―Buenos días ―dijo Bryce dejando un beso inesperado en mi mejilla.Me sobresalté y lo miré por un segundo, desconcertada.
―Buenas ―respondí con una sonrisa forzada, tratando de disimular mi sorpresa.
―Davi ya se despertó. Le di algo de desayuno ―añadió, como si nada.
Salté de la cama al escucharlo y bajé rápido al comedor. Ahí estaba mi niña, con sus piernitas colgando del asiento, balanceándolas como siempre hacía, pero su expresión estaba apagada, sin el brillo usual en sus ojos.
―Hola, mami ―dijo suavemente, su voz sin la emoción de siempre.
―¡Davi! ―Me acerqué a ella despacio, acariciando sus despeinados rizos mientras intentaba descifrar lo que estaba sintiendo.
―Quiero ir al parque hoy ―murmuró, su tono más insistente esta vez.
―Claro que sí, podemos ir en la tarde. ¿Te parece bien?
―¡Sí! Pero solo tú y yo...
Antes de que pudiera responder, Bryce apareció detrás de mí, interrumpiendo como si no entendiera que la conversación no lo incluía.
―Malia, ¿puedes venir un momento?
Solté un suspiro corto, dándole un beso rápido en la frente a Davi antes de seguir a Bryce.
―Quería preguntarte si podríamos tener una cita hoy ―dijo, bajando la voz, como si fuera un secreto. Su tono inseguro me tomó por sorpresa. ―No tiene que ser algo formal, pero... solo nosotros, ¿como antes?
La vulnerabilidad en su voz me hizo dudar. Bryce nunca había sido de pedir las cosas así. Lo miré un momento, considerando la propuesta.
―Está bien ―respondí, más por compromiso que por ganas, pero no lo dejé entrever.
Cuando regresé al comedor, Davi seguía moviendo sus pies con un ritmo que ahora parecía más desganado que juguetón.
―¿Mami, vamos al parque? ―me preguntó con su vocecita, esperanzada.
Tragué saliva, sintiendo un nudo en la garganta.
―Amor... será otro día, ¿sí? Mamá tiene algo importante que hacer hoy.
Davi me miró con sus grandes ojos oscuros, su decepción era casi palpable.
―Pero... yo quería ir contigo ―susurró, bajando la cabeza.
―Lo sé, princesa, y te prometo que iremos pronto. Pero ahora iremos a casa de la abuela, ¿de acuerdo? Ella también quiere verte.
El silencio de mi hija me dolió más de lo que esperaba, pero intenté no mostrarlo mientras la ayudaba a alistarse.
A penas llegamos a la casa de mamá, supe que ella sabría que me pasaba algo, había notado la tristeza de Davi al instante, pero no hizo ningún comentario al respecto. Sólo me miró con esa expresión severa que siempre llevaba cuando sabía que no estaba haciendo lo correcto.
―¿Qué pasa con la niña? ―preguntó finalmente, rompiendo el incómodo silencio.
―Nada, mamá. Solo está cansada ―respondí rápidamente, evitando su mirada.
―¿Cansada? Malia, no la he visto así antes. ¿Qué está pasando? ―insistió, cruzando los brazos mientras me estudiaba con esos ojos que nunca dejaban pasar nada.
Suspiré, sintiendo el peso de su juicio incluso antes de que empezara.
―No es nada, en serio. Bryce y yo tenemos planes hoy, eso es todo.

ESTÁS LEYENDO
Aeternum - Kylia
FanfictionEl primer amor nunca se olvida. O al menos, eso es lo que dicen. Que es un sentimiento eterno. A mis quince años, creí haber encontrado al amor de mi vida; una morena que hacía latir mi corazón con cada mirada. Pero cuando nuestros secretos fueron r...