Debilidad Mortal--Kookmin.

+18. Parte 23

Jeongguk había manejado de forma rápida, era tarde y no había mucho tráfico, su mente estaba en blanco y estaba mareado. Aunque Jimin no se quedaba atrás.

— Llegamos, Jimin—Jungkook frunció el ceño y observo a Jimin completamente dormido.

Pero en vez de enojarse o de maldecirlo, no dijo nada, solo lo observo de pies a cabeza y sintió algo extraño, algo que no podía descifrar.

— Se ve jodidamente caliente—Hablo en voz alta, realmente en esos momentos parecía no importarle si Jimin lo escuchase.

Se quitó el cinturón de seguridad para así abrir la otra puerta del coche y sacar a Jimin, no apartó su vista ni un solo Segundo en el rostro de este, pudo notar sus mejillas rojas y un pequeño puchero en sus labios.

— Lindo —Nuevamente hablo en voz alta. La expresión de su rostro era seria, pero su mirada era mucho más cálida.

Al entrar a su departamento, Jeon se dirigió hacia su habitación, ni siquiera pensó en meter a Jimin a la suya, solo pensó en ir a su habitación. Lo acostó con delicadeza en sus sábanas, al terminar de acostarlo, Jimin hablo.

— ¿Así que me veo jodidamente caliente?—soltó una risita burlona, aún manteniendo sus ojos cerrados y con su sonrisa plasmada en su rostro.

Jeon arqueó una ceja, subiendo un poco la comisura de sus labios, solo un poco. Una sonrisa la cual no era tan notoria, pero si lo era más que la vez pasada.

— Sí—Afirmó de forma inmediata—lo estás, lo eres, y te ves.

— Woah, Jeon—Jimin abrió sus ojos con delicadeza, aún acostado pudo visualizar a Jeongguk frente suyo de pie. La luz cálida de la lámpara al lado hizo que cerrara un poco los ojos.

— Pues..—Observó a Jungkook de pies a cabeza—voy a serte sincero, realmente opino que tú también lo estás. Siempre has sido caliente, siendo honesto.

El pelinegro soltó una risa seca, era la primera vez que Jimin lo veía sonreír, y era una sonrisa de un maldito egocéntrico.

— También tienes una sonrisa caliente—Señaló Jimin con uno de sus dedos su sonrisa, mientras que una se dibujaba también en su rostro.

La estabilidad de la voz de Park era de un completo borracho, pero eso ocasionaba que su voz sonara más dulce de lo normal.

Y eso a Jeongguk parecía afectarle, no sabía el porqué Jimin se veía tan irresistible.

— ¿Realmente piensas eso?—acercó sus pasos hacia el castaño acostado, lo suficiente para agacharse un poco y quedar cerca al rostro de Jimin— ¿Umh?

— ¿Crees que miento?

— Mh, tal vez—Sonrió, mostrando sus dientes de conejo nuevamente.

— ¿Qué hago para que me creas?—Preguntó.

— ¿Qué serías capaz de hacer?— Cada vez que Jeon decía algo, acercaba mucho más su rostro hacia el de Jimin.

— Todo.—Afirmó con una sonrisa, pero esta vez fue diferente, Jimin al sonreír intento no cerrar sus ojos para mirar a Jeongguk.

— Demuéstralo.

— ¿Por qué mejor no me demuestras tú lo que dijiste en el auto? Deberías de demostrarme que tan caliente me veo..

Jeongguk podía jurar que su polla iba a explotar, ni siquiera se habían tocado y ya estaba apunto de estallar. No estaba en sus 5 sentidos, pero al no estarlo, eso hacía que dijera lo que pensaba y lo que sentía sin restricciones.