___ Shadow. No ocupes toda la cama____
Después de la charla por el estado del verdoso, La rosada y el azabache entraron en uno de los cuartos para poder descansar tranquilamente. Estaban ambos cansados después de un largo día de caminar y necesitaban reponer fuerzas.
Al entrar en el cuarto, se dieron cuenta de que solo había una cama. Se miraron entre sí, sorprendida y molesto.
El azabache giró los ojos en silencio, soltó la pequeña cuerda que tenía en su mano y entró en el cuarto. Al ver la cama pequeña, no pudo evitar suspirar. Se había olvidado completamente del tamaño del espacio y ahora se sentía incómodo.
Sin embargo, su agotamiento era mayor que su incomodidad. Se dejó caer en la cama, sin preocuparse por el espacio que dejaba para la rosada. Se recostó y cerró los ojos, sintiendo el cansancio que se apoderaba de su cuerpo.
___ Porque soltaste la cuerda ?___ preguntó cerrando la puerta detrás de ella.
Él no respondió, simplemente se quedó allí, respirando profundamente. Su cansancio era tan intenso que no podía preocuparse por nada más.
La rosada suspiró y se sentó en el borde de la cama, intentando no tocarlo. Pero la cama era demasiado pequeña y pronto se encontró rozándolo. Se tensó, sintiendo la proximidad del erizo, pero él no se movió.
___ Esto es ridículo__ murmuró mirando la cama pequeña con frustración ___ Apenas si podremos descansar aquí___ habló, su voz llena de incredulidad ___ Estás seguro que nos dio esta habitación___ preguntó, levantando una ceja.
___ Lo suficiente . Pero descuida.__ pespondió, sin abrir los ojos __ Solo quiero recostarme un momento, antes de que duerma en el duro suelo___ mencionó con algo de molestias con su voz llena de agotamiento.
Se quedó en silencio, pensando en la situación que se encontraba. Movió su rostro en la cama, extrañando la suave comodidad que parecía un lujo en comparación con la dura realidad que habían enfrentado.
Solo faltan algunos caminos más, se dijo a sí mismo, tratando de encontrar consuelo en la proximidad de su destino.
Al fin podrían llegar al pueblo y terminar con ese accidente que había dejado no gratos recuerdos. Recuerdos que debía mantener en secreto, ocultos en lo más profundo de su mente. Cerró los ojos con fuerza, intentando ahuyentar los pensamientos que lo atormentaban, las sensaciones que anunciaba su presencia. Pero no podía evitar sentir la carga del secreto que llevaba consigo.
___ Tú...dormirás en el suelo?___ comentó, sintiéndose algo mal porque no le gustaba la idea de dejarlo dormir en el suelo o en una silla ___ Si quieres puedes dormir al lado mío__ dijo, intentando sonar natural. Aunque esa propuesta no sea tan válida. Desde que empezó el viaje lo hacían a menudo.
___No quiero molestar___
___No será una molestia, es solo que...___ se detuvo pensando, buscando encontrar las palabras correctas __ Me cuidaste mucho y quiero agradecerte cuando lleguemos al pueblo___ mencionó intentando expresar su gratitud.
___ Si quieres hacerlo, házlo con dinero, de otra manera no me sirve tu caridad___
La rosada se sintió dolida por sus palabras, pero intentó entender su punto de vista.
___No tengo mucho dinero___ dijo pensativa___ pero puedo prepararte alguna comida con Crean___
El azabache abrió sus ojos observándola detenimiento después de su comentario, pero no le tomo tanta importancia.
___Como sea.____
Ambos se prepararon para descansar, y mientras lo hacía. El azabache se mantuvo en silencio, viendo como se desprendía del vestido con cuidado, tratando de no mostrar la piel expuesta de su espalda frnte a él, incluso parecía que lo havia con miedo, lo cual le pareció ridículo.
