos hechos, ¿no?”
Los días previos al festival estuvieron llenos de entrenamiento y preparación. Kyoko y Ryota trabajaban juntos para organizar las prácticas de los juegos de equipo, planificar las estrategias y animar a los estudiantes a participar. Ryota se encargaba de los detalles organizativos y Kyoko ponía la energía, asegurándose de que nadie se quedara atrás.
Una tarde, mientras practicaban la carrera de relevos, Ryota notó que Kyoko se esforzaba más que nadie. "Te estás tomando esto en serio, ¿eh?" dijo, ofreciéndole una botella de agua.
Kyoko bebió un sorbo, sonriendo. "Si voy a hacer esto, quiero hacerlo bien. Además, no quiero dejarte en vergüenza como mi compañero," bromeó, dándole un leve empujón en el hombro.
Ryota rió y miró hacia el horizonte, sintiendo que con cada momento junto a ella, algo entre ellos crecía. "Sabes, nunca imaginé que trabajaríamos tan bien juntos," confesó. "Eres mucho más de lo que aparentas, Kyoko."
El día del festival llegó y la emoción llenaba el aire. Kyoko y Ryota lideraron a su equipo en la competencia de relevos. A medida que corrían, Kyoko sintió el viento en su rostro y el sonido de sus compañeros animándola, algo que nunca había experimentado. Su mundo siempre había sido solitario y lleno de desafíos, pero en ese momento, se dio cuenta de que estaba compartiendo una victoria con otros.
Al final de la carrera, mientras jadeaba de cansancio, Ryota corrió hacia ella y le dio una palmada en la espalda. "¡Lo hicimos! ¡Ganamos!" gritó, sonriendo.
Kyoko sonrió, sintiendo una alegría indescriptible. "Gracias, Ryota. Esto fue... increíble."
La tarde continuó con otros juegos y competiciones, y Ryota y Kyoko se encontraban juntos en cada momento. Ya no eran solo compañeros de equipo, sino amigos que habían aprendido a confiar y apoyarse mutuamente. Al final del día, cuando el festival llegó a su fin, ambos se sentaron en el campo, observando las luces del atardecer.
"Gracias por ser un gran líder," dijo Kyoko, mirando a Ryota con sinceridad. "No sé si hubiera disfrutado tanto este evento sin ti."
Ryota se giró hacia ella, con una sonrisa tranquila. "Lo mismo digo. Eres mucho más que la 'nueva chica'. Eres increíble, Kyoko."
En ese momento, Kyoko sintió que algo especial había nacido entre ellos. Lo que había comenzado como una tarea impuesta se había convertido en una experiencia significativa que los acercaba cada vez más. Sabía que su conexión era única y, aunque no sabía hasta dónde los llevaría, estaba emocionada de descubrirlo.
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El sabor del primer amor.
RomanceEn la secundaria Shimizu, Ryota es el estudiante ideal: popular, inteligente y carismático. Su vida da un giro inesperado con la llegada de Kyoko, una nueva alumna transferida de Osaka. Con su cabello rojo y su actitud desafiante, Kyoko es una chica...