El sonido de la alarma me sacó lentamente del sueño. No fue una mañana cualquiera; desperté con la certeza de que hoy daríamos otro paso importante en este camino. La cita para mis primeros análisis de sangre era temprano, y aunque sabía que era solo un procedimiento de rutina, no podía evitar sentirme un poco ansiosa.
Me giré en la cama, encontrándome con Charlie todavía dormido, su respiración tranquila y su rostro relajado. Sonreí. La noche anterior habíamos hablado sobre lo importante que era empezar con todos los cuidados médicos adecuados. Ahora que habíamos visto al bebé en la ecografía y escuchado su diminuto pero fuerte latido, todo se sentía más real.
- Charlie...- susurré, deslizando mi mano sobre su brazo.
Él gruñó levemente, pero no abrió los ojos.
- Cinco minutos más...- me dice en susurro.
- Si seguimos así, llegaremos tarde.- dije con una sonrisa.
Su única respuesta fue abrazarme más fuerte, acurrucándome contra su pecho.
- Tienes que levantarte, vamos a hacerme los análisis.- insistí, riendo suavemente.
Charlie suspiró y finalmente abrió los ojos.
- Está bien, está bien... pero prométeme que después desayunamos algo rico.- me dice.
- Lo prometo.- le digo
Después de unos minutos de pereza matutina, logramos ponernos en marcha. Nos preparamos rápidamente y salimos rumbo al laboratorio, con una mezcla de emoción y nervios.
El laboratorio estaba relativamente tranquilo cuando llegamos. La recepcionista, una mujer de mediana edad con gafas y una sonrisa amable, nos recibió con un asentimiento.
- Buenos días, ¿tienes cita?.- me pregunto.
- Sí, Amelia Montana.- respondí, sintiéndome un poco tensa.
La mujer tecleó en la computadora y asintió.
- Perfecto, puedes pasar a la sala de toma de muestras en unos minutos.- me dice.
Charlie y yo nos sentamos en la sala de espera, donde otras personas también aguardaban su turno. Él, tratando de aliviar mi nerviosismo, comenzó a hacerme bromas.
- ¿Crees que me den un premio por acompañarte? Tal vez un sticker de "valiente compañero de embarazada".- me dice riendo.
- Si te portas bien, a lo mejor te consigo uno.- le respondí, sonriendo.
- ¿Y si te desmayas con la aguja? ¿Me dejarás hacer un video?.- bromeó, haciéndome reír.
- Jamás.- le digo amenazándolo con mi mirada.
La enfermera me llamó poco después, guiándome hasta una pequeña sala donde me indicó que me sentara en una silla especial con apoyabrazos.
- Vamos a extraer varias muestras de sangre para tus análisis prenatales. Haremos pruebas de anemia, glucosa, grupo sanguíneo, y revisaremos tus niveles hormonales, entre otros. explicó con voz tranquila
Asentí, tratando de no mirar la aguja mientras preparaba todo. Aunque no tenía miedo a las inyecciones, la sensación nunca era agradable.
Charlie, que se había colado en la sala, me observaba con atención.
- Si quieres, puedo sostener tu mano.- me ofreció con una sonrisa burlona.
- No hace falta.- dije con fingida valentía.
La enfermera sonrió antes de insertar la aguja en mi brazo con suavidad.
- Lista. Solo unos segundos.- me dice.

ESTÁS LEYENDO
You bring me home (Charles Gillespie)
RomanceElla una chica cualquiera que viendo una serie se enamora del protagonista. El un actor que interpreta a un fantasma en la nueva serie de netflix Julie and the phantoms. ¿Se conocerán? ¿En que circunstancias? ¿Triunfará el amor a fin de cuentas...