Ivana
En Gran Canaria Pedro y yo estábamos luchando por recuperar lo que éramos. Íbamos poco a poco. Venía a verme de vez en cuando y me escribía cada vez que podía. Cada uno hacía sus cosas, nos juntábamos de vez en cuando o cuando nos veíamos con nuestros amigos. Aunque algo de lo que más echaba de menos, era que me hiciera el amor. Esa conexión que teníamos en la cama era increíblemente brutal e intensa. Quería volver a sentirlo. Quería que me hiciera suya otra vez, viajar a otro mundo con él de nuevo. Estaba segura que todo iba a seguir igual cuando decidiéramos dar el paso de volver. Además, él me seguía amando como nadie más, y yo a él. Había seguido con ese sentimiento tan intenso un año entero.
–Me alegro de que estéis mejor –me dice uno de nuestros amigos.
–Y yo, poco a poco.
–Vais a volver, ¿no?
–Eso espero.
–Pues como te vuelva a poner los cuernos... –suelta Liam. A lo que Clara le mete un guantazo en el hombro.
–¡Tito Pedro! –sonríe la nena de Clara. Estaba mayor ya. Con sus casi tres años.
–Sí, el tito, el tito... –Saul rodó los ojos sonriendo.
–Calla –responde Charlie.
–Lo ama. Siempre le compra cosas. Por el interés, te quiero Andrés.
–No, si ya.
–Tu lo amas por otras cosas... –hizo un gesto con su brazo, como si fuera un pene erecto.
–Por dios.
–Y porque el tío se lo curra, todo hay que decirlo –dice Dai.
–Gracias.
–Ya podrías aprender –Clara le da un toque a Saúl, a lo que él saca su cartera y la vuelca. No cae nada más que una pelusa. Todos estallamos en risas.
–Tu pide, que no hay dinero.
–Es más mentiroso... –lo mira Clara.
–¿Qué hago? ¿Me lo saco de la punta del cipote?
–Tienes una tarjeta preciosa que no pienso decir cuánto dinero hay ahí, pero vaya... Que te gastas un pastizal en la niña.
–Se llama cuenta de ahorros. Y bueno, estoy pendiente de la herencia de mis abuelos, porque no se lo querían dar a mi madre por ser alcohólica.
–¿Y qué tienes de herencia?
–... Un chalet con piscina, un rancho para caballos y más de cinco millones de euros. Toma por el culo.
–Hostia puta.
–Tu sabes que nos vamos a casar, ¿verdad? –sonríe Clara.
–¡Ya sabemos a quién ha salido la niña! –ríe Dai.
Todo eran risas con ellos. Era increíble que pasaran los años y no cambiara nada.
–¿Al final que hacéis en las vacaciones que van a venir? –pregunta Saúl.
–Estamos en enero. Deja que entre pascua, por el amor de dios –dice Charlie.
–¿Qué vacaciones? Yo vivo de vacaciones, no trabajo –reí.
–Claro, porque tú novio el ricachón te canta el Quédate y gana tres millones por concierto –habla Charlie.
–¿Eso es envidia lo que huelo? –ríe Daiana.
–¡No es mi novio!
–¡Cómo si lo fuera! ¡Daiana decía lo mismo con él y han acabado prácticamente casados! –añade Saul.
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ᴍíʀᴀᴍᴇ ᴄᴏɴ ᴏᴛʀᴏꜱ ᴏᴊᴏꜱ
FanfictionDos antiguos compañeros que lo único que compartían mutuamente era cariño que se tenían y a Bruno, novio de Ivana, amigo de Pedro. Amigo que no resuelta ser tan bueno, y les traerá problemas a ambos. Cuando, unos años después se reencuentran, porque...