Maestro Sensual {Sasusaku}

Intercambio de novio

Hoy era la dichosa cena que provoco que Shisui hablara demás frente a Ino. Había estado cocinando todo la tarde que tuve libre junto a Sasori y Gaara (bueno él último solo entrega pedidos), hicimos muchas entrega de pizzas y nos habíamos puesto de forma posesionaría afuera del metro durante una hora, a ofrecer nuestros postres, estábamos emocionados en exceso porqué vendimos todo y nos hicieron un pedido para una pequeña fiesta el siguiente sábado. Había quedado con Sasori en que mañana me dedicaría a checar números para visualizar de forma correcta los resultados. Me iba a ir a vivir con ellos en Marzo que cumpliera los 18 años y tendríamos que dividir todos los gastos en 3. Pero ahora no era momento de pensar en el tema, tenía que bañarme, peinarme y arreglarme de forma decente para ir a cenar con los Uchiha y con quien sabe que estirados.

Shisui iba a poner la casa Uchiha patas arriba con lo que iba a hacer, pero ya se lo había propuesto a Kim y ella había aceptado. Yo como su cuñada favorita (así me él muy manipulador) tenia que estar ahí para ayudarle a calmar las cosas y hacer presencia como parte de la familia (Shisui no dejaba de repetirme que tenia que acostumbrarme a lo bueno y lo malo). No podía estar más nerviosa, pero esto tenía que salir bien. Gaara me dejaría en la casa de los Uchiha en menos de 1 hora y tenía que apurarme de verdad o iba a llegar tarde. Los nervios estaban fuera de lugar.

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Shisui

Llegó el día, no podía hacerme para atrás, estaba nervioso, pero decidido a hacer esto. Iba a cambiarme de una vez por todas, o iba a terminar por salir de nuevo a correr y eso podía retrasarme en mis planes. Alguien abrió la puerta de mi cuarto y pensé que sería alguno de mis hermanos, pero esperaba, rogaba porqué no fuera Itachi, lo menos que necesitaba era verlo antes de la propuesta oficial. Ya me podría moler a golpes después de la cena.

-Wow pero que espalda- dijo una voz femenina, demasiado conocida para mi en la última semana.

-¿Que haces aquí Kim?- pregunte colocándome los bóxer en su lugar, por debajo de la toalla.

-Vine a ver si podía probar la mercancía- dijo sonando inocente adrede.

-A que te refieres...- ni siquiera formule la pregunta de forma correcta... o completa.

Se subió a mi escritorio bajándose los tirantes del vestido en el proceso y dejándome ver unos pechos, grandes, respingones y perfectos. La semana anterior le habría gritado y echado de mi habitación, pero hoy eso ya no era necesario, podía disfrutar de verla desnuda o semidesnuda. Porqué ya no era más la novia de mi hermano mayor, ahora era mi futura esposa...

-¿Crees poder darme un adelanto de mi luna de miel?- dijo bajando del escritorio ahora que tenía mi completa atención - No quiero decirle si al matrimonio, si no sé que tipo de amante eres, si vas a ser aburrido mejor cancelar-.sonrió de forma picara.

Tenía una sonrisa bonita, ahora que la veía con atención y la veía como mujer, notaba muchas cosas que antes no. Sabía desde la primera vez que la vi que conformarse, para ella no era una opción. Por eso entendía lo resentida y dolida que estaba con el asunto de que mi hermano, no hubiera sido capaz de enamorarse de ella. Deja caer su vestido al suelo, es blanco y de ese tipo de tela que brilla. No puedo evitar suspirar cuando veo que solo tiene puestas unas bragas blancas, que se vean perfectas en esa piel tan blanca. No puedo detener mis pasos una vez que se enciende el deseo de tenerla. Sus pechos me rosan por debajo de los pectorales y se sienten erguir. No lo dudo más bajo la cabeza y comienzo a besarla.

-Tenemos que ser rápidos o llegaremos tarde- le susurro al oído.

-Bien, puedo conformarme esta vez- dice entre suspiros, con una voz dulce.

Sus manos descansan en mi cuello y hombro, son suaves, cálidas y pequeñas. No puedo evitar ponerle una mano cerca del cuello y la otra la dejo divagar por sus pliegues, tengo que prepararla si quiero hacerlo rápido. La piel de sus labios es tersa, pero no me entretengo en ellos, voy directo por su cumbre, paso la punta de mis dedos y la siento temblar, comienzo un masaje lento, no quiero ser brusco e irritarla. Me dedico a disfrutar de sus besos, ciertamente es la primera vez que nos besamos y me gusta su forma de hacerlo. Se que esta a punto de llegar porqué se agita, suspira y sus brazos pasaron de tocarme a apresarme por el cuello. Gime frustrada cuando retiro la mano de su monte de venus, subo acariciando el costado de sus senos. Pero me arrepiento y la tomo por los glúteos subiéndola en el proceso y ella me enreda las piernas a la cintura para que la cargue para llegar a mi cama.

-¿Segura que quieres esto?- le digo antes de perderme en ella.

Su calor esta justo encima de mi erección y no creo poder parar una vez que este dentro. Fue mala idea sentarmela encima, no voy a poder controlar la situación.

-Muy segura. Necesito enamorarme de ti y aunque no sé si lo logremos, vamos a intentarlo- susurra y me sonrie.

Me besa lento, sensual y profundo. Kim tiene razón... tenemos que enamorarnos o construir al menos una especie de relación a base de confianza. Le acaricio la espalda me bajo el boxer y me froto contra ella.

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Sakura

Cuando Gaara me deja en la entrada y estoy por pedir en el intercomunicador que si me dejan pasar. Llega Itachi en su coche.

-¿Por qué Sasuke no paso por ti?- pregunta.

-Algo tenía que hacer con tu mamá-.

Itachi no dice más, es demasiado callado con todos en los últimos días. Sasuke esta muy preocupado por él y Shisui bueno tomo su decisión pensando en el futuro de Itachi.

-¿Qué demonios hace Kim aquí? Terminamos- dice molestó.

Baja del auto sin permitirme decirle algo y se encamina a la casa. Le pregunta a una señora que donde esta Kim y alcanzó a escuchar que dice que con Shisui. Esto no va a acabar bien y aún no comienza la dichosa cena. Ve a Itachi que ya esta en lo alto de la escalera y lo sigo. Los gritos comienzan antes de que yo termine de subir.

 
Shisui

Estoy casi por llegar a mi orgasmo, cuando Kim alcanza el suyo. Esta recostada contra mi hombro mientras yo la sigo ayudando a subir y bajar. Pero se abre la puerta y antes de nada. Itachi comienza a gritar.

-¿Qué demonios significa esto Shisui?- grita.

-Largate de aquí Itachi- le grita Kim.

Le lanza una almohada a la cara. A mi pesar se baja de mi y yo le ofrezco la toalla para que se tape la desnudez. Solo atino a subirme los boxers para cuando Itachi me suelta un golpe en la quijada.

-No Itachi- grita mi prometida.

-Dejalo Itachi- grita Sakura y le detiene el puño antes de que me impacte de nuevo.

-Tú no te metas Sakura- grita la avienta al suelo.

Mi padre entra y detiene a Itachi. Lo saca del cuarto y antes de salir, le ofrece la mano a Sakura. Ella acepta y lo sigue afuera. Dejándonos a Kim y a mi solos. Ella empieza a reírse de forma histérica y yo no puedo evitar abrazarla y darle un beso en la cabeza.

-No pensé que se portaría tan ... mmm idiota- vuelve a reír.

-Le acabas de herir el orgullo- digo.

-Pues él me hizo lo mismo- suspira -¿He pasado la prueba?- pregunta de forma tímida dando la vuelta por completo al tema.

-Pensé que él que estaba a prueba era yo- le sonrió aun abrazados.

Kim es bonita, me gusta su sonrisa y apostaría todo lo que tengo por esos bonitos pechos.

-Pues la haz pasado- se pone de puntitas y me besa.