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ᴍᴀʀᴀᴛᴏɴ 1/5
El ambiente en la fiesta era ruidoso y lleno de luces, pero ___ sentía una inquietud en el pecho. Había visto a Tito desaparecer hace rato sin decir nada y aunque intentó no darle importancia, algo la impulsó a ir a buscarlo.
Caminó por los pasillos oscuros del lugar, apartando a la gente que apenas se daba cuenta de su presencia, hasta que, al fondo, una puerta entreabierta la detuvo en seco. Desde allí podía ver claramente a Roberto, su Roberto, abrazado a otra chica, besándola como si nada más en el mundo importara.
El corazón de ___ se detuvo por un segundo, y en ese instante supo que todo lo que compartieron, todas las promesas y los planes, se estaban desmoronando frente a sus ojos.
Sin pensarlo dos veces, abrió la puerta de golpe, haciendo que ambos voltearan de inmediato. Tito, al ver su expresión, soltó a la chica con una mezcla de sorpresa y miedo en la cara.
—¿¡Qué chingados haces!? —gritó ___, con una furia que apenas podía contener. La otra chica miró la escena incómoda, susurró una excusa rápida y salió apresuradamente de la habitación, dejándolos solos.
Tito abrió la boca, buscando palabras que no lograban salir.
—Linda, yo… Esto no es lo que parece…
—¡¿No es lo que parece?! —___ soltó una risa sarcástica, llena de dolor—. ¿De verdad crees que soy tan estúpida? ¡Te vi, Roberto! ¿Qué más necesito para entender que me traicionaste?
Él dio un paso hacia ella, con las manos alzadas en un intento inútil de calmarla.
—Escúchame, chula por favor, déjame explicarte… Esto fue una estupidez no sé ni cómo pasó.
Ella retrocedió, sintiendo cómo la rabia y la tristeza la desbordaban.
—No quiero escuchar ni una palabra más ¡No quiero verte, no quiero saber nada de ti! —dijo, con la voz quebrada—Me diste a entender que podía confiar en ti, y ahora… resulta que sólo soy una más, ¿verdad?
—No, linda, tú no eres una más —intentó Tito, desesperado— Tú eres la única, te lo juro esto fue un error, un… una tontería que no significa nada no sabes cuánto me arrepiento.
Ella lo miró, con lágrimas en los ojos, sintiendo que cada palabra que él decía le dolía más.
—¿Arrepentido? Si de verdad te importara, ni siquiera lo hubieras hecho ¿Cómo esperas que te crea?
Tito trató de acercarse de nuevo, pero ella se apartó con firmeza.
—Por favor, linda, sólo dame una oportunidad para demostrarte que lo que tenemos vale más que esto. No quiero perderte —su voz temblaba, y aunque intentaba mantener la calma, el pánico de perderla se hacía cada vez más evidente.
___ respiró hondo, intentando recuperar el control.
—¿De verdad crees que puedes decir un par de palabras y arreglar todo? No sé si pueda perdonarte… no sé si quiero hacerlo.
Tito se quedó en silencio, viéndola como si el mundo entero se le estuviera cayendo encima. Sabía que no tenía una excusa que la convenciera, pero aun así tenía que intentarlo.
—Dame tiempo, linda dame una oportunidad, te lo ruego haré lo que sea, sólo para demostrarte que no soy un pendejo… aunque hoy me comporté como uno.
Ella lo miró, con una mezcla de dolor y decepción en sus ojos.
—¿Sabes qué es lo peor, Roberto? Que te amaba y ahora… ya no sé si eso va a ser suficiente para salvar esto.
___ se dio la vuelta y salió del cuarto, dejándolo solo en la oscuridad, con la culpa y el remordimiento clavados en el pecho y el miedo de haber perdido a la única persona que realmente le importaba.
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Este one shot lo subí antes, por que una chica me lo pidió, espero que les guste y sea de su agrado. Los quiero.
